Todo para terminar siendo un cebo.

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En una alejada calle en los bordes de la ciudad, Hu Luo y Chen Linxy volvían de haber comprado una tela especial que padre Chen les había encargado.

"Y cuando mi mamá volvía del trabajo cenabamos entre las dos unos ricos platos de chao mian o  bolillos con arroz, la verdad es que nuestro menú dependía de mis pobres habilidades para cocinar, así que no se podía esperar mucho,  pero al menos era comestible" Hu Luo sonrió levemente y sus ojos brillaron al recordar aquellos buenos tiempos. Dónde su madre aún estaba con ella, cuidandola y mimandola como a una princesa...a pesar de que tenían poco, vivían felizmente... Hubieran seguido así, si tan solo ella no hubiera sido una carga...

"Eso cuando aún no adoptaban a tus hermanos ¿Verdad? ¿Cuando lo hicieron? Siempre he querido saber" pregunto interesada Chen Linxy sin disimular ni un poco su curiosidad. Ajena a los pensamientos conflictivos de su amiga.

"Eh, si, eso fue mucho antes" respondió Hu Luo, sacudió la cabeza para dejar de lado sus pensamientos culposos, para después detener su camioneta en un semáforo en rojo "sus padres murieron en un accidente de bote hace cinco años, al hacerlo los dejaron completamente solos y no pudimos encontrar a sus familiares cercanos porque nadie en el pueblo sabía con exactitud de que parte del país había emigrado la familia. Lo único que se sabía era que llegaron hace tiempo del sur, con un bebé en brazos y un niño de como mucho dos años"

"Y esos eran tus hermanos" divago Chen Linxy a lo que Hu Luo asintió "ah, ya entendí ¿Enserio no pudieron encontrar a ningún familiar" preguntó con incredulidad mientras ladeaba la cabeza "¿No había alguna forma de averiguarlo? ¿Ni la policía pudo averiguarlo?" dudó de esa afirmación, pues le parecía imposible que aquellos policías perfectamente entrenados, capaces de encontrar a una persona con solo una lata de pintura con  huellas dactilares como indicio (a lo que ella recordaba) No pudieran encontrar a los familiares de dos personas, aunque tuvieran los cuerpos completos.

Pero lo que ella no sabía es que ambas personas desaparecieron en el lago para nunca ser encontrados, probablemente se perdieron en las profundidades de aquel profundo y amplió lago.

"No, no pudieron ayudarnos" Hu Luo negó con la cabeza antes de continuar "era un pueblo alejado y con menos de quinientos habitantes, así que no había grandes estaciones de policía como en esta ciudad. A lo mucho los oficiales tenían una computadora y nada más, de hecho la estación no era  más que un cuarto amplió con una celda a un costado que nunca era usada. Por lo que no pudieron ayudarnos. Lo único que nos pudieron decir era que las identificaciones de ambos eran falsas y no figuraban en el sistema" 

"¿Falsas? ¿Enserio?" Chen Linxy se atragantó con el refresco "Que misterioso..." entrecerró los ojos y miró con sospecha a Hu Luo "no será que...sus padres eran prófugos de la justicia o tal vez, tal vez..mmm, eran personas poderosas huyendo de sus enemigos ricos o tal vez de sus controladores padres y..." 

¡Paf!

Chen Linxy se palmeo la mejilla por la vergüenza "No me hagas caso solo estoy diciendo tonterías" se recostó perezosamente en el asiento, tiró a un lado la botella y cruzó los brazos con frustración. ¿Por qué había dicho algo tan estúpido?.

Al mismo tiempo el semáforo cambió de color por lo que Hu Luo avanzó y continúo contando sus felices y no tan felices historias con un dejo de nostalgia,tristeza e impotencia reflejado en sus ojos.

Contó como revisaron a fondo la casa buscando alguna pista que les permitiera encontrar a sus familiares, pero solo lograron encontrar una foto de la pareja con uniforme escolar  en lo que parecía ser un jardín lleno de flores de cerezo y muchas más especies que no pudieron identificar. Lo importante era que en el centro del jardín había un árbol de ginkgo con una inscripción en su tronco.

EL ARTE DE SER VILLANADonde viven las historias. Descúbrelo ahora