38. ☁︎ Sorpresa, sorpresa ☁︎

18 2 0
                                    

|| Madeline Van Zeller / Aiden Mateland ||

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

|| Madeline Van Zeller / Aiden Mateland ||

28 de septiembre del 2022

Sebas y yo habíamos vuelto al hotel después de una noche mágica en París. Me dijo que debíamos descansar porque al día siguiente iríamos a otro sitio, pero no quiso decirme a dónde. Era otra sorpresa, según él. Aunque me emocionaba la idea de seguir compartiendo momentos con él, algo dentro de mí no me dejaba dormir.

Por un lado, me inquietaba la sensación de que Sebastian me estaba ocultando algo. Tal vez era solo mi intuición, pero no podía evitar sentir esa sombra de duda. Sin embargo, ¿cómo podía exigirle total transparencia cuando yo misma no había sido completamente honesta? No le he contado todo lo que debería, y esa omisión me carcomía más de lo que estaba dispuesta a admitir.

Por otro lado, durante la cena, algo extraño ocurrió. En un momento, miré hacia abajo desde la Torre Eiffel, y ahí, entre la oscuridad y las luces de la ciudad, lo vi. Henry estaba aquí.

No era la primera vez que creía haberlo visto, pero esta vez fue diferente. Pude observarlo con más detalle. Había cambiado mucho, sobre todo físicamente. Estaba más corpulento, con mucha más masa muscular que antes. Sus facciones seguían siendo las mismas en esencia, pero su mirada, su porte. . . todo era diferente. Había una intensidad en su rostro que no recordaba, una que me hizo sentir una mezcla de miedo y nostalgia.

«¿Qué hacía él ahí? ¿Me había seguido? O peor aún, ¿me estaba vigilando

El hecho de que Henry estuviera aquí, en París, y me hubiera visto desde abajo de la Torre Eiffel, era una señal clara de que sabía que era yo. No podía ser una coincidencia. Pero lo que más me inquietaba era lo que aún no había hecho. Henry era el tipo de persona que siempre tomaba la iniciativa, actuaba rápido. Sin embargo, hasta ahora, no había hecho ningún movimiento. Eso era lo que más me desconcertaba.

Lo más extraño de todo era que, si Henry sabía dónde estaba, mi padre también lo sabría. Conociéndolo, no habría tardado en actuar, en llegar aquí o enviar a alguien a buscarme. Pero, hasta ahora, no había ninguna señal de que lo hubiera hecho. Todo estaba demasiado tranquilo, y esa calma solo me llenaba de más incertidumbre.

«¿Qué estaba esperando Henry? ¿Por qué no había dado señales de vida?»

29 de septiembre del 2022

Abordamos el vuelo con dos partes de mí en constante conflicto. Una parte deseaba con todas sus fuerzas no encontrarme con Henry, ansiando disfrutar plenamente de mi tiempo con Sebastian sin interrupciones ni preocupaciones. Pero la otra parte, más inquieta y combativa, quería enfrentarlo, incluso sabiendo que no podría convencerlo de que mantuviera silencio ante mi padre. La incertidumbre era sofocante, y la única forma de escapar era enfocarme en el presente.

The Girl Of My Dreams || Sebastian StanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora