Abro los ojos y la veo parada en la estancia con dos botellas…
—¡Sabine!— me paro enseguida, la abrazo y no la suelto
—¡Pequeña!—
— Te dije que nos veríamos y te cumplí— me acaricia un poco el cabello y me toma de la mano para sentarnos en la alfombra
—No sabes el gusto que me da verte, te extrañé—
— Losé Hiro y todo es gracias a este chico grandote, cierto?—
Él sonríe y guiña un ojo.
— Gracias chicos— evito derramar unas lágrimas de emoción.
— Pero Hiro no es para que llores— se burla de verme haciendo pucheros
—¿Andas sensible? No estarás embarazada cierto?— me mira asustada
— QUÉ!! NO POR SUPUESTO QUE NO!!— alzo la voz y dirijo mi vista a Toji que ya me estaba atravesando con la mirada
— Que tonterías dices Sabine, ella no está así por eso!!— se acerca a mi abrazándome
— Ella está así por otro motivo!!— abre los ojos haciendo señas…
La chica capta la indirecta.
— No… no me digas que— mira a los dos esperando respuesta
Toji me da la mano para darme ánimos
— Volvió?!— duda en preguntar
—Creo que si— respondo, ella se acerca a abrazarme junto con Toji
— Hiromi mírame… lo viste? Ya se comunicó contigo?—
— No, solo es una suposición, pero creo que si se trata de él—
— Ese maldito te va a seguir hasta el fin de mundo o que?—
Sonrío algo nerviosa…
—Pues justo esa fue una de sus promesas, una de tantas— me abrazo a mi misma y me siento en el sofá
— Oh pequeña no te preocupes, todo estará bien no quise decirlo de esa manera— se acerca a mi lado,
—Ey chico malo, trae unas copas— le ordena al pelinegro, a lo que el le da una mirada amenazante y camina hacia la cocina.
—Bien, dime qué pasó exactamente—
Le platique sobre lo que pasó con detalles, por alguna razón no creí que era momento de hablar sobre Satoru, quizás por Toji o porque no quería tocar el tema.
Transcurrió la noche, ya estaba por quedarme dormida en los brazos de Sabine cuando sentí que me hablaron al oído, ella ya se habia quedado dormida.
—Hiro… te quieres recostar?—
— Tengo que irme Toji— me quitó el brazo de Sabine del cuello
— Irte? No quieres quedarte conmigo?—
—No es eso— me brinda una mano para levantarme
—Entonces?— me mira confundido
—Mañana tengo la cita con Itadori , recuerdas?—
—Ooh cierto tu cita— rueda los ojos y se cruza de brazos mirándome serio
— Me vas a cambiar por ese mocoso?— se escuchó con disgusto
— Toji, estás celoso?— rio dándole la espalda, camino buscando mis zapatillas
— Celoso?! De ese niño?!— reniega alterado
—Shhhh! La vas a despertar— señalo a Sabine
— Celoso porqué? Me dijiste que no te gustaba, además no es competencia para mi— me dice murmurando
— Calma Toji no seas tan posesivo, vas a comportarte igual que…— me detengo de lo que iba a decir
— Igual a qué? O quién?— me interroga levantando una ceja
Suspiro para guardar la calma.
— Me vas a llevar si o no? pídeme un taxi entonces— termino de ponerme las zapatillas y el está con una cara larga en el marco de la puerta
—Hiromi no me hables en ese tono—
—Responde me llevas o me voy yo sola— me cruzo de brazos y lo miro molesta
— Bien, te llevaré pero dile a ese mocoso que no se pase de listo, escuchaste?—
Lo miro de reojo cuando va a tomar sus llaves…
—Toji?—
—Qué?—
— Mmmmm nada— camino hacia la puerta
Asoma la cabeza por la puerta de la habitación y me mira fijamente
—Qué pasa?—
—Nada— me hago tonta viendo alrededor
—Hiromi?—
—Si?—
Se acerca respirando agitado, me acorrala contra la puerta
— Te gusta sacarme de mis casillas, cierto?— se muerde los labios, mientras sonríe me toma de la cintura, pegándome a él
— Sé que te excita que te lleve la contraria— le acaricio el mentón
— No me excita… me vuelve loco que quieras imponerte— empieza a gruñir cerca de mi oído
— Basta Toji—le beso los labios y me separó de él— coge las llaves y llévame al colegio
— AHH!! AMO QUE ME DES ÓRDENES—
Grita para terminar riéndose, es algo que es curioso en él, si te lo toparas por la calle dirías ese hombre manda y es todo un macho pero, toda bestia se puede domar si aprendes a hacerlo bien…
En el camino de regreso, estuvo algo serio solo volteaba a darme miradas sugestivas y guiñarme un par de veces el ojo.
Cuando estábamos llegando a la terracería en la completa oscuridad, paró el coche y suspiró…
— Hiromi quiero pedirte algo— su rostro era por demás serio.
—Dime, que ocurre?—
—Nada, solo quiero que me prometas que sea cual sea la situación, te saldrás de este colegio si ese maldito vuelve a acercarse a ti—
Paso saliva nerviosa.
—Toji no deberías preocuparte por él—
— Lo hago porque te quiero, porque conozco a tu padre y si ese desgraciado se atreve a volver a tu vida está vez estoy yo para sacarlo de una patada— golpea el volante
— Calma Toji, él no lo hará y si llegase a hacerlo yo… — cierro mis manos con coraje al recordar su rostro,
—yo me encargaré de él— tomo su mano y le sonrió, no quiero preocuparlo ni que vaya a preocupar a mi padre.
Se calma un poco y avanzamos por el camino de terracería.
Llegamos al portón, abren los empleados y me despido de él.
Todos al parecer están descansando, me quito los zapatos para no hacer ruido por los pasillos, son casi las 3 de la mañana.
Cuando estoy por subir las escaleras, lo veo parado viéndome.
Voy subiendo e ignoro su mirada pesada sobre mi
Él no dice nada pero cada paso que doy siento que me quita el aire.
No dirás nada por la hora que llegas?— suelta con disgusto
Paro mi caminar y sin voltear le contesto…
— Mañana tengo un compromiso y es imposible de cancelar— no me responde nada y sigo hacia mi habitación
Se me hizo eterno dar esos pasos hasta aquí.
Camino hacia mi cama y suspiro aliviada…
Poco me duró la tranquilidad.
—¿ Qué haces aquí?—
Veo que se aparece frente a mi cama
Tiene un gesto peculiar en su rostro y la verdad me inquieta
—No me contestaste lo que te pregunté en las escaleras— habla algo golpeado
—Son las 3 de la mañana, podrías retirarte de mi habitación, por favor— trato de verme tranquila
—Quiero que me contestes!— alza un poco más la voz
—Satoru aquí estoy si?!, volví porque mañana tengo un compromiso, cita como lo quieras llamar con Yuji, así que por favor podrías irte!!—,
de verdad estoy demasiado cansada—
— Vas a decirme que te dejo exhausta ese tipo?—
— Lo que me tiene exhausta eres tu y Nanami, qué derecho creen que tienen sobre mi y mi vida aya afuera?—
— Nanami solo trata de protegerte, cosa que creo que es estúpida… tu estás ya grande para que te esté cuidando los pasos—
Suspiro y camino hacia el baño
— Es todo?— le pregunto al pasar por un lado
Pov Gojo
Viene caminando hacia mi y me doy cuenta de algo…
— Es todo?— pregunta ella
La tomo del brazo y la jalo quedando frente a mi
Mi vista se centra cerca de su cuello, veo que trae una marca…
— Suéltame!—trata de soltarse de mi agarre
—Te acostaste con él?—
Ella se pone sería, esconde su nerviosismo
Sonríe de lado
— Que esperabas?— jala su brazo y me mira
Su respiración se agita y parece que el corazón le va a estallar
Yo me enfurezco al pasarme esa imagen por la cabeza
— Podrías dejarme sola?— aunque me mire con molestia, sus ojos esconden algo más
Chasqueo la lengua y camino hacia la puerta, salgo de ahí sin voltear.
Al cerrar la puerta, siento una energía más que negativa, de tristeza y desolación.
Cuando estaba por entrar de nuevo, escucho mi nombre…
— ¿Satoru? ¿Qué haces aquí?—
—Nanami… yo solo pasaba por aquí, tu qué haces aquí?— disimulo mis intenciones
— Me dieron aviso que ella volvió, es cierto?—
—Si pero…—
El ambiente se pone denso y pesado mientras los profesores se encontraban en el pasillo…
—¿Qué es esto?!— me percato de que esa energía viene de su habitación, es la misma de hace un momento pero aumento en instantes…
Escucho que alguien viene corriendo por los pasillos y volteo detrás de Nanami
— Sensei!— es Fushiguro que se ve realmente exaltado,
—¿De dónde viene toda esa energía?—
Nanami y yo reaccionamos, es evidente de donde proviene
Al abrir la puerta de su habitación, la veo..
Envuelta en una toalla, aún con la piel mojada levitando cerca del techo
—HIROMI!— grita Nanami
El cuarto iluminado por un color violeta y ella ahí con los ojos cerrados.
Me pongo a un lado de Nanami y le ordeno a Fushiguro que se abstenga de acercarse
— ¿Qué sucede Nanami?—
Veo alrededor sombras, me percato que son maldiciones, pero no son nada para mí
— Está tan mal que entro en trance Satoru!— me dice sin dejar de mirarla,
—A esto me refería cuando te dije que estaba vulnerable!—
— Si gracias por la información completa!— digo sarcástico
—Pero que hace ?—
Comienzo a eliminar las maldiciones que estaban a su alrededor
— Tengo que acercarme a ella!— ataca rapido una de las maldiciones
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—Y si me acerco yo?—
— No podrás hacerlo, ella no te escuchará!!—acomoda sus gafas
—Cuánto quieres apostar?—
— Satoru serás el más fuerte, pero ella no es ella en este momento!!—
— A qué te refieres?— juego un poco con una de las maldiciones para hacer tiempo
— Mira trata de acercarte a ella, pero no le hagas daño—
—Tranquilo Nanami—
Camino un poco abriéndome paso entre las maldiciones
Al estar en esta habitación, es más difícil no hacer destrozos
Cuando estoy por llegar a su lado abre los ojos…
—Un poseedor de los 6 ojos, heredero del clan Gojo!—
—Que tal, quisiera saber si no es mucha molestia que dejaras de hacer este berrinche—levito a un lado de ella
Se burla de mi…
Se escucha diferente su voz y sus ojos tienen un brillo violeta también, pero lo que me llama la atención es su brazalete, recuerdo que era morado y se encuentra casi en un gris oscuro…
En un momento justo cuando estaba viéndolo, trono y se partió en mil pedazos
— SATORU TIENES QUE HACER ALGO, CORRE PELIGRO SI SIGUE ASI!!—
Suspiro con aburrimiento y me aparezco detrás de ella
— Bien señorita, creo que es hora de irse a la cama— doy un movimiento y le pego justo para que cayera inconsciente
Trato de tomarla para que no caiga al suelo y la cubro de nuevo con la toalla..
Nanami se acerca y la revisa detenidamente…
— La noqueaste?—
— Bueno era eso o no nos dejaría dormir, además me dijiste que corría peligro y si lanzaba un ataque más fuerte, todo el colegio lo iba a notar—
—Si es que no lo sintieron ya— suspira— ven recuéstala aquí—
— Me vas decir que fue eso?— le pregunté a Nanami, mientras a ella le acomodo unos mechones de su oscuro cabello
— Cuando ella llega a un punto de estrés crítico o tristeza, libera parte del poder de su madre—
—¿QUE?!— miro a la mujer de cuerpo completo que dormía tan tranquila
Shhh, guarda silencio!!— me regaña el rubio
— Sabes Nanami quizás debiste empezar por ahí, porque esconder el alcance de nivel que posee? Con que propósito?—
— No es el alcance de poder, es el daño que le provoca, por eso usa medicamento tambien— camina buscando algo en el piso
— Por eso le pusieron esa cosa? Para evitar que se le saliera de las manos a su padre?!—
Veo que junta la joya y voltea hacia donde estoy...
—No es para eso, es para protegerla!!— apuña el artefacto y se lo guarda
—Si claro—
Veo que se mueve un poco
—Hiromi?— se acerca rápido a su lado, lo miro con recelo
—¿Qué paso?— la chica se ve confundida
—Te pusiste un poco desquiciada doctora—siento la mirada de Nanami
— Calla Satoru, déjala en paz—
— Nanami, que pasó?—
— Dime Hiromi no recuerdas que pasó? Qué sucedió para que te pusieras así?— comienza a cuestionarla
— Llegué muy cansada, quizás guarde demasiadas emociones— se da cuenta que solo trae una toalla encima
— ¡Aaah! Porque estoy desnuda!!—
El rubio la cubre con la sábana y se disculpa por verla así…
—Satoru voltéate!!—
— No creo que sirva de mucho si me volteo— me burlo
Ella se ve realmente afectada, se le marcaron los huesos del rostro y hasta ojeras…
—Mira mejor te dejaremos descansar, mañana hablaremos si?—
—Si está bien—
Los dos hombres salen de la habitación y caminan por el lago pasillo hacia sus respectivas recámaras.
