Capítulo 34

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Mi sonrisa nerviosa me delataba, porque aún cuando Naruto estaba ensimismado disfrutando su ramen yo no podía evitar sonreír debido a su compañía.

-Señor, otro de miso y puerco- dijo alzando el tazón vacío.

-A la orden- Naruto sonreía mientras el chef preparaba su nuevo plato.

-Oye Shikamaru- nuestras miradas se encontraron y eso me hizo sentir más nervioso  -¿Acaso no tienes hambre?-

-¿Eh?- dije saliendo de mis pensamientos- Me gusta disfrutarlo a mi ritmo- mentí, la verdad es que me había distraído contemplándole.

-Bueno, como tu digas- dijo encogiéndose  de hombros. Yo seguía comiendo, honestamente no sabía que decirle. Me sentía nervioso con todo esto de la cita,  aunque me considero un buen estratega, tenía que admitir que era un asco en esto... mis nervios me traicionaban.

Tras un silencio, el rubio recargó su cabeza en la mesa, suspirando pesadamente.

-¿Qué sucede?- pregunté al notar como sus azules ojos se mostraban decaídos. Acaricié su cabello intentando animarlo.

-Solo extraño al abuelo- dijo con tristeza, y mi caricia intentaba consolarle. -No ha sido fácil, y entiendo que para nadie de la aldea lo ha sido... pero cada que veo mi chaleco no puedo evitar lamentarme que él no haya estado para verme ascender a chunin.-

-Naru... tu sabes que lord Hokage siempre supo que eras un ninja formidable, aun cuando eras su dolor de cabeza con tus bromas- Naruto no pudo evitar soltar una risa burlona.

-Recuerdo cuando se enojó de mi fotografía de certificado ninja- seguía riendo.

-Créeme que yo también tenía serias dudas del porque de esa foto- Naruto río nuevamente. -Me gustas más cuando sonríes- dije sinceramente.

-Todo es gracias a ti Shika, me has hecho recordar los buenos momentos con el abuelo-

-Y aun si no esta ahora, siempre es mejor recordar los buenos instantes y estoy seguro que siempre estuvo orgulloso de ti-

-Enserio gracias- el chico se levantó de su asiento para abrazarme. -Aunque soy feliz por convertirme en chunin, me había sentido miserable de ser feliz cuando el abuelo ya no esta-

-No tenías que cargar con eso tu solo-

-Lo sé Shika, pero me era difícil, pero ahora entiendo que debo seguir adelante- sonrió y yo lo acerqué más a mi en el abrazo.

-Sabes que siempre estaré para ti- sentía que mi corazón se aceleraba por la cercanía.

-Hmmm- un ligero quejido nos separó -miso y puerco listo- dijo el chef y Naruto saltó emocionado para recibirlo.

Lo miré de mala manera ya que había interrumpido el momento.

-Lo siento pero Naruto no me perdonaría si se enfría-

-Así es, este manjar de dioses sabe mejor recién hecho- dijo para sorber con emoción sus fideos.

-Gracias por ser un cliente conocedor- dijo con una sonrisa satisfecha. -Incluí un huevo extra cortesía de la casa para el nuevo chunin de la aldea, esperamos grandes cosas de ti muchacho-

-Muchas gracias señor, no los decepcionaré- dijo con una gran sonrisa, sin duda me daba satisfacción ver como Naruto podía ser valorado.

-Y tu muchacho será mejor que cuides muy bien a mi mejor cliente- me señalaba con su cucharón.

-Si señor- asentí nervioso, sintiendo mis mejillas arder ya que había sido muy evidente para él mi situación con Naruto.

...

-Enserio eres el mejor Shika- decía Naruto mientras caminábamos fuera de Ichiraku.

-No es para tanto- negaba nervioso.

-¿Enserio?- dijo con una sonrisa divertida. -Entonces la próxima vez intentaré comer 12 tazones, no ¿sabes que? Mejor 15. Si dices que no fue para tanto, es porque tienes razón en que puedo comer más de 10-

-Tonto no me refería a eso- suspiré cansado.

-Bueno pero no tienes que pagar por mi- dijo mirándome serio. -Te lo agradezco, se que te preocupa mi situación económica, pero yo siempre he sido capaz de mantenerme. Yo sé que no siempre me va bien, pero yo no quiero ser una carga para los demás- conociéndolo se había molestado porque lo llame tonto.

-Naruto, nunca te consideraría una carga-

-Lo sé- me sonrió sincero. -Por eso siempre hemos sido mejores amigos- no podía permitir seguir sintiéndome en la Friendzone.

Sujeté su mano -Sígueme- le dije mientras lo jalaba al bosque.

-¿Qué pasa?¿A donde vamos?- decía constantemente mientras nos alejabamos del centro de la aldea.

-¿Confías en mi?- le miré con seriedad.

-Que clase de pregunta tonta es esa- se quejó. -Te confiaría mi vida Shikamaru- esa respuesta aceleró mi corazón, pero sin duda confirmó lo que estaba por hacer.

-Entonces cierra los ojos- estaba por rechistar cuando lo miré con burla.

-Bien- dijo y cerró los ojos. En ese instante lo cargué en mis brazos.

-¡¿Qué haces?!-

-Si confías en mi, prométeme que no harás trampa y abrirás los ojos hasta que te diga-

-Como sea, solo porque eres tu Shika-

Saltaba entre las ramas de los árboles, y mi corazón latía aún más agresivamente. Pero no había momento para arrepentimientos.

-Bien llegamos-

-Al fin- dijo para bajarse emocionado y abrir los ojos, que en un instante aquel azul se llenó de sorpresa.

Así es, había cedido ante las locuras de Ino, y ahora me encontraba en un lugar lleno de luces que mi amiga me había ayudado a decorar.

-¿Conoces este lugar?- Naruto negó aun en su asombro por las luces -Es triste que no lo recuerdes, porque aquí es donde un niño rubio me aplastó y cambió mi vida para siempre- dije sujetando su mano.

-Jajaj es cierto- reía feliz -Recuerdo que estuviste enojado conmigo una semana, pero me perdonaste y nos volvimos mejores amigos-

-Naruto, me es difícil cuando me dices eso- dije con firmeza.

-¿Eh? ¿Acaso sigues enojado? Creo que ya te he pedido perdón un millón de veces- se cruzó de brazos.

-No es eso... Me duele que solo puedas pensar en mi como un amigo- dije acercándome más a él, Naruto no parecía rechazar mi cercanía. -Yo quiero que puedas considerarme algo más que un amigo- dije y sin dar oportunidad a una respuesta lo besé.

Sentía como nuestras respiraciones eran agitadas, y no parecía rechazarme, al contrario, mostraba corresponder mi contacto.

Nos separamos lentamente al sentir que nos faltaba el aliento, pero Naruto me evadía con la mirada mientras sus mejillas estaban de un intenso carmesí.

-Naruto...-él se negaba a mirarme, pero no perdería mi oportunidad, sujeté su rostro con suavidad y lo dirigí a mi-Yo siempre he sido un perezoso de lo peor y tu mejor que nadie lo sabe, pero por ti he hecho más de lo que creí que sería capaz. Solo porque quiero verte feliz, porque quiero protegerte y quiero ganar tu corazón. Estar a tu lado ha sacado lo mejor de mi, tu me motivas e iluminas mi vida. Así que no puedo evitar sentir lo que siento... Naruto, ¿querrías ser mi novio?- si finalmente lo dije...

Lágrimas comenzaron a descender de los ojos del rubio, y una sonrisa se dibujaba en su rostro, pero lentamente aquella brillante sonrisa se desvaneció.

-Shika... yo... yo... no lo sé- dijo para separarse abruptamente. -Mañana me iré a una misión, y quizás este tiempo me ayude a pensar las cosas... lo siento- dijo para irse rápidamente sin mirar a tras.

Me sentía destruido, me sentía rechazado... honestamente no había salido como planeaba. Me tiré al suelo y comencé a llorar de la frustración.

ShikaNaru - Que fastidio con el amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora