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Después de pensarlo tanto, las cosas se complicaban más y más en su cabeza. Cada vez que veía a Jisung, sus ojos brillantes de bambi, sus labios finos y suaves, y su personalidad amable...comenzaba a arrepentirse de haber dado un primer paso con una mentira horrorosa. Jamás pensó en las consecuencias antes, pero ahora era lo único que tenía en mente.

Además, sus amigos insistían en hacerle bromas al respecto. Le decían que iba a perder tarde o temprano porque no podían esperarlo toda la vida a que gane. El tiempo de la apuesta estaba caducando y su razonamiento también. Ya no estaba seguro de nada. Su ego que solía abundar, cayó de un precipicio directo al vacío y llegó la culpa a hacerle sombra.

—100 dolares a que no te lo follas en los baños. —Dijo uno de sus compañeros de equipo, tomándolo por sorpresa mientras se vestía para el partido.

—¿Qué? —Su voz era fuera de onda. No le agradó para nada, mucho menos le hizo gracia. —No seas un puto asqueroso.

—Vamos, hay que agregarle emoción a la apuesta. No tiene gracia que andes de la manito con el raro y todavía no nos diste ni un beso de prueba. ¿Cómo sabemos que están saliendo?

—Ni siquiera lo escuchamos confesar sus sentimientos. —Mencionó otro de fondo.

—No voy a follarme a Jisung en la escuela. —Respondió con molestia, azotando la puerta de su casillero con fuerza.

—No te enojes~

Las risas sonaban similares a las hienas. Estaba cansado de ese constante chirrido en sus oídos, atormentando su estado de ánimo. Se giró agotado y tomó por la camisa a su supuesto amigo; Jae. Apretó bien el agarre de la camiseta y la retorcio al punto de ahogarlo un poco.

—No me jodas, me tienes harto con tu sentido del humor de mierda y esa forma de hablar desagradable. ¿No tienes una vida? Búscate un asunto y metete en lo tuyo, imbécil.

Sus palabras salían tan naturales y serias que todos dieron un paso atrás. Los ojos de