20: Mi Hijo

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— Es inútil.

Exclamó Asa, lanzando las fotos que había recolectado al suelo.

Sasaki no reaccionó, manteniendo su cansada vista en la pantalla. Asa lo miró de reojo, preguntándose cuando fue la última vez que lo vió parpadear.

Llevaban una semana así, analizando los videos del edificio sin tomar un solo descanso. Asa incluso había faltado al trabajo por esos días, pasando día y noche en casa de Sasaki. De alguna forma él y Nana se habían hecho inseparables en ese corto periodo de tiempo. Nana lo seguía a todas partes como un pollo siguiendo a su madre, y él la consentía con todo tipo de dulces y juguetes (pese a saber que no tenía el dinero.) Justo en ese momento se encontraba en la escuela, pero cuando volviera irían al parque como hacían cada tarde. Pensar en esto lo hizo sonreír, volviendo su atencion a la computadora.

Sabían que Azumaya llevaba viviendo ahí desde que estaba en preparatoria, lo cual les daba 5 años de grabaciones. Sonaba como poco (o eso creyeron) hasta que comenzaron a analizar cada video. No había nada que lo incriminara de secuestrar a Takato, toda la evidencia de ese día había sido eliminada. Así que fueron aún más atrás.

Lo primero que notaron era que unos días eran completamente eliminados de la cámara de seguridad. Estaban seguros que debía significar algo, pero no estaban seguros de qué y los estaba volviendo locos. No era en un patron, y definitivamente no era en fechas especiales.

— Tal vez sea una causa perdida, ¿sabes?- se quejó Asa, comenzando a recoger los papeles que había tirado- el demente este sabe lo que hace, sólo Dios sabrá cuanto tiempo lleva haciéndolo. Es un profesional, no le vamos a ganar-

Sasaki lo cayó, indicándole que se acercara a ver la cámara.

Se acercó, notando de reojo como sus ojos estaban rojos y cansados, aún mas de lo que creía. Seguro él igual se veía así, después de todo llevaban días viendo videos sin mucho descanso.

— ¿Qué tiene esto? ¿Piensas que hay alguien adentro?- preguntó fastidiado al notar que era un video de Azumaya saliendo con una bolsa de basura en las manos. Parecía joven, tal vez tenía 17 o 18 años.

Sasaki le volvió a indicar que guardara silencio, dando un trago a su soda. Era la tercera o cuarta ese dia, y tan solo eran las 11 de la mañana.

Mantuvo la vista en la pantalla, esperando porque algo interesante pasara. Duró así por quizás 5 minutos antes de que Azumaya regresara con una mujer a su lado, la cual llevaba ropas viejas y cargaba lo que aparentaba ser un saco en sus brazos.

— ¿Quién será?- preguntó, curioso. Esta vez Sasaki adelantó el video 20 minutos, cuando la mujer salió con prisa del lugar.

— ¿Crees que haya querido hacerle algo?

— ¿Notas algo diferente?

Preguntó Sasaki. Asa negó.

— Ya no lleva lo que llevaba en brazos.

Ah, era cierto.

— ¿Drogas?

— No-murmuró, observando la foto a mayor detalle-un bebé. Si podemos encontrar quien es esta mujer tal vez tengamos respuestas. ¿Crees poder escanear la imagen?

Dudó, mirando la computadora. La imagen, más allá de tener mala calidad, no capturaba el rostro entero de la mujer y, por sobre todo, tenía 5 años de antigüedad. ¿Cómo saber si siquiera seguía viva?

Aún así, dedujo que valía la pena intentar.

— Tengo un amigo- añadió- tal vez él sea capaz de encontrarla, pero no saldrá barato.

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