Sus ojos sobre mi X Jujutsu Kaisen

Capitulo 5

- Mientras empieza a asomarse el sol, la joven de ojos grises suspira dormida, cuando siente una mano que le da una caricia en la mejilla.

- Esto hace que la chica se despierte asustada…


- Que haces aquí?-
SG:- Tranquila, no te haré daño, solo quería saber cómo estabas- ya se había percatado de los ojos rojos de la chica, señal de que habia llorado bastante, esto le provocó más culpa al ojiazul.

H:- Eso no te interesa, sal de aquí, no quiero verte-
SG :- Mira se que anoche, nos dejamos llevar ,te dije cosas que no eran las apropiadas, ahorita voy de salida y la verdad no me quiero ir de aquí sintiéndome asi, entiende me frustre, a mí nadie me dice que no, solo no quise decirte eso, no era mi intención hacerte llorar….-
- Discúlpame-
- De salida? A donde?-
- Me enviaron a un pueblo que está a dos días de aquí, no es algo de preocuparse, pero trataré de terminar lo más pronto posible-
- El mayor se sienta sobre la cama aun lado de la joven.
SG:- Entiendo, como te sientes quizás es mucha presión para ti, el estar aquí, el peso de tu padre, no creas que no-

- Tengo mi orgullo y no dejo que nadie pase por encima de mi-
H:- Eso no era lo que yo quería, solo te dije que no se puede, imagína que dirán si se enteran que me acosté contigo, osea no es por el echo de acostarnos, sino que el problema es…tú-

-Yoooo??!!- Brinco de la cama- yo que problema puedo tener, no hay ninguno, si  lo dices por la fama que tengo de mujeriego, pues si, lo soy, pero como te dije anoche no te estoy pidiendo que andemos-
H:- No te estoy diciendo eso, Satoru, yo tampoco te considero en ese sentido, no es por ser mujeriego, ni estoy enamorada de ti, es solo que… No podría soportar que mi papá crea que solo vine hasta acá para terminar acostándome contigo-

Pov Gojo
Me dejo caer sobre el sillón que está aun lado de la cama, miro el techo por unos minutos y vuelvo la mirada hacia ella…
SG:- Y si guardamos muy bien el secreto?- digo mientras sonrío de lado
- Ella solo se sonrojó ante el comentario-
- Que?!! No me estás escuchando, todo se descubre tarde o temprano Satoru..

- No, no es así- me pongo de cuclillas al borde de la cama- si tú te quedas callada y yo también podemos pasar muchos momentos agradables, piénsalo-
- Me tengo que ir- le beso la frente y desaparezco frente a los ojos grises de la chica.

Pov Hiromi
- No sé ni que pensar, la noche anterior estuve a punto de acostarme con el, me hizo llorar, sentir mal y ahora viene por la mañana ha despedirse y pedir perdón.


H :- “Que demonios acaba pasar!! Cómo, en que momento termine enredada así, con el, ósea anoche si, lo acepto, fue un impulso, es muy guapo y tiene un cuerpo que tienta pero como es que estoy en esta situación!!”-

- piensa la chica mientras toma el teléfono de la mesita de noche, pide que le manden solo jugo de  desayuno y les pide que le avisen a su chófer que saldrá para que aliste su coche.

- Me levanto de la cama,tomo un baño, tomo una playera sencilla y unos pantalones claros, me trenzo el cabello y me maquillo bien, después de pasar toda la noche llorando,me veía un poco ojerosa.
- Tocan su puerta, es el de servicio con su jugo, un paquete y unos sobres.

H:- Adelante -el chico pasa y le entrega  el paquete.
Chico de servicio:- Buen día señorita le dejaron este paquete y estás dos cartas también le comento que hablaron del servicio de telefonía, ya quedó su celular con el servicio de aquí-

H:- Enserio!! Que gusto, justo a eso saldré, muchas gracias-
- El joven salió dejando a la chica de ojos grises por abrir los sobres…

“ Para mi princesa.”
-Decía el paquete café con listón azul que le habían dejado.
“Papi”- pensó la chica morena mientras cerraba los ojos.
- Los sobres no tenían remitente, pero abrió el primero que también provenía de su padre…
Hiromi:
“Quiero que tengas contigo este brazalete, era de tu madre, no te lo había dado por qué lo mandé traer desde muy lejos, ella quería que lo tuvieras, así que espero que lo portes y te veas tan hermosa al igual que ella”
Te ama, tu padre.
- Saco el  brazalete, era de piedras moradas, con hilos en color plata, en medio se observaba un dije, con una flor dibujada rodeada de un sol, una gota de agua y algo que parecía como ondas de viento.
- La joven solo lo ve sorprendida, se emociona tanto por el regalo.

- Tomo el brazalete, lo beso y  guardo en un cajón.

- Abre el otro sobre, es una carta de Sabine, su mejor amiga.

“Peque, espero que estés muy bien, no he podido localizarte, me urge hablar contigo, recuerdas al chico con el que bailaste? Me pidió tu número, no se si te  haya marcado pero no te molestes conmigo, porfa.
Márcame cuando puedas, te quiero.”

Sabine.
Hiromi:- ¿¡Que??! Cómo pudiste Sabine?! – guardo la carta junto con la de mi padre en el cajón de la mesita de noche.

- Suena el teléfono*

Servicio:- señorita, llegó su chófer-
- bajo enseguida, gracias-
- Bajo rápidamente, hasta la puerta de entrada al colegio, ahí encuentro a Waldo.

H:- Waldo, buenos días, como estás? No me has extrañado?- le digo sonriendo, después de todo el me cubre en todo lo que hago y la verdad lo he extrañado…
Chofer:- Buenos días señorita, que gusto verla bien, claro que sí, recibió el paquete de su padre?-
- Si Waldo, era un brazalete que perteneció a  mi madre-
- Que bueno señorita y adónde irá hoy?-
- Vamos al servicio de telefonía, por mi celular, también quiero comprar un poco de pintura, quiero darle mi toque al consultorio y oficina del colegio antes de que empiecen las clases-
- Muy bien señorita, nos vamos enseguida-

- Sale la camioneta del colegio rumbo a la Ciudad.
- Así transcurre el día, paso por mi celular y de compras en el centro de la ciudad, por fin había conseguido un celular con un número telefónico de Tokio, para mí buena suerte pudieron asignarme el mismo , ya que cuando recién llegue a Tokio, aún lo tenía pero me dijeron que me lo darían de baja a las 12 am justo el día que me reuní con los chicos.

- Mientras tanto Gojo Satoru, se encarga de las maldiciones en la misión que le habían encargado, pero aún tuvo que quedarse días extras para cerciorarse que no quedaban residuos de maldiciones.

*Sonido de celular llamando*
Hiromi:- Vamos peque, contesta!!
Sabine:- Nena!! Dónde estabas?, te he estado buscando por todo Tokio, hasta a tu padre le llamé-
- Jajaja tranquila Sabine, estoy bien, el celular lo mandé a arreglar ,me dieron el mismo número , oye explícame eso de que le diste mi número a un desconocido-

- Aah si, sorry peque, pero te marco o no? Era un desconocido muy guapo, además el insistió mucho en que se lo diera, lo dejaste cautivado jajaja-
- Cállate Sabine, ese chico es un total desastre no te dije pero el día del antro, por error entre a la sala donde se encontraba, lo encontré teniendo sexo!!! Ahí en el sala VIP!!-

- QUEEEEEE!!!!! Es enseriooo!! -grita la amiga desde el otro lado de la línea – no sabía que se podía hacer eso jajaja-
- Claro que se puede Sabine pero no es correcto – se ríe de la ocurrencia de su amiga
- De camino al colegio sigue platicando con ella.
- Bien peque , te dejo tengo unas citas pendientes-
- Si está bien, oye una cosa, en cuanto puedas, necesito verte, necesito hablar contigo de algo-
- De algo? De que?-
- No puede ser por teléfono-
- Ooh… entiendo, no te preocupes me daré un tiempo en estos días para vernos-
- Gracias Sabine, nos vemos-
- Y márcale a Toji ha andado muy tenso estos días, me lo tope ayer y fumando mucho, no lo oíste de mi eh-
- Está bien, gracias Sabine-
- Bye-

“ Toji, ahora que te tiene asi”
- Piensa la chica, mientras baja de la camioneta y les dice a los de servicio que bajen las cubetas de pintura de la cajuela.

- Me despedí de Waldo, camino a mi cuarto,acomodo unas bolsas de ropa , saco el brazalete de mi madre y me lo pruebo…
-“Es tan hermoso”
-“ si era de mi madre , ha de ser muy antigüo, quizás ha pasado de generación en generación “.

- La chica termina de abrochar el brazalete y le recorre un escalofrío por el cuerpo…

- Vaya eso no lo esperaba- dice la chica mirándose al espejo.


