Capítulo 4

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— ¿Qué hac-

— Shhh. — Christian la hizo callarse para terminar de machacar las pastillas antes de ponerlas en cada uno de los recipientes con ponche. — Estoy dándote una ayudita para que al fin te folles a Ander.

— No tengo que meterme esa mierda para follarme a alguien. — La chica dijo, este se encogió de hombros antes de llevar su dedo a su boca, haciéndole señal de que hiciera silencio. — Si alguien se muere aquí, va a ser tu culpa.

— Bien, acepto los cargos. — Este sonrió, tirándole un beso antes de alejarse a servir mas soda en los ponches.

— Vale, ¿como me veo?

— ¿Cuál es la ocasión? — La chica pregunto a Samuel, quien se veía algo preocupado en ese momento.

— Le va a decir a Marina qué le gusta.

— Ah... — La chica lo miro de arriba a abajo después de las palabras de Omar, inclinando la cabeza, esta iba a decir que estaba bien, sin embargo, Samuel la interrumpió, diciendo que iría a cambiarse, negando, la chica continuo con su trabajo, poniendo los vasos en su lugar.

Viendo como Christian ponía más pastillas en el poche, la chica miro a Nano, señalando al menor. — Mira lo que esta haciendo este imbecil Nano.

— ¿Qué haces idiota? — El mayor dijo, moviéndose para ver a Christian ponerle unas pastillas más al ponche.

— No dejes que Samu te vea. — La chica se quejo, tomando la bolsa de pastillas, pasandoselas a Omar, quien las guardo con cuidado en su bolsillo, justo cuando el chico se adentro a la sala.

— ¿Esto es sangría?

— Ponche. — Vale corrigió, dejando el último paquete de vasos en su lugar.

— No lleva alcohol, pero este se ha pasado con el azúcar, así que, ustedes dos... — El hombre señaló a la chica y así hermano. — A cervezita.

La chica asintió, dándole un golpe a Christian, quien se rio un poco ante como el mayor lo había mirado. — Bueno, iré a cambiarme, ¿puedo usar la ducha? — La chica pidió a Nano, quien asintió antes de señalar a Christian.

— Nada de estupideces. — El mayor dijo, el más bajo levanto las manos en rendición antes de llevar el cigarrillo a su boca.

— Mi colega ya la fichó, la tengo prohibida hermano. — La chica le mostró su dedo medio antes de darse la vuelta, quería tomar una ducha, ya le hacia falta.

Cuando la fiesta comenzó unas horas después, la chica se encontraba con una cerveza en la mano, bailando justo a Christian mientra ambos se reían de algo que quizá haya sonado estúpido a sus oídos de borrachos. — Vamos, un ponchesito.

— Vete a la mierda, la última vez casi termino en el hospital. — La chica dijo, empujandolo un poco antes de llevar su cerveza a la boca, cuando su amigo le señaló algo, esta volteo, viendo el bonito cabello ruloso de Ander, quien hablaba con Samuel, el qué se veía algo confundido.

Sonriendo, esta camino hacia ellos, abrazando al más alto por la cintura, esta miro a su amigo. — Lo invite yo, dijiste que estaba bien.

— Nunca he dicho que no. — Esta sonrió, lanzandole un beso antes de ver a Ander, quien le dio una botella de alcohol que este había llevado consigo antes de que la chica lo jalara con ella, el ruloso noto lo borracha que estaba.

— Guapa, ¿cuanto has tomado?

— ¿Yo? — Esta miro la botella en su mano, frunciendo el ceño. — Unas... Seis... O más, no lo se, no estoy borracha si es lo que piensas.

𝐋𝐈𝐄 𝐋𝐎𝐕𝐄𝐑𝐒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora