¡Claro culpen a la villana!

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''Listo'' Soo Youngmi se pegó una nueva curita en la frente y después tiró la vieja al bote de la basura.

Después caminó hacia su cama y se echó boca arriba perezosamente. Su mente estaba llena de lamentos y pensamientos complicados.

Si tan solo...si tan solo no hubiera comprado esos zapatos baratos...no me habría desfugurado mi hermosa cara.

Ella tocó la venda de su frente con una expresión amarga, pues ya se había imaginado su futuro prometedor como ''soltera codiciada'' ¡Ya se veia! Con cuatro chicos guapos y musculosos cortejándola a cada lado...pero ¿Si se desfiguraba les seguiría agradando?

Un momento...¿Por qué tenía que agradarles? Si en este mundo ¡el dinero mandaba! y con su inmensa fortuna no faltaría chicos guapos que se servirían ellos mismos en bandeja de plata para ella, después de todo no lucia tan mal, de hecho ella era una hermosa... ¡Afrodita en su forma humana!.
Por lo que una simple cicatriz no opacaria su hermosura, además ahora que lo piensa, si esos hombres calvos y gordos con una gran barriga cervecera estaban rodeados de chicas jóvenes y hermosas ¿Por qué ella no podría?...¿Qué diferencia había? ¿Dinero? ¡Ja! Ella tenía mucho...bueno tendría mucho.

Soo Youngmi dejó de lamentarse y se  sentó en la cama con decisión, los chicos guapos no se mantenían solos por lo que...ella debía continuar con... su...  trabajo.

Ella miró con horror la inmensa pila de papeles esparcidos por toda la cama...y..

¡Paf!

Cayó pesadamente sobre la suave cama.

Era tanto trabajo, tanto...ella quería llorar pero ya no tenía más lágrimas,  nunca pensó que sería tan difícil el seleccionar empleados para una compañía, pero...ahora que lo hacia...ella quería morir.

Tanto que leer y ver, además a sus ojos todos los curriculums le parecían iguales.
Su principal problema eran los dibujos de muestra que habían hecho los artistas, al verlos ella penso que eran la definición de ''arte hecho por los mismísimos dioses''.
Y otro problema, ella no conocía las dichas ''universidades prestigiosas'' o de alto nivel, y ni hablar de los distintos premios o reconocimientos que algunos tenían adjuntos en los curriculums.
Por esto y más, a sus ojos todos le parecían  excelentes candidatos para su estudio de animación...y los contrataría a todos si pudiera, pero...no tenía dinero.

Actualmente tenía en su poder poco más de dos millones de yuanes en su tarjeta, que serían usados para pagar los sueldos de sus futuros empleados. Como era lo último que le quedaba ella juró cuidarlo como si fuera su alma misma.

No por nada se había arriesgado y había usado la tarjeta de Feng Doyun para pagar los servicios de remodelación, limpieza y demás cosas que su empresa necesitaria a futuro.

Y no olvidemos que para evitar pagar por un servicio de reclutamiento de empleados, ella había tenido que ir a una de las empresas de Feng Doyun. Como esta recientemente había contratado nuevos empleados ella supuso que debían tener los currículums de varios profesionales, y no se equivocó, porque efectivamente si habían muchos de ellos.

Lo único que tuvo que hacer para conseguirlos fue actuar como una dominante señorita y...literalmente ser como la Soo Youngmi original. Solo así la dejaron entrar y llevarse todo lo que ella quisiera.

''Bostezo''

Esto era aburrido, no importa cuanto lea todos eran igual de buenos. Por lo que decidió no seguir más con esto y concentrarse en otra tarea más importante...¡Dibujar!

¡Ring! ¡Ring!

Soo Youngmi miró con pereza su teléfono que estaba sobre su peinadora, exactamente a cuatro metros de ella...¡Tenía que ser una broma!...ya había amoldado su lugar.

EL ARTE DE SER VILLANADonde viven las historias. Descúbrelo ahora