Volver a despertar

Capítulo 22 "Ese algo"

Decidí ser la encargada de curarle las heridas de la pierna a Peter, e intenté ser cuidadosa porque le solía mucho.
-Ya pasó, ¡ya está!-levanté mis manos y le sonreí para animarlo- ¡ya terminé por ahora! Vas a estar bien
Al levantar su mirada Peter se quedó mirándome en silencio, nunca deseé tanto meterme en la cabeza de alguien, en sus pensamientos.
-¿Pasa algo Peter?-me preocupe.
-Que me gusta mucho lo buena persona que sos-se le formó una pequeña sonrisa, una genuina y hermosa.
Yo me senté en el borde de la cama a su lado y sin dejar de mirarlo le hice una caricia en una de sus mejillas.
-No seas así conmigo Juan Pedro, no si no queres que me enamore...-hice una pausa y solté un suspiro- sé que cuando nos conocimos te dije que jamás me enamoraría, pero soy humana, estoy demasiado hormonal y sensible cómo para confundir las cosas y tal vez... tal vez llegar a sentir...-dejé de hablar por el miedo, sobretodo el miedo al rechazo- tal vez poder sentir no sea algo tan loco, así que no te hagas el lindo
-No me hago el lindo, soy lindo-se hizo el gracioso y me sonrió, yo contuve mi sonrisa- Lali..-acercó su cara a la mía- lo último que quiero es confundirte.. pero si no queres confundirte... vamos a tener que tomar decisiones, los dos.. no quiero lastimarte, ya estas muy lastimada, yo también estoy lastimado, pero físicamente-agregó a último momento- pasaron muchas cosas intensas, lo mejor es
-¿Vas a decirme que me olvide de todo, no?-mis ojos se aguaron-¡odio estar emocional Dios!
-No quiero confundirte, pero al mismo tiempo... me gustas Lali, es obvio que me gustas, pero no se si para amarte tan rápido, eso... es parte de un proceso por el que tengo que atravesar yo solito, el permitirme abrirme... el permitirme disfrutar de lo simple-acarició mis labios con su dedo pulgar- de lo dulce que sos, me encanta eso tuyo Lali, pero al mismo tiempo tengo miedo de que te hagas ilusiones y no ser lo que esperas que sea...
-Entonces... ¿tenes miedo de realmente no enamorarte de mi?-llegué a esa conclusión, su silencio me atravesó cómo una daga, me dolió.
-No... No es eso...-su mirada me era tan indescifrable- acabamos de pasar por otra mierda más juntos, y vivir esta mierda en cierta manera me "despertó" en algo, te quiero, ¿no lo entendes?-agarró mi cara entre sus manos, mientras descansó su frente sobre la mía- sí puedo enamorarme... por más de que quiera hacerme el idiota puedo enamorarme de vos... y... me da pánico eso, ya perdí a una persona una vez, por poco te pierdo a vos, y por poco también le pasa algo a nuestro bebé
Escuchar de su boca el "nuestro bebé" me derrumbó por completo, se me formó un puchero triste.
-Peter yo también estoy aterrada-me quebré.
Lo rodeé con mis brazos y él dejó un besito en mi frente.
-Sólo necesito más tiempo Lali...-me habló en un susurro.
-¿Y si no pasa? ¿Y si no desarrollas sentimientos?
-Varios ya los tengo.. te quiero-me lo repitió volviéndose serio- mucho te quiero... sos una de las personas que más aprecio y quiero actualmente, ¡y seamos sinceros Lali! Es prácticamente imposible que no termine a tus pies-apartó las lágrimas que se me escaparon con una de sus manos- no me llores
-Ya lloro y no sé porque lloro-complejamente vulnerable me puse de pie para recostarme en mi sector de la cama matrimonial, me metí ahí adentro, debajo de las sábanas.
Temblé al rememorar el sonido de los disparos, los cuerpos, el rojo... el caos...
Peter se metió en la cama y a pesar del dolor que tenía en su cuerpo me abrazó, nos quedamos haciendo cucharita en silencio.

No se cuanto tiempo tuvo que pasar para poder volver a mi país, pero al llegar tenía una ecografía.
-Hola-me saludó la profesional, me recibió en su consultorio-me llamo Bernada
-Soy Mariana-me presenté aunque probablemente ya lo sabía- vengo por la ecografía y para algunos exámenes de rutinas
-Claro, igual acá lo tengo anotado-me señaló su computadora- vamos a ver cómo estas, contame, ¿pasaste por algo estresante o te dolió algo?
¿Por donde arranco?
-Pasé por momentos estresantes de mierda, y lamentablemente para mi eso se volvió moneda corriente-hice fuerza para no llorar- lo único que me hizo accionar y querer levantarme de la cama fue esto, por favor necesito saber si está todo bien
-Ahora vamos a verlo, a corroborarlo, y tratá de no pensar en cosas feas, se que es muy fácil pedírtelo, pero hacé el esfuerzo-la mujer esbozó una pequeña sonrisa para animarme y asentí con la cabeza.
Tomé aire y lo solté de manera lenta, me levanté la remera para la primera ecografía.
-¿Podes llamar a Peter?-me arrepentí de mi decisión de pasar por esto sola.
-Está bien-salió del consultorio, Peter entró detrás de ella y al verme se acercó-ahora sí
Sentí una caricia suave en mi cara, Peter dejó un besito en mi frente.
-Al final me quisiste junto a vos...-se sorprendió.
-Te dije que de ahora en más íbamos a estar juntos en lo bueno y en lo malo.. perdón por no haberte permitido estar conmigo, estoy muy nerviosa, y tengo miedo de que
Me besó, me silenció de un beso.
-Te entiendo Lali, pasaste por mucho
-Tengo miedo de que algo ande mal Peter, no voy a ser fuerte si algo así pasa, y lo que menos quiero es que cargues con algo así, que encima tengas que cuidarme y..
Nuestra conversación fue interrumpida por la mujer que estaba haciéndome la ecografía.
-Mamá y papá el bebé está bien, escuchen su latido-aumentó el volumen y mi mundo se paralizó, comencé a llorar nuevamente- está sanito o sanita.. igual vas a hacerte varios análisis Mariana pero estas bien
Sin dejar de llorar asentí y Peter dejó varios besos en una de mis mejillas, miré la pantalla maravillada.
Pasó un tiempo largo y para mi duró menos de medio minuto, recibí en mi mail la grabación de la ecografía y al salir del consultorio suspiré aliviada.
-¿Vamos a desayunar?-Peter me sacó de la clínica.
Caminé a su lado sosteniendo su mano con la mía, lo solté al llegar a una esquina.
-Perdón porque por poco me mando sola..-seguí en un estado de culpa absoluta.
-Lali-Peter agarró mi cara entre sus manos- creo que a esta altura nada me asusta... bueno sí, que algo te pase a vos y a nuestro bebé, sé que pasamos por muchos dolores y momentos para el olvido, pero si algo llegaba a pasarle a nuestro bebé íbamos a estar juntos... íbamos a tenernos el uno al otro, nos tenemos el uno al otro-me aclaró- puedo pasar por más mierdas, bueno eso si vos sos mi compañera... y si estas.. porque vos me das fuerza, vos me haces olvidar que mis piernas me duelen y queman del dolor... vos sos el motivo del porque sigo acá, vos me regalaste otro motivo más..-bajó su mirada hacia mi abdomen todavía plano y me lo acarició- sos fuerza Lali, sos fuerte.. y al mismo tiempo sensible, no tenes miedo a mostrarte vulnerable... sos graciosa y hasta usas las desgracias a tu favor, intentas ponerle humor a todo... y...-rozó su nariz con la mía- te quiero mucho, mucho te quiero.... Y...-le costó mechar varias palabras juntas para decir algo- no me apartes nunca más Mariana-me llamó la atención.
Sin saber exactamente que hacer volví a asentir con la cabeza, Peter me dio un abrazo reconfortante y besó mi frente, nos apartamos un poco y cambié de tema.
-Vamos a desayunar-le sonreí cómo pude y él me tomó nuevamente de la mano.
Pedimos té, comí tostadas con dulce, me tragué dos medias lunas y suspiré, no me podía entrar más nada en la panza, comer toda acelerada y nerviosa provocó el hecho de que me agarren nauseas, menos mal que había vuelto a mi casa.
-¡La puta madre!-quería llorar.
Salí del baño, Peter quería abrazarme pero me alejé.
-Ey-quiso traerme calma.
-Voy a asearme otra vez, quiero otra ducha y dormir, dormir mucho mucho, eso va a hacerme bien
No lo dejé seguir indagando en el asunto, y por suerte no preguntó mucho más, simplemente me acompañó, dormí toda la mañana y toda la tarde, me moví de la cama para cenar.
-Algo sanito y liviano-me sirvió sopa y lo miré de mala gana- es lo mejor-me quiso convencer, al parecer puse una cara graciosa porque se rió- sos tan linda-besó mi mejilla y la emoción me hizo sentir un algo en el pecho- ¿esta bien o está incomible?
-Está bastante comible.. pasable..-lo jodí y él elevó sus cejas, se cruzó de brazos y suspiró- sé que está mucho mejor que eso
-Tampoco tanto capo-seguí molestándolo, logré sacarle otra sonrisa a Peter Lanzani, entonces rocé mi nariz con la suya de manera cariñosa, cómo lo haría cualquier persona que quiere a un otro, busqué su complicidad y la tuve, al mirarnos a los ojos tan solo por un instante olvidé todo lo horrible, todos mis miedos, todo lo que me detenía a decirme "estoy enamorándome" porque Peter está consiguiendo el que me enamore, el que sienta lo que nunca sentí, ahora creo saber acerca de ese "algo" que tanto él me hablaba, y tengo miedo a que jamás lo sienta por mi, porque él me lo dijo desde un principio, el amor suele ser algo de una sola vez en la vida.
Angustiada me tragué mi angustia y le dije a Peter que seguía con sueño, volví a mi habitación y me tumbé en la cama, cerré mis ojos deseando que las cosas cambien, y que lo hagan a mi favor, no iba a poder tolerar más otra desilusión.