Poco a poco fui saliendo de los días deprimentes, pero por momentos volvían porque lo veía a Peter, y yo también recordaba todo, por más de que él no me hablara de eso, yo sabía que se estaba esforzando para mantenerme alegre.
-Qué bajón no poder tomar más café-me quejé cuando fuimos a desayunar- ¿qué pido? ¿Chocolatada? ¿Exprimido de naranja?-dramaticé- bueno un exprimido y una chocolatada-finalicé.
Peter me miró firme y elevó sus cejas.
-Te va a caer muy mal-me lo advirtió.
-Llevo días con nauseas Juan Pedro, por lo menos si como algo quiero que me haga feliz-en modo orgullosa le hice una seña a la mesera que hace un tiempo le dejó su número a Peter y sonreí cómo si nada, de manera exageradamente simpática- quiero una chocolatada, un exprimido y un tostado de jamón y queso
Levanté mi mirada, Peter estaba conteniendo la risa.
-Eso y un té oriental-agradeció a la mesera que le guiñó un ojo.
-¡¿No te diste cuenta?!-canté "victoria"- ¡te tiró onda!
-Vuelvo a repetírtelo Mariana, me interesa nada que la gente tenga la intención de "levantarme"-elevó sus cejas y achinó sus ojos- yo vine a desayunar con Lali Espósito, y no me hagas una escena de celos
-¡¿QUÉ YO QUÉ?!-elevé el tono de mi voz sacada-¡me importa poco y nada que te tiren buena onda tarado! ¡VOS sos el que cree que me importa! Lo ÚNICO que me importa ahora mismo es que me traigan el desayuno-me volteé molesta y le hice señas a la mesera-¡ey! ¿Serías tan amable de traer el pedido? ¡Acá hay una embarazada que está por desmallarse del hambre!
Peter soltó una carcajada y eso me molesto MÁS.
-Voy a buscar nuestro pedido-se puso de pie- así acelero el asunto
Fue caminando hasta el mostrador de la cafetería y le habló a la mesera que tenía cara de preocupada, Peter le sonrió y ella asintió con la cabeza, a los minutos él fue quién trajo todo en una bandeja.
-¿Feliz?-me miró firme.
-¿Qué le dijiste?-ataqué el tostado.
-Que nos disculpe, que es verdad el hecho de que puedas desmayarte si no te llega la comida de manera rápida-ironizó, era obvio que estaba jodiendo- y que le voy a dejar buena propina
-¿Acaso te avergonzas de mi?-nuestra conversación iba de mal a peor, en su cara me tomé el exprimido de naranja, Peter quiso agarrar el segundo tostado de miga pero no se lo permití- te hubieses pedido uno para vos
-¿Tan molesta te tiene el que tenga que compartir mi atención?
-¡Sos agobiante Peter! ¡Estas completamente obsesionado con tener mi atención!-le di vueltas el argumento suyo.
-Y vos estas loca, MUY loca-perdió la paciencia.
La secuencia fue la siguiente: me puse de pie, Peter tuvo que pagar sin siquiera poder revisar la cuenta, corrió atrás mío y me alcanzó al llegar a la esquina.
-¿Me dejas respirar sola?-me crucé de brazos.
-Estas al aire libre genia-me boludeó- ey perdón... no... no estoy entendiendo cómo manejar lo de tus hormonas
-Yo tampoco, así que quedate tranquilo..-lo miré de reojo y solté un suspiro- no soy una persona celosa Peter, nunca fui celosa.. nunca porque siempre fui ilusa, en el pasado no quería ver la realidad, y bueno ahora veo las cosas.. pero elijo reírme
-Es que..-hizo una pausa- no tenes porque sentir celos, estoy en un momento de mi vida donde no tengo más que cabeza, y la cabeza es para tomar decisiones y mantenerme en eje-se acercó y me acarició una de mis mejillas- y no.. no sos ilusa Lali, obviamente que tenes tu carácter, y en cierta manera measte un poquito el territorio-elevó sus cejas y me miró divertido.
-Si acepto eso es que realmente significarías algo para mi, y no puedo permitírmelo, porque vos tampoco podes permitírtelo-lo cité a sí mismo.
-Entonces...-se quedó con la boca entre abierta, y ñ pensativo- sí te significo algo..
-¡Descubriste América!-seguí con mi sarcasmo-¿podemos volver por mi chocoltada?-cambié de tema abruptamente.
-Sos tan buena esquivando la cosa, ¡olé!-hizo un movimiento y me esquivó a mi que quería darle un golpe en el brazo.
-Peter voy a llorar si no consigo mi chocolatada-lo amenacé señalándolo con uno de mis dedos.
