Simón no podía dejar de sonreír. Marceline, Mely y Doty corrían frente a ellos, no muy lejos, pateando un balón por el parque mientras él llevaba del brazo a Invernal, que empujaba el carrito de Marshall.
Niñas, nos quedaremos aquí, no se alejen demasiado - Les dijo Simón, mientras las niñas asentían. Invernal le sonrió a Marceline, quien le guiñó un ojo de manera cómplice.
Invernal colocó el carrito de Marshall en su lugar para que no rodara solo. Luego se dio la vuelta para mirar a Simón, que aún observaba atentamente a las niñas con una sonrisa.
¿Manchita? - Invernal levantó la ceja con una sonrisa. Simón suspiró con una sonrisa más calmada y se dio la vuelta para quedar cara a cara con Invernal.
¿Sí? - Invernal se tomó su tiempo para admirar a su pareja. Él sabía que era malo, lo sabía, pero aun así, el universo lo había recompensado. No le importaba lo que tenía que hacer, no le importaba matar, no le importaba dañar, siempre y cuando pudiera mantener a su familia a salvo. Era una de las cosas en las que él y el Rey Flama estaban de acuerdo.
Invernal miró al suelo. Marceline, Mely y Doty se acercaron por detrás de Simón. Marceline usó sus poderes vampíricos para volar detrás de Simón lentamente. Con una sonrisa, Invernal se arrodilló frente a Simón, que se mantuvo en silencio durante un buen tiempo. Luego abrió sus ojos y su boca como un pez, sorprendido y sonrojado. Ya sabía lo que venía.
Simón, eres mi alma gemela, la mitad bondadosa que me complementa. Me has dado muchos regalos. Marceline y yo estábamos solos y perdidos hasta que tú llegaste a mi vida - Simón escuchó atento y se sorprendió al mirar hacia arriba, encontrando a Marceline y a las niñas en el suelo lanzando flores desde arriba y desde abajo - Eres lo mejor que nos ha pasado. No solo trajiste a las niñas y a Marshall hasta mí, también me hiciste feliz aumentando mi familia con dos heroínas y llenaste mi vida de aventura y color... Manchita, te amo. ¿Te casarías conmigo?
Oh Dios, Invernal... sabes que no puedo negarme a algo tan lindo. Claro que quiero casarme contigo, rey idiota - Invernal sonrió ante la respuesta positiva de Simón. Lentamente puso su palma frente a Simón, pidiendo su mano.
Mientras las niñas vitoreaban y reían, Simón entregó su mano a Invernal, quien besó sus nudillos y colocó el anillo de compromiso con una sonrisa en el rostro. Ahora él y Simón estarían unidos para siempre, y muy pronto su felicidad sería completamente eterna para los dos.
Te amo - Susurró Simón mientras Invernal se levantaba para besar los labios del castaño, mientras las niñas se acercaban a ellos aferrándose a sus padres en un gran y amoroso abrazo. Pero mientras estaban en eso, Marshall comenzó a reír. Simón sonrió con ternura, sabiendo que su bebé sentiría su felicidad.
Así pasaron los días: preparación, amor, Invernal amenazando a gente a escondidas de su "manchita" para que todo lo que él quería se cumpliera al pie de la letra. Hicieron que le hicieran un traje blanco a Simón, a medida. Sus dos trajes iban a juego, blancos con detalles celestes y dorados de nieve.
Marceline llevaba uno de sus lindos vestidos góticos, con lazos, y en su cabello una decoración con forma de copo de nieve, pero de color morado.
Mely llevaba su vestido azul con su lazo, un par de aretes de copos de nieve color azul brillante decoraba sus "oídos", Doty iba idéntica a Mely pero de color rojo.
Marshall tenía un pequeño trajecito color celeste con un babero blanco con bordes dorados y un clip de un copo de nieve plateado.
Fionna iba, por supuesto, con su ahora esposo, el Rey Flama, que se había vuelto muy cercano a Invernal, como si el Rey de Hielo hubiera pasado de ser su enemigo a su hermano mayor, y Invernal lo aceptó sin mayores problemas.
Cake había elegido llevar a Monochromicorn con ella, como su acompañante para la boda, por supuesto.
Simón e Invernal caminaron hacia el altar juntos, de los brazos y con miradas llenas de amor. Simón llevaba un copo de nieve de color negro y Invernal llevaba uno de color blanco. El ramo de flores de Simón era blanco. Cuando llegaron al altar, ni siquiera escucharon lo que les estaba diciendo el sacerdote. Estaban tan ansiosos por esto que dijeron "sí, acepto" y se besaron como nunca lo habían hecho antes en el altar.
Fionna se cubrió los ojos avergonzada, al igual que el resto, excepto Cake, por lo que la felina consiguió el ramo.
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❄️El rey quiere un principe ❄️[TERMINADA][corregido]
Fanfiction{SISTEMA DE MARCAS ALMAS GEMELAS} Simón, Fionna y Cake terminan por error en el reino de winter king, está asustado, ¡más cuando esté rey se abalanza sobre el!