- Bien, ahora le marcare a mi osito
*Sonido de celular llamando*

- Una voz ronca suena del otro lado del celular
- Hiro, eres tú amor, como estás?-
- Osito!! Porque te oyes así? Te desperté?-

- Si, muñeca, estaba dormido, tuve doble guardia anoche en el hospital-


- Oh lo siento Toji no quise molestar-

- Jamás molestas Hiro, me da gusto que me hayas hablado, pero es tu mismo número? No lo cambiaste?-


- No, pudieron darme el mismo número-
- ya me hacía falta escuchar tu voz-
- Si osito a mi también, oye gracias por las flores me encantaron-
- Que gusto muñeca, como te has sentido en ese lugar, eh?-
- Bien, muy bien, todos han sido muy atentos y voy muy bien, estoy un poco nerviosa pero lo superaré-
- Nerviosa?, tu Hiromi? Jajaja me sorprenden esas palabras juntas-
- Toji, tengo sobre mi los ojos de mi padre y los del director, aparte quiero realizar mi mejor trabajo haciendo mi investigación-

- Lo harás, te lo aseguro, no tienes de que preocuparte-
- Gracias papi, siempre me apoyas, por eso te adoro, oye ya me dijeron que estás fumando demasiado-

- Debería darle las gracias a Sabine? Por haberte dicho? Jajaja- dice sarcásticamente el hombre en la línea


- No Toji ,hablo enserio, deja de fumar tanto, es porque me extrañas?-
- En parte muñeca, pero he tenido mucho trabajo, pero te prometo que ya no lo haré tan seguido-
- Lo prometes?-
- Claro muñeca, te dejo me daré un baño-
- Cuídate Toji-
- Y tú también mi reina, no te preocupes, te veo el próximo fin-
- Besos, papi-
- Bye-
- La chica voltea hacia el arreglo de flores de su amigo
“ Toji, no soportaría que te pasará algo” – piensa la chica mientras se sienta en la cama.

- Me recuesto, me viene el recuerdo de lo que pasó, la noche anterior con el mayor…

- Me toco los labios con los dedos, la imagen del joven de ojos azules en mi mente, me eriza la piel.

“ si tú te quedas callada y yo también, podemos pasar muchos momentos agradables, piénsalo”
- Recuerda lo que le dijo el sensei antes de partir esa mañana.

H :- No! Cómo voy a pensar en eso, me hace mal estar aquí!!-
-Mejor voy a recorrer el colegio-
-Cierro la puerta del cuarto y camino por los pasillos del lugar, observo el jardín donde practican los alumnos, cuando veo que uno de ellos se empieza a comportar raro…
H :- Yuji!!!-
Grita la joven al ver cómo el pelirosa cae al suelo después de haber estado levitando

- Los demás alumnos ven de lejos que cae el chico y van a ayudar
- Fushiguro ayúdame a llevarlo al consultorio por favor- le dice la doctora al pelinegro mientras toma al pelirosa de los brazos, en eso llega corriendo Panda y lo carga para poder llegar más rápido

- Deprisa panda ,pasa, recuéstalo aquí-señalaba la camilla, mientras se disponía a empezar a curar al joven que se había abierto la cabeza por la caída.


- Mientras lo curo con mi técnica, siento que me toman de las muñecas, al joven tendido le salen dos ojos mas en su rostro y bocas en cada lado de las mejillas, era más que evidente que no era él mismo ya que tenía una sonrisa siniestra…

Sukuna:- Vaya, pero que tenemos aquí? que manera de darme la bienvenida!- dice una voz burlona
H:- Sukuna!
Panda:- oh no! Yuji despierta!! Vamos amigo reacciona!- dice el enorme panda que gruñe al oír esa voz
Megumi:- Maldito!! Devuélvenos a Itadori!- el joven se pone en guardia
Sukuna:- Cállense, ustedes son inferiores a mi, ni deberían tener la osadía de estar en mi presencia-
- La chica traga saliva y observa al pelirosa que no es el chico dulce que habia conocido.

- Ya basta Sukuna- le dice la joven mirándolo directo a los ojos- no te tengo miedo-
Sukuna- Deberías tenerlo, tu ni siquiera tienes el poder que tenía tu madre, no eres nadie contra mi-

- Conociste a mi madre?- me sorprendo al oír eso.

- El joven poseído se lanza sobre la chica y le empieza a arrancar la ropa, le desgarra la blusa, arañándola del cuerpo.


- Ríe maliciosamente- Claro que la conocí, fue una de las tantas sacerdotisas que quisieron deshacerse de mi y que falló, así que dime tú qué posibilidad crees tener contra mi?!!-

- Le grita el cuerpo que le servía de recipiente a la maldición.


- La chica está en shock, mientras los otros dos estudiantes se encuentran tratando de romper la burbuja roja donde había encerrado a la chica junto con él, para que no se acercaran….

Megumi:- Maldición!! Y sensei Gojo no esta cerca, Panda ve y busca a los demás, tenemos que salvar a la doctora Diatsu-


- El gran panda corre por los pasillos pidiendo ayuda a quien se encontrará cerca

- La chica de ojos grises solo se encontraba pasmada ante la presencia de la maldición que le seguía diciendo palabras ofensivas sobre su madre…


- No eres nada, siquiera tu estúpida madre me enfrentaba pero tú? Mírate ,temblando!-

- Se carcajea ante la joven que no puede controlar el temblor de su cuerpo
- La chica cierra los ojos, comienza a llorar, piensa en su padre y en como iba a sufrir si algo le sucediera…

- De pronto siente una paz y unas voces le invaden la cabeza
- “Rezos?! Quien está rezando?!”- pienso  confundida por lo que sentía y escuchaba en mi cabeza

- La maldición que tenía encima de ella seguía hablando, pero ella no lograba entenderla, hasta que veía como acercaba su lengua larga hacia su rostro y sentía como le lamía la sangre de los rasguños que le había echo.
- Eres tan dulce!, como disfrutare tu sabor en mi boca!-

- El cuarto donde se encontraban se ilumina de color púrpura, siendo luz que salía del brazalete de la joven, el pelirosa transformado solo se tapo los ojos por la luz, cuando voltea a ver el rostro de la chica

- Tu!?? Maldita zorra!! Vuelves otra vez a enfrentarme Enith?!!!-

- Toma a la chica por el cuello, comenzando a dejarla  sin aire, cuando de pronto la maldición observa como se le cambian de color los ojos a un color púrpura a  la chica, la cual cambia la expresión de su rostro por una sonrisa de lado

- No te desharás de mi Sukuna, no descansare hasta llevarte conmigo al infierno…-

- Pero la voz que salía de su boca, no era la de ella, sino de alguien más…

- Toma las manos de él, para quitárselas del cuello y empieza a hablar en otro idioma

- Cállate maldita! Está ves y las que sean necesarias te mataré-

- La chica seguía en un tipo de trance, con los ojos brillando en un color púrpura, el brazalete que era de su madre brillaba aún más

- Logra quitárselo de encima, lanzándolo  hacia la pared, esto hace que la burbuja que tenía para que no pasaran los estudiantes se desapareciera

- La chica toma una bocanada de aire al poder volver en si, rápidamente voltea buscando al chico que había lanzado lejos, era Sukuna pero estaba en el cuerpo del chico dulce que había conocido hace días.

- Megumi que había visto todo lo que aconteció, no podía procesarlo…



- Megumi!!! Reacciona! – escucha los gritos que se dirigían de la joven que apenas se podía levantar

- Doctora, no se levanté hasta que se recupere, que fue lo que acaba de pasar? Usted se zafo sola de Sukuna-



- Se pasa el brazo de la chica por encima del cuello y trata de llevarla a una de las camillas

- Hiromi:- Nose que sucedió ,solo se que tengo que revisar a Itadori, tráemelo, rápido-

- Si, voy.

- El chico, solo le quita de encima pedazos de la pared al joven que se encontraba desmayado, con heridas en sus brazos

- Pásamelo, quítale la ropa-

- rápidamente le quita la ropa el pelinegro, dejando al chico pelirosa en la camilla desnudo

- Hiromi pone en práctica su técnica, rápidamente cura al joven quedándole unos cuantos rasguños pequeños

H-: vamos niño, reacciona!- le dice al cuerpo tendido del chico

- Los demás estudiantes llegan al lugar y ven el consultorio destruido, se dan cuenta que el joven pelirosa está tendido y desnudo en una camilla mientras la doctora lo cura y le grita que reaccione…

- El chico logra abrir los ojos- vaya siento que me pasó un camión encima o como si me hubiera golpeado sensei Gojo- todos a su alrededor comienzan a llorar y reir  por lo que había dicho el joven.


- La chica de la alegría que le da,lo abraza sin pensar que se encontraba totalmente desnudo

- Yuji!! Que gusto me da!! – le digo mientras me abrazo a su cuello


- Los demás están sorprendidos ante el gesto de la joven pues el chico está desnudo y ella también de la parte de arriba

- El pelirrosa corresponde el abrazo y solo ve las caras de sus compañeros haciéndole señas
- No comprende hasta que siente algo más que la piel de la joven doctora
- La chica reacciona y se despega del joven que estaba más que rojo por la pena que le dio al ver a la doctora.

- Rápidamente Megumi me pasa una toalla para que me tape


- Yuji perdón! No quise hacerte daño, de verdad, no se lo que me pasó, estás bien? Cómo te sientes?-

- Le decía la ojos grises mientras le sobaba el rostro al chico
- Me siento de maravilla, nose que paso, solo recuerdo que Sukuna salía de mi y me encontraba como en un tipo de trance-

- Le hice daño señorita??!-
- No Yuji, tranquilo estoy bien solo me arrancaste la ropa por –

- El chico no podía ponerse más rojo ante lo que le decía la doctora
- De verdad lo siento no era mi intención, yo lo siento mucho-
- Tranquilo, tu estás bien y yo también, no pasa nada-
*Le sonrió a yuji dulcemente*