—¿Puedo pedirte algo?— se mira nervioso al preguntarme,
—Dime—
—Mañana te vas de viaje y no nos veremos en mucho tiempo, ¿podría quedarme a dormir aquí?— se sonroja mientras se reverencia ante mi sobre la cama,
—No quiero que pienses mal por favor, no intentaré nada!! Sólo quiero dormir a tu lado por favor!—
—Itadori no creo que sea buena idea—
—Quiero cuidarte, dejame cuidarte está noche por favor— insiste,
No muy convencida acepto su propuesta.
—Porque no vas a cambiarte, te pones algo más cómodo yo haré lo mismo y tendremos una pijamada tu y yo, sí?—
—Sii vuelvo enseguida!— sale rápido de mi cuarto, no le pedí que se fuera solo porque si…
—Puedes salir ya— ruedo los ojos
Se abre la puerta despacio y ahí está él.
Su mirada sobre mi me pone nerviosa.
—¿Cómo sabías que estaba aquí?— se recarga en la puerta del baño
—Bueno, la sombra en la puerta te delató y el olor de tu perfume— contesté
Camina hacia mí.
—Así qué pasarán la noche juntos…—
—Si—
—Bien—
—Antes de que digas algo Satoru, no voy acostarme con él—
—Losé, escuché lo que le dijiste o sólo lo hiciste porque sabías que estaba aquí?—
—Ambas cosas, yo te prometí que me iba alejar de él y aunque le hiera, es lo que debo hacer—
—Te agradezco tu interés por el bienestar de mi alumno—
—De nada, pero no lo hago por ti— trato de levantarme
—Sigues débil, sigue en pie lo de tu viaje?—
— Sólo necesito descansar, estar tranquila, mis emociones han estado algo revueltas últimamente— camino hacia el baño,
Y no debo dejar que me controlen ellas a mi— hablo tajante al llegar a la puerta del baño.
—Es tu vida la que está en juego...— escucho que dice entre dientes
—Si escuchaste lo que hable con Itadori, entonces ya estabas aquí cuando hablé con Nanami-san así que si, mi vida es la que está en juego— volteo a mirarlo
— Quiero vivirla, si ya tengo mi fecha de muerte que más da si es por no poder controlar mi poder, por Sukuna o por una sobredosis no?— encojo los hombros y doy unos pasos…
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Siento una presión en el pecho, algo tibio me cubre por completa, levanto la mirada hacia el espejo del baño y ahí está él rodeandome con sus brazos, aferrado a mi.
Siento el latir de su corazón, su respiración entrecortada, miro el reflejo de su rostro, el cuál siempre tenía una sonrisa egocéntrica, se torna con una tristeza que me hace estremecer.
Me gira para quedar frente a él, se une a mi en un beso
Un cosquilleo me recorre el cuerpo, abro los ojos con sorpresa porque veo pequeñas gotas cristalinas a la orilla de sus ojos azules.
—Si tú vida está en juego, yo siempre estaré ahí para ganar por ti—
—Sa… Satoru— me sonrojo y me rodea el rostro con sus manos para besarme de nuevo
Me congelo.
Me mira de manera singular, puedo ver algo diferente en él…
Me toma la mano y la besa despacio.
Siento electricidad en mi cuerpo, mi corazón vibra al verlo tratarme de esta forma.
— Qué tengas un buen viaje— hace media reverencia frente a mi y al incorporarse de nuevo desapareció.
No hay palabras que describan como me siento.
Camino despacio al espejo y me miro roja totalmente, siento un hormigueo en las mejillas.
—Hace tiempo que no me sentía de esta manera— sumergida en mis pensamientos, unos golpes en la puerta me toman por sorpresa.
—Pasa Yuji...—
No escucho que entre y salgo a encontrarme con él
—¿Yuji?—
Veo a alguien parado en la puerta, pero no es él
—¿Nanami?— camino hacia él,
— ¿Qué haces aquí? Te pedí que me dejaras en paz—
— Él no pasará la noche contigo, no lo permitiré—
— Qué carajos pasa contigo!!— me enfurezco
—Déjame salir, iré a buscar a Itadori!— forcejeo con él me trata de cerrar el paso y logro abrir la puerta
