historias - futbolistas

Jenni y Alexia "Abrazo"

A lo lejos vi a la chica que hace unos años me conquistó, que me hizo descubrir y
amarme a mi misma, que siempre estuvo para mí siendo una gran amiga y compañera.

Sin dudarlo dos veces caminé hacia Jenni que estaba acompañada de otra comentarista.

Admire su vestimenta, iba con unos pantalones cargo de color verde y una camisa del mismo estilo y color, como siempre se veía espectacular.

Llegue directa a abrazarla, hacía meses no la veía y ya se sentía mucho el no estar con ella
en todo el duro proceso que atravesó por culpa de Rubiales.

Aspire su olor sintiéndome como en casa, me sentía como una mala novia al pensar todas
estas cosas de otra persona pero Jenni era, es y será la dueña de mi corazón.

– ¿No quieres que te pregunte nada? – susurro divertida pero tenía el micrófono encendido por lo que se escuchó ya que la otra chica me comenzó a hablar obligándome a desviar la atención de Jenni.

Deseaba quedarme unos minutos más abrazándola contra mi.

– Alexia ¿Qué tal? ¿Cómo estás? Te ha pillado por banda tu amiga – sentí algo extraño en
mi cuerpo cuando la periodista dijo “tu amiga” si tan solo hubiera hecho las cosas bien en el pasado.

– No pasa nada, lo hago por ella – la miré embobada y ella me regañó con la mirada para que prestara atención, una conexión que teníamos desde que entró al Barcelona.

Seguimos charlando un rato de varias cosas hasta que ellas tuvieron que entrevistar a otra jugadora, espere antes de entrar a los vestuarios por ella apoyada en la pared de los
túneles.

– La reina con tanta sencillez como siempre – sonreí inevitablemente al escuchar su voz y verla caminando hacia mi.

– La ocasión lo amerita – rió abrazándome nuevamente – Te he extrañado tanto jenni – susurre con cariño.

– Yo también Ale – nos separamos y nos miramos durante unos momentos, sus ojos verdes me dejan hipnotizada cada vez que los veo.

– La pareja feliz está de vuelta – se acercó Mapi sonriendo apoyando su mano en el hombro de Jenni.

– ¿Y tu media naranja? – reí al ver la cara de Mapi al escuchar lo que dijo la madrileña – Anda que seguro la andas extrañando – la empujó de nuestro lado en dirección a Ingrid.

– ¿Todo bien con Olga? – preguntó con una pequeña mueca que apenas note.

– En lo pasable – suspiré, mí relación estaba en una situación extraña cuando volví del mundial mí novia estaba diferente.

Además ella viajó para “apoyarme” en los partidos de la selección pero apenas llegó comenzamos una discusión porque nos encontró durmiendo a mi y a Jenni abrazadas, obviamente no paso nada solo dos amigas de mucho tiempo que se sentían mal se apoyaban mutuamente, Olga lo tomo mal provocando una gran discusión que tratamos de arreglar viajando a una pequeña playa pero después se fue todo al carajo nuevamente y ella tomó la decisión de viajar a Bali para ‘descansar’ aunque yo sabía la verdadera razón de ese viaje.

Mi querida novia me es infiel, mi intuición me lo dice pero también tengo pruebas, lo hace con nuestra amiga Alba hace aproximadamente 4 meses atrás.

¿Por qué no digo nada? Para evitarme problemas tal vez, no lo sé, solo sé que soy una estúpida.

– ¿Quieres hablarlo? Sabes que a pesar de todo soy tu amiga – suspiré no queriendo pensar en Olga y tratar de concentrarme en Jenni.

– Está bien ¿Tu como has estado? ¿Te han vuelto a molestar? – asintió, todo el asunto de Rubiales le había traído mucho odio a pesar de ella no haber hecho nada.