Capitulo 39

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— Algo más que quieras compartir con tu compañero sobre la chica?—

El reniega y se va quitando su saco.

— No es la primera vez que le sucede esto, ella es demasiado sensible, su poder se desborda en gran medida… y esto—  saca el la joya— era algo para que ella estuviera bien, es joven y lo más probable es que si sigue perdiendo el control sobre su poder… ella pueda— guarda silencio y me voltea a mirar

— Sabes que esa cosa no es el amuleto original, verdad?—

—¿Qué?—

—No, no lo es—

— Tú cómo sabes eso?—

—Lo investigue— se recarga en la pared

El rubio suspira y abre la puerta de su habitación

—Alguna razón tendrá su padre para habérselo dado, aunque sea una copia—

— Si claro… una buena razón — se estira un poco y se despide de él.


                                    Pov Hiromi

Me pesan mucho los ojos, trato de despertar y en verdad se me dificulta…

Nosé que pasó ayer, me siento como si hubiera tenido una fiesta demasiado intensa, pero bueno eso es normal cuando ocurre lo de esta madrugada.

— Quizás deba de retomar la meditación— me cubro el rostro de los rayos del sol que pueden filtrarse por la ventana

Me siento en la cama y busco mi celular…

—Demonios me quedé dormida así desnuda—

Salgo de la cama, camino hacia la estancia y encuentro mi bolso

Un pequeño mareo se hace presente, me recargo en el sofá y me doy cuenta de que tengo una marca en donde debería de estar mi brazalete...

—¿Dónde está?— me llega un dolor de cabeza, así que paso a  bañarme y busco un medicamento debajo del lavabo


Estoy por terminar de cambiarme, cuando escucho la puerta


— Señorita Diatsu?—

—Si, pase—

—Hola, como te sientes?—

—Bien Nanami-san, gracias—

Camino hacia el espejo y me observo por un momento

—Está vez casi se me sale de las manos no?—

Él se acerca dudoso hacia mi,mirándome por el reflejo del espejo

—Hiromi creo que lo mejor sería que...—
no dejo que termine la oración cuando volteo a mirarlo…

Él calla, desviando la mirada.

— Pediré que te traigan el desayuno—

—Gracias—

Me siento un momento en la estancia y el va detrás de mi


—¿Estás bien?—

—Si Nanami, lo estoy deja de preocuparte—

—Anoche te vimos muy mal, me preocupo además porque...— saca algo de su pantalón…

—¡Mi brazalete! ,¿Fue mi culpa?— lo tomo de su mano y lo pego a mi pecho


—Tranquila, lo mandaré a arreglar… pero ya no servirá para lo que fue creado—


—¿Qué dices?— lo miro confundida,
se sienta a mi lado y me toma de las manos

—Necesito que entiendas una cosa, tu padre solo trata de protegerte—


—¿Mi padre? Él me lo dio ,pero me dijo que era de mi mamá, no es así?!—,

—¿No es eso cierto?!— le alzo la voz reclamándole...

—Hiromi todo estará bien, mira deja explicarte cómo son las cosas—

—No Nanami, que explicación me darás? una que mi padre te mando a decirme? Ya no puedo confiar ni en él ni en ti!—

Esto último lo toma por sorpresa  y se para de inmediato


—Estamos haciendo lo mejor para ti, porque no lo puedes entender!—


—No, no entiendo porque me hacen esto, me engañan, me lastiman porque no decirme desde un principio sobre esta cosa!— avienta el brazalete lejos

— Si ya sabías que era, porque nunca me lo dijiste Nanami, porque me dijiste que no sabías nada!!, viste las marcas que me hizo esa vez y mira!!— le muestro el brazo aún con carne al descubierto por la quemadura,—Ya estarán contentos los dos!—

— ¿Porqué aún no te regeneras?— mira con preocupación el brazo de la chica

—Durará un poco más, así paso la otra vez—

—Hiromi yo…—

—Déjame sola—

La joven se recuesta en el sofá, el hombre sale en completo silencio.