Él se apartó y volví a la cafetería, pedí la chocolatada para llevar y al salir con mi bebida sonreí cómo una nena malcriada a la cual le cumplieron el capricho.
-¿Vas a hacerte la boluda?-me habló mientras volvíamos a mi casa.
-Solo sería imitarte-le tiré un palito- cada vez que surge un tema parcialmente serio te aparecen planes de la nada
-¿Qué es todo este planteo Mariana?-paró en la puerta de mi casa, la abrió con mi juego de llaves y entramos.
-Un planteo absurdo-me reí.
No sé cómo pasó, pero a los segundos estábamos a los besos cómo dos adolescentes que nunca tocaron a otra persona.
Con suavidad Peter se colocó sobre mí, sacó prenda por prenda de mi ropa y me acarició el escote, su mirada se perdió ahí hasta que yo le hice una caricia en su carita.
Recuperé su atención, su mirada me era intimidante y linda, él me sostuvo de las manos mientras nos dejábamos disfrutar, mi respiración terminó acelerada.
Lo abracé y apoyé mi cara sobre su pecho, Peter no me soltó.
-Esto no puede seguir así Lali-interrumpió el silencio, yo me aparté- no puedo seguir fingiendo que no me importa tu opinión-soltó un suspiro profundo- sos... sos la persona más especial con la que estuve tratando en este último tiempo y...-sus ojitos se aguaron.
-No llores tonto-se lo pedí casi desesperada- no te arrepientas, por favor no...-negué con la cabeza- que patético que te pida por favor-me angustié.
Peter rozó su nariz con la mía y negó con la cabeza.
-El tema es ese Lali... no me arrepiento... no me arrepiento para nada y eso me da miedo, ¿sabes lo que puede significar, no? Que podes llegar a convertirte en una persona más importante y... vivir con miedo es una mierda-finalizó, se le formó un puchero y a mi me pasó lo mismo.
Le robé un besito.
-Nadie sabe el futuro.. y si bien ninguno de los dos la tuvo fácil lo único que tenemos ahora es al otro...y..-hice una pausa, procesé lo que me dijo recién y me sorprendí, tardé en reaccionar- dijiste podes llegar a convertirte en una persona más importante, ¿ya soy importante Peter?
Se quedó helado, congelado y sin pestañear.
-No me hagas seguir hablando-se giró y se quedó boca arriba, mirando el techo- te tengo cariño, ¡¿feliz Lali?!-giró otra vez para mirarme a los ojos- y soportaría a todos tus estados bipolares de cambio de ánimo
¿Esto fue algo similar a una declaración? En el mundo de Peter creo que lo fue, igualmente sus palabras me chocaron, me dejaron en shock.
-Es... Peter..-del nerviosismo me mordí el labio fuerte, me quejé- soy una tonta
-No, no sos para nada tonta-negó con la cabeza y se le asomó una sonrisa en sus labios- sos..
-¿Una pesadilla?-dramatice, para hacerlo reír y reírnos juntos.
-Perfecta- se le escapó de la boca, y me di cuenta porque se quedó con la boca entre abierta, su carita entera cambió a una de pánico y de manera torpe me besó, chocó mi frente con la suya y ambos nos quejamos-perdón
Me reí y cómo idiota le sonreí.
-Sos bonito eh-lo halagué y su timidez al esconder su cara debajo de las sabanas me hizo reír fuerte.
-Shhh-me hizo callar- basta Lali, basta..-salió de su escondite- hablé e hice mucho por hoy, volvamos a ir más lento cómo de costumbre-me lo pidió y asentí con la cabeza aceptado la realidad, habíamos tenido una conversación bastante importante y movilizante.
Me quedé boca arriba por un tiempito más hasta que me giré, quedé de espaldas a Peter e intenté dormirme, pero en el medio me movía unas veinte veces, terminé durmiéndome y abrazándolo, y otra vez para sorpresa mía no me hizo soltarlo, eso lo corroboré unas horas después, cuando nos despertamos y nos dimos cuenta de que ya era la hora de la cena, habíamos dormido prácticamente TODO el día.
Peter cocinó dos omelet con ensalada y lo terminé en menos de 15 minutos, después le rompí las bolas para que compre helado, pero él se portó cómo un santo y me hizo caso, fue a buscarlo personalmente porque por la app nos cancelaron el pedido por ser tarde.
-¿Feliz?-trajo un kg y asentí con la cabeza sonriéndole, le ofrecí una cuchara y se sentó en el sillón a mi lado, comí medio ansiosa y miramos una película, La La Land.
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Volver a despertar
FanfictionDos almas rotas y perdidas, un camino por recorrer, ¿vale la pena intentarlo?