En una mansión lujosa e imponente, que reflejaba antiguos tiempos de gloria. Donde hasta las paredes susurraban historias de tiempos mejores. La malvada villana, ahora recibía su merecido castigo por toda su vida de maldad.
Ella, antes dominante y feroz, ahora se encontraba encadenada a una silla de madera. Su cabello, antes brillante y cuidado, ahora caía en mechones desordenados sobre su rostro. La fortuna de su familia se había desvanecido y con ella, su poder y su influencia.
Frente a ella, en una silla de ruedas, estaba el temido Yang Feiyu, un hombre de mirada intensa y sonrisa feroz. Su antiguo prometido, el cual se había obsesionado con ella de una manera enfermiza.
"Youngmi, pequeña" dijo Yang Feiyu con voz sarcastica "¿acaso los Soo no te enseñaron a cumplir tus promesas? ¿Por qué trataste de escapar otra vez? ¿A dónde querías ir ahora? acaso....¡pensabas ir a ver a Feng Doyun!" su grito resonó en todo el cuarto, reflejando el odio que sentía por el hombre mencionado.
Soo Youngmi, la antes poderosa villana, después de sonreír miserablemente por su destino, levantó la cabeza con dificultad, y con unos ojos llenos de odio susurró con voz quebrada "Eres un loco, Yang Feiyu, solo eres un simple loco como cualquiera que podría encontrar en un manicomio. ¿Quieres saber si fuí tras Feng Doyun?" sonrió con satisfacción y gritó "Te lo diré, lo hice...¡Y qué! ¡Él no está lisiado, él es mil veces mejor que tú en todos los sentidos y...!"
¡Crash!
"¡Ah....!" Soo Youngmi soltó un gritó ahogado por el estruendo y se congeló, cuando bajo la cabeza y vió los pedazos de la taza esparcidos en el suelo y el gran corte en su pierna.
¡Estaba loco...!
Yang Feiyu era así, parecía bueno y amigable a primera vista, pero solo era una máscara que ocultaba su aterradora y peligrosa personalidad. Si lo provocabas, no podías salir ileso, pero....¿Qué más puede hacerle?. Ella ahora no tiene nada...
"Mira lo que hiciste" con un movimiento brusco, Yang Feiyu giró su silla de ruedas y se acercó a una mesa llena de frascos, jeringas y demás indumentaria médica.
"Soo Youngmi todo esto paso por ti, todo lo que hice y la manera en la que terminé fue gracias a ti. Aún así insistes en provocarme ¿No estás cansada de hacerlo siempre? Peleas, insultas y denigras como si aún fueras la poderosa hija de Soo, no asimilas tu nueva realidad y....todo termina en esto"
Sus hábiles manos abrieron con precisión una ampolla de vidrio con una desconocida sustancia, que extrajo con sumo cuidado, con una jeringa.
"Una dosis bastará" susurro para si mismo y se dió la vuelta .
Ante la aterradora vista Soo Youngmi frunció el ceño e infructuosamente trató de retroceder, chocando su espalda repetidas veces contra la silla.
"Tú....¡Hombre loco alejate de mi! ¡No te acerques!" ella, con desesperación sacudió su cuerpo tratando de liberarse de las cadenas.
Yang Feiyu, lejos de enojarse sonrió con sus filosas facciones "Si, tienes razón, soy un loco...un maniático que se aferra con fuerza a su última razón de vivir. Pero...no soy cualquier loco, pequeña. ¿O acaso crees que un loco común encontraría la última morada de los grandes hijos de Soo?
"¿Qué...?" la voz de la villana se quebró, detuvo sus bruscos movimientos y miró con ojos aterrados al hombre que tenía enfrente.
Este sonrió con orgullo y explicó mientras se acercaba con su silla de ruedas "Si, lo encontré. Aunque tus padres, antes de arrojarse al lago y dejarte sola, se aseguraron de esconder muy bien sus tumbas logré encontrarlas en poco tiempo ¿Quieres saber cómo?"
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EL ARTE DE SER VILLANA
De TodoLin Jeon transmigro a una novela de sangre de perro, después de morir a manos del fantasma de la villana de esta. Ella revivió como Soo Youngmi, una típica villana malvada, que hizo hasta lo imposible para separar a Feng Doyun y a Su Zara, pero al...