— Qué idiota fui— siento un nudo en la garganta…

Toque de puerta 🚪

—Si?—  me limpio unas lágrimas

— Señorita, traigo su desayuno—

— si, adelante—

Entra el chico de servicio con una bandeja…

—¿Cómo se siente?— le pregunta al verla algo demacrada

—Bien, me siento bien solo un poco desvelada—

—Espero que el desayuno le haga bien, aquí tiene—


Al levantar la tapa de la bandeja se observa el desayuno y una flor


—Y esto?—

Me ordenaron que se la trajera, le molestó el detalle?—

—No, pero quién se lo pidió?—


—Fui yo—  aparece el ojiazul en la puerta de su habitación

Se acerca hacia ella.

—¿Cómo te sientes?—


— Bien, eso creo— no puedo evitar sonrojarme

— Que bueno, puedes retirarte— le ordena al joven de servicio

El mayor se sienta en el sofá frente a ella.

—Te molestaste con Nanami?—

—Te dijo algo?—

—No, pero me lo tope en el pasillo y llevaba una cara de malhumorado—


—Siempre tiene esa expresión en su rostro— me rio un poco

—Vaya tienes humor para burlarte de Nanami, me agrada—

—No me burlo, pero desde que lo conozco siempre ha sido serio y poco expresivo—


El ojiazul se percata del brazo de la chica que está herido…


— ¿Porqué no has usado tu técnica para curarte?— se acerca despacio a ver mejor la muñeca de ella…

— Por lo general puedo hacerlo, pero incluso la vez pasada que me hizo lo mismo tarde en aliviarme un poco más—


— Entiendo, puedo?— se sienta a su lado y la toma del brazo,

—¿Te duele?—

—No mucho, por la tarde estaré mejor no te preocupes—

Se para de su lugar y camina hacia en medio de la habitación

—No cancelaras tu cita, cierto?—


—Sabes que no—

—Bien, espero que la disfrutes—


El ojiazul camina hacia la puerta.

—Satoru—

—Si?—

—¿Tú sabías sobre el brazalete?—

—Si—

—Y no pensaste en decirme nada?—

—No, no es mi asunto. Y no me mal entiendas pero Nanami es tu niñero no yo… porque de ser así— se acerca lentamente a la pelinegra— te mantendría encerrada y yo solamente tendría la  llave—

Se torna un color rosado en la mejillas de la chica… si estuviera de pie se hubiera tambaleado por esas palabras...

Desapareció frente a sus grises ojos, dejándola atónita.

—Cálmate Hiromi!!— cubriendo sus rostro con la servilleta,
—Porque tiene que ser tan idiota!!—

Termino de desayunar y trato de concentrarme para curar mi herida

— Bien veamos— una luz violeta tenue se deja ver, la joven trata de guardar la calma…

—Listo— observo mi muñeca, las marcas que me dejo

—Bueno siempre quise un tatuaje y con este ya tengo dos— suspiro y camino hacia mi clóset

—Veamos que me pondré hoy?—

No quiero que mi brazo llame la atención, así que creo que estará bien…

Escojo un lindo suéter ligero y una falta que combine con unos tenis, como no estoy segura si andaremos mucho es buena idea…

Sonido de celular 📱

—¿Sabine?—

— Hola peque buenos días, cómo estás?—

— Bien?,  pasa algo? Que yo recuerde te quedaste botada en la sala anoche—

Ríe —  No nada, solo quería saber si es cierto que tendrás la cita con el chico ese—

"Toji".

—Si así es—  ruedo los ojos, ya se por donde va esto...

— Oh bueno, quisiera proponerte algo…—


En el comedor del colegio.


                                   Pov Gojo

Estaba pensando en lo ocurrido anoche, realmente me intriga el nivel que puede tener su poder…


—Profesor Gojo—

— Megumi buenos días, siéntate a desayunar—

Le señalo una de las sillas, pero tiene un rostro de preocupación

— Megumi no te preocupes por lo de anoche solo se le salió de las manos la situación a la doctora—

—No estoy preocupado por eso sensei— se hace a un lado para dejar pasar a Kugisaki
— necesito hablar con usted—


Algo me dice que no es nada bueno.

Sus ojos sobre mi X Jujutsu Kaisen Donde viven las historias. Descúbrelo ahora