Capitulo 14

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Pov Hiromi

—Lista?...—Me pregunta mientras siento como roza su miembro caliente en mis pliegues.
Me pone nerviosa el verlo haciendo eso.

—Creo que es obvio verdad— vuelve a decir mientras se lame los dedos húmedos, con mis fluidos.
“Mi cara no puede ponerse más roja!!”

Pienso mientras veo como se aproxima a mi con tremendo pedazo que tiene entre las piernas…

“No creo que quepa eso aquí”—Pasa por mi pensamiento, cuando escucho que dice:
—Ahora serás mi dulce favorito—.

Me convenció.

—Aiñnn!!—Me quejo y eso que apenas va entrando.

—Paro?—Me pregunta atento a mi respuesta.

—No es que…me molestó un poco— digo nerviosa.

—Tranquila, es normal soy un chico grande—me guiñó un ojo y continúa besándome.

Siento como ya dentro de mi, comienza suavemente, quizás lo hace por miedo a lastimarme, pero se siente bien…

Por una parte no me sorprende que me incomode el tamaño , digo es un hombre grande ,era obvio que no iba a tener una pequeñez, pero el de Toji no se compara, quizás ya me había acostumbrado a él.

Logra introducirlo más dentro de mi, creo que ya lo asimile… Si, no se siente tan mal tener algo así entre las piernas.

Siento como se aferra a mi, me toma con fuerza mientras me desliza su lengua por mi cuello, dirigiendo sus delgadas manos hacia mis pechos, no puedo evitarlo…

Le clavo la uñas en la espalda, me hace sentir demasiado llena de él…

—Di mi nombre—me habla al oído.

Trato de disimular, este pedazo de hombre quiere que diga su nombre, del placer que estoy sintiendo en estos momentos no recuerdo ni el mío!!

Me aferro a la sábana de su cama, no puedo lanzar quejidos más fuertes, nos pueden escuchar.

—Satoru!—le digo mientras trato de mantener el timbre de mi voz para evitar gritarlo.

—No hermosa, grítalo!!—me dice al tiempo que comienza movimientos más energizantes.

—A—Aiñnn!!— me quejo no tengo control sobre mi pensamiento.

—No podrás terminar hasta que grites mi nombre!!—dice mientras me toma con sus dos manos el cuello y me ve fijamente a los ojos, veo los suyos los cuales brillan como un hermoso cielo estrellado.

—Sa… Satoru Gojo!!—entre quejidos me logra salir su nombre una vez más, pero ya me siento tan cerca de terminar y él no quiere que lo haga…

Sale de mi, mientras me toma de las piernas jalándome hacia la orilla de la cama, volteándome para que queden mis glúteos a su vista, me toma del cabello, pegando mi cuerpo sobre la cama para una mejor vista de mi intimidad.

Entra de golpe de nuevo, en un quejido de alivio y placer siento que me embiste con fuerza, logrando sentir aun más como roza dentro de mi:

—GRITALO HIROMI!!—Me ordena en tono alto, mientras me toma del cabello y siento como su cadera pega una y otra vez con mis glúteos..

“Ya no puedo evitarlo mas, estoy tan cerca”
—¡¡SATORU GOJO!!—grito con todas las fuerzas al sentir el clímax más intenso de mi vida..

Me agarro fuerte de la sábana, voy perdiendo fuerza en mis piernas.

—Asi me gusta doctora—escucho salir de su boca.

Continúa con fuerza él, yo ya no puedo más.
Siento que palpita dentro de mi, está a punto de terminar…

—Aaargh!—lanza un quejido ahogado, se aferra a mis caderas mientras siento como besa dulcemente mi espalda.
—Buena chica!—dice el Mayor mientras la voltea, se recuesta aun lado y la jala hacia él, abrazándola fuerte.

Sus respiraciones se van haciendo más lentas, mientras el peliblanco le besa la frente:
—Estás bien?—le pregunta a la joven.

Ve como sube y baja su pecho agitado aún.

—Si, no te preocupes, solo necesito tomar aire—
El chico toma la sábana para cubrirle el cuerpo desnudo, y se aleja un poco de ella para pasar al baño.

Tira el preservativo, lava sus manos y regresa hacia donde se encuentra la chica.

Ella se encuentra sentada cubierta con la sábana, pero comienza a buscar sus cosas:

—Ey, adónde vas?—le pregunta él mientras la observa buscando su ropa interior y su pijama entre la cama.

—A mi recámara, no es obvio?—le contesta mientras lo ve parado frente a la cama.

—¿Qué?, por supuesto que no, tu te quedarás aquí conmigo—le dice seriamente.

—Claro que no, yo no me puedo quedar aquí, después de lo que pasó en el salón de clases, no creo que sea buena idea—dice mientras se pone su camisón.

—Hiromi, por favor ya te dije que todo se arregló, quédate— le dice el sensei mientras busca su pijama en el piso.

La chica trenza su cabello y camina hacia al sofá por la sábana que traía encima.

—No Satoru, es demasiado riesgo el que me quedé aquí, mejor me voy —camina hacia la puerta.

—Te llevo antes de que todos se despierten, lo prometo solo quédate—

La chica se frena al llegar a la puerta.

Voltea a mirarlo, dándole una sonrisa dulce.
—Entiéndeme por favor—ve como se acerca a ella rápidamente para evitar que salga de ahí.

—Bien—contesta sin ganas el Mayor mientras le besa la frente—tu ganas… pero yo te llevaré a tu recámara—tomándola por la cintura, en un instante llegan a la habitación de la chica.

—Gracias por entender—le da un dulce beso en los labios.
—Anda ve a descansar, me daré un baño , mañana tenemos mucho que hacer—

—¿Quieres que te ayude?—en tono juguetón le dice a la chica.

—Claro que no Satoru, ya vete a tu habitación o nos van a oir—dice la joven mientras le trata de pegar con la sábana que tiene en las manos.

—Ya tranquila , yo solo quería ayudar—le sonríe el chico.

—Por favor, ve a descansar, nos vemos mañana si?—le brinda una sonrisa cálida al joven mientras se acerca a abrazarlo.

—Bien, la veo en su oficina doctora—
Le da un ultimo beso en la frente, le guiña el ojo mientras ve como desaparece frente a ella.

*Dato importante*
La imagen publicada aquí es solo ilustrativa, no es de mi propiedad, fue tomada de la red.
Créditos a su autor correspondiente.

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