– Ven, date un baño que te prestó ropa – comenzó a caminar hacia las escaleras y la seguí, llegamos a la que supuse sería su habitación, ella se dirigió a su armario. – Te prestaré una camiseta pero me la devuelves – me advirtió a lo que asentí.
Me pasó una camiseta del Arsenal firmada por muchas jugadoras del Arsenal y como buena fanatica reconocí la firma de Leah Williamson.
– Me voy a desmayar – dije en broma – Gracias es el mejor regalo que me han hecho – me miró frunciendo el ceño.
– No te la estoy regalando – me regaño. Puse mí mejor puchero pero parecía no quebrarse así que deje de intentarlo. – te dejo para que te bañes, te espero abajo – se fue de la habitación.
Me duche rápido tratando de sacar la mayor cantidad posible de harina de mí cabello, me puse esa camiseta y el pantalón junto con unas pantuflas que me pasó Beth.
Cuando baje me encontré a la rubia con su celular hablando con alguien, no quise molestarla asi que pase a la cocina para seguir cocinando. Después unos minutos ella apareció.
– ¿Que tal la ducha? – pregunto con diversión.
– Fantástica, solo faltabas tu – le guiñe para ver su sonrojo.
– ¿Te ayudo? – pregunto cambiando de tema. – Ponte el delantal por qué pobre de ti me manches esa camiseta – me advirtió sería tanto que me dio un poquito de miedo y me lo puse.
– Si mira, esto es facil, tienes que hacer unas tiritas con la masa, después las cortamos por último las ponemos a hervir y listo – le señale como hacerlas para yo concentrarme en la salsa.
A Beth le estaba costando un poco, decidí ayudarla, yo hacía las tiritas mientras ella las cortaba en pequeños trozos.
– Esto es divertido – dijo con una gran sonrisa mientras estiraba la masa.
– Y delicioso – dije presumiendo la comida.
– Creo que si tuvieras un restaurante, la gente iría por lo vendedora que eres – me reí por la ocurrencia.
– Me indigna un poco pero tienes razón – sonrió mientras terminaba de cortar la última tira. – Tu ponlos en el agua caliente y yo saco la salsa – la probé con una cuchara, a mí gusto estaba bien pero hoy la probaría Beth así que saque otro poco y se lo di – prueba – dije, como ella tenía las manos ocupadas se lo di yo.
– Riquísima – se ve que le había gustado en verdad. Unos minutos después le estaba sirviendo la comida en un plato esperando su respuesta.
– ¿Y? – pregunté cuando comió el primer bocado, cerro los ojos saboreando.
– Mm tienes razón, esto es una delicia – dijo mientras se llevaba otro bocado a la boca. – tengo que aprender a cocinar está delicia –
– ya viste que no es difícil – vi como seguía saboreando cada bocado. – Me dijiste que estás estudiando, ¿Que estudias? – me daba curiosidad.– Derecho, mis padres tienen un Bufete de abogados y bueno tengo que seguir la tradición – la mire con atención.
– ¿Te gusta la carrera? – pregunté con curiosidad.
– Es muy curiosa señorita Miedema – respondió.
– Si puede ser, si te molesta no me contestes no quiero incomodarte – hablé rápidamente.
– Sinceramente no me gusta la carrera, quería jugar fútbol de forma profesional pero no pude por una lesión – dijo con una sonrisa de lado.
– Yo disculpa no quería incomodarte – hablé nerviosa de que mi pregunta la hubiera incomodado.
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historias - futbolistas
Fanfichistorias de pura imaginación de mis parejas (ships) favoritas del futbol. Espero que les guste o al menos la disfruten.