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-Pasado-

No pude reaccionar al fuerte golpe que recibí en la mejilla, lleve mi mano a esa zona tratando de reducir el fuerte dolor que causo, las manos de mi padre fueron a mi chamarra.

—Eres un maldito descarado, presentarte aquí con esa excusa. ¿Dónde has estado durante estos dos días? — Mi padre me tomaba con fuerza y yo solo miraba al suelo. —No tienes ni que decirme, apestas a feromonas de omega.

—Padre...

Su dedo lo coloco en mi frente comenzando a hacer presión. —Te di la oportunidad para que no lo arruinaras, no pasaron ni veinticuatro horas y decides desaparecer.

Su dedo no dejaba de golpear constantemente mi frente, alce un poco la mirada encontrándome con la de mi amigo que veía horrorizado la escena.

—Solo te pedí que no la cagaras, en cambio decidiste ausentarte por dos días y yo tuve que ponerme a cargo de tu trabajo. — Mi padre me dio otro fuerte golpe en el abdomen, provocando qué me encogiera en el lugar, comenzando a quejarme porque saco el aire de mis pulmones. —También tuve que dar la cara por que le di mi palabra a Lando por que comenzarías a cotejarlo y estuvo esperando por ti.

Deje caer mi espalda contra la pared para poder recuperar, no sabía que contestarle a mi padre ahora todo lo que dijera solo me traería problemas y no podía decirle que acababa de marcar a un omega.

—Enderézate y veme a los ojos mientras te hablo. — Con dificultad me incorpore y lo mire a los ojos, trataba de mantenerme alejado para tratar de esquivar o cubrirme del siguiente golpe. —¿Con quién estuviste?

No sabía que responder a su pregunta, era obvio que las feromonas de Checo eran fuertes por el celo. —Solo... es un chico con el que estoy saliendo.

Y me dio un golpe en la cabeza al terminar de hablar. —Vas a dejarte de tonterías, te conseguirá un omega de verdad, Lando es un buen partido a los demás solo les interesara tu estatus. — Se volvió acercar a mí y dio unas palmadas fuertes en mi mejilla. —Te creí más inteligente hijo

—Si padre, tienes razón. No volveré a ausentarme y ten por seguro que hablaré con Lando para pedir disculpas. — Dije tragándome todo mi enfado, no podía admitir ahora mismo que estaba atado a otro omega, por el que tenía sentimientos.

—Charles ponlo al tanto de todo lo que pasó en estos días.

—Si señor.

—Espero no volver a tener que poner orden a este lugar porque no me importara quitarte el cargo qué yo mismo te di.

—No tendrás que volver a venir, todo estará en orden.

—Adiós.

Mi padre se fue dejándome junto a mi amigo que inmediatamente corrió a revisar que todo estuviera bien. —No tengo nada, solo fue un pequeño golpe.

—Trate de advertirte qué no entraras, tu padre...

—Olvídalo, tengo que irme hay otra cosa que tengo que hacer. — Charles me tomo del brazo.

—¿Estuviste con el omega del qué me hablaste?

—Si. — Di una respuesta cortante.

—Deberías de olvidar lo que dice tu padre...

—Lo mejor es que te calles, me iré un instante, pero regresaré en un momento.

Me despedí y subí a mi camioneta para comenzaré a manejar por la carretera, tenía una gran frustración ahora mismo, porque tenía que soportar este tipo de cosas. Y a minutos de llegar a mi cabaña pude ver oír la ventana a Checo qué caminaba despacio y no dude en pararme.

Say You Are Mine?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora