Capitulo 8

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Capitulo 8 El  Fénix .
( Un año atrás)

Fue por esos tristes días, de después de mi trágica separación forzada de Esther que conocí el libro de El  Fénix y a su autor Ismael Spielman.

Fue un viernes en la hora del almuerzo,  por fin había logrado burlar la vigilancia de Rosemary en los pasillos,  para ir un rato a la biblioteca mi lugar favorito de la escuela.

Había que estudiar sobre la segunda guerra mundial,  para una prueba de historia , antes de salir de vacaciones Dieciocheras , estaba buscando algo que estuviera relacionado con eso , en específico con el Holocausto ya que después de conocer a Esther ese toma me comenzó a interesar .

Pensaba en leer el Diario de Ana Frank , pero mientras lo buscaba , encontré un libro muy escondido en una repisa, uno muy grueso y de tapas rojas .

Lo tome entre mis manos y ley el título – el Fénix- ley también la contraportada para ver la sinopsis que decía,  que ese libro era la autobiografía de Ismael Spielman,  un judío que de niño había sobrevivido al Holocausto junto con su madre y su hermana gemela Sarah y que al crecer , se unió a la causa Israelí,  participando en todas las guerras de Israel  y luego volviéndose un gran espía, ese libro era una mezcla de sus diarios que había escrito durante su vida junto a los testimonios de otras personas. 

Toda esa historia había logrado llamar mi atención tanto , que no pude esperar para ojear sus páginas,  así que me senté en una de las frías sillas de la biblioteca para leer 📖.

En la primera página había una imagen de una foto antigua,  que decía Familia Spielman,  estaba en blanco y negro , y en ella lo que más llamó mi atención.

Fue un chico fascinante,  era hermoso  su piel era blanca como la nieve y su cabello era muy negro  ,  aún sin color se notaba que sus ojos eran de diferentes colores , uno  más claro que el otro , su cara tenía rasgos muy finos y algo femeninos , parecía un ángel,  al lado del chico había una chica que parecía de su misma edad , los dos se parecían mucho entre sí,  esos debían ser los gemelos Ismael y Sarah , la chica también tenía la piel blanca pero su cabello era un poco más claro .

Pero no eran  las únicas personas en la foto,  también había una mujer adulta que debía ser la madre , era muy alta y delgada y su cabello era negro y rizado,  había otra chica que parecía ser la hermana mayor , que tenía un largo cabello rubio ,su cara transmitía alegría al igual que la de los gemelos pero también un fuerte carácter, también había un padre y un hermano y el padre también era muy alto , con el pelo negro al igual que su barba , y el hijo mayor se parecía mucho al padre  solo que sin barba y aunque en la foto se veía feliz algo transmitía que normalmente estaba de mal humor .

Después de mirar la foto por un largo rato , pase a la siguiente página.

Decía capitulo 1 .

Varsovia en 1939 , domingo,   esto era lo que ley en el primer capítulo.

Ese domingo a las 6 de la mañana ya estaba despierto , lo que era entendible ya que ese día era mi cumpleaños número 13 el mío y el de mi hermana Sarah , me levante de la cama cuidadosamente para no despertar a los demás , me acerque  a la cama de al lado donde mi hermana dormía plácidamente,  una jovencita realmente encantadora , me acerque y le susurre en el oído , - vallamos al comedor , a ver si hay regalos para nosotros- .

Pero Sarah aún somnolienta me dijo – es muy temprano Ismael,  además no estamos en tiempos de pedir regalos -  volví a mi cama y contuve mi curiosidad asta las 7 y media , entonces ya no pude esperar más y convencí a Sarah de ir .

Ella acepto y nos dirigimos silenciosamente al comedor , arriba de la mesa habían dos regalos , lo que hizo que mi cara se iluminara , no porque me importara tanto recibir algo material sino porque sabía que entonces yo y Sarah tendríamos algo más en lo que  enfocar nuestra atención algo agradable entre todo el infierno que estábamos pasando .

A las 8 fuimos a despertar a nuestros padres y todos fuimos al salón para que abriéramos nuestros obsequios , mi regalo fue mi diario , el mejor regalo del mundo , emocionado abrase a mi padre y le agradecí.

El regalo de mi hermana fue mucho más simple un ramo de 🌹 rosas rojas , pero Sarah era mucho más madura que yo y se complació con eso .

Esa tarde , pensamos en cómo fue nuestro cumpleaños 🎂 pasado , nos habíamos despertado temprano también,  ese año yo le regale a Sarah una blusa azul que le había gustado mucho en una tienda y ella me regalo una bandeja de galletas caseras echas por ella misma ya que recientemente había aprendido a cocinar .

Ese día también tuvimos otros regalos , yo tuve una botella de jugo de 🍇 uva , que sabía como a vino 🍷,  también nos regalaron un juego de mesa ,  Alina mi hermana mayor le regalo a Sarah un perfume y mi papá me regalo un libro que siempre había querido el gato negro de Edgar Allan Poe , mi autor favorito,  claro que a mi madre no le gustó ese regalo , porque a ella no le gustaban ese tipo de libros 📚 bueno a ella no le gustaban muchas cosas que yo hacía,  tampoco le gustaba mi idea de ser un escritor famoso algún día.

Ese día de casualidad también recibimos una carta de nuestra querida abuela , que tomamos  como un regalo , luego nuestras dos mejores amigas , vinieron para acompañarnos a la escuela , mi padre y mi molesto hermano Henry siempre me decían  que era  extraño que un chico de mi edad solo tenga amigas , pero yo no veo que tenga algo malo .

Luego cuando yo y Sarah volvimos hubo una pequeña fiesta,  pero todo eso ya había quedado en el pasado , la última celebración que habíamos tenido fue cuando en la radio dijeron que los ingleses  le habían declarado la guerra a los alemanes,  celebramos pensando que todo iba a mejorar , pero nos equivocamos , y ahora todos debíamos llevar una estrella de David en el brazo y casi ya no podemos ir a ningún lugar .

La historia me había atrapado , pero en ese momento sonó el timbre 🔔 que anunciaba el final de la hora del almuerzo.

Así que rápidamente me acerque al señor Ezequiel , el bibliotecario un hombre muy simpático,  con anteojos redondos y cabello casi totalmente gris,  le pedí que por favor me dejara llevar ese libro a mi casa por un día.

El me sonrió , - claro que si señorita Fé,  no solo se lo puede llevar por un día,  puede tenerlo por una semana , ese libro es muy largo pero le encantara leerlo - .

Me dijo de forma amable , yo le sonreí y fue corriendo a mi salón de clases , allí guarde el libro en mi mochila 🎒  y me asegure de que nadie se diera cuenta .

Esa noche cuando ya  estaba sola en mi habitación lo volví a sacar para leerlo , lo que no sabía era que muy pronto me volvería adicta a ese libro y a la historia de su protagonista. 

Lo ley una y otra vez asta que el amable señor Ezequiel me dejó quedármelo.

Ese libro era la única conexión que me quedaba con la historia de Israel y por eso lo atesore con toda mi alma.

Pura FÉ 2 . 0 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora