eight tangerine

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꒰ᐢ • ˕ • ᐢ꒱

Después de aquel día sus sentimientos habían quedado muy revueltos, en especial porque su hermano le había hablado con aquella voz de mando, era la primera vez que su omega pasaba por algo como eso y se había dado cuenta que quedaba bastante afectado por aquella voz.

Y no sabía si es que el mundo estaba conspirando en contra de él, y sus maldiciones por la Diosa Luna se habían aumentado cada vez que caminaba con su mejor amigo y se encontraba con ese Alfa tonto, por otro lado, su omega se ponía sumiso y en lo único que pensaba era en entregarse ya de una vez a aquel Alfa que tanto le confundía, pero Yoongi jamás había dejado que su omega mandara en el, lo conocía, era débil, y sumiso, no quería que su omega saliera lastimado así que por ese motivo siempre lo hacía a un lado, importandole muy poco lo que el quisiera.

Jin como disculpa lo había invitado a su casa a pasar una tarde los dos, viendo alguna película y comiendo helado o también podrían sentarse a jugar y charlar un rato, lo único que quería el omega mayor era que el adorable omega de gatito se olvidara de lo que había pasado ese día, y también que Jimin se disculpara de buena forma con el adorable chico, a pesar de que le insistió muchas veces casi no accede pero al final accedió cuando le dijo que si seguía de aquella forma tan arrogante Yoongi jamás caería rendido por el y aun más cuando este era un omega tan rudo y de raza pura, que no eran para nada fáciles de cortejar, Jimin lo pensó un poco y se dio cuenta que su hermano tenía razón, si seguía comportándose como un patán no ganaría a el bonito omega que tanto quería, así que por más que le doliera en su ego se iba a disculpar con el gatito.

No sabia que ponerse, tenia que aceptarlo y es que después de ver lo lindo y amable que era Seok Jin con el, no pudo evitar sentirse acomplejado por no ser como el, un omega frágil pero que podía dar órdenes, su cuerpo era delgado y delicado, su piel estaba bien cuidada y a pesar de que llevaba siempre puesto el uniforme se servicio junto con una bata blanca se veía muy bien.

El por otro lado, siempre vestía con prendas oscuras y bastante grandes, lo último no le molestaba, pero siempre quería aparentar ser algo que no era y aveces eso lo agotaba un poco, porque en realidad era igual de frágil que una bella flor.

Sus hermanos varias veces le habían dicho que los colores claros le quedaban muy bien a el, que su piel pálida podía hacer un muy buen juego con tonos como el azul o el rosado, pero el, siempre siendo tan necio y llevando la contraria no lo hacía, y vestía de una forma muy diferente a lo que se suponia que un omega tenía que vestir, pero esta vez no se quería ver así, quería verse lindo y adorable pero tampoco tanto como para causar cringe o repulsión.

No sabía que hacer e iba a comenzar a entrar en crisis si nadie le ayudaba.

Escucho la voz de su hermano Hoseok, el cual al parecer recién llegaba de la universidad, así que sin esperar ni un solo segundo bajo corriendo a recibirlo.

- ¡¿Que tal te fue?! - Pregunto entusiasmado con una dulce sonrisa, era el único que lo podía ayudar.

- Oye, oye, cálmate, ¿que te paso? ¿Paso algo malo? ¿Por qué te comportas así? Normalmente ni siquiera me saludas cuando llegó - Comento confundido mientras miraba a su hermano pequeño.

Yoongi se quedó callado e hizo un adorable mohin.

- Ya se que sabes que quiero algo, pero aunque no parezca si me preocupo por ti, tonto, y si, necesito de tu ayuda - Dijo y luego le sonrió a su hermano.

Omega difícil - JimsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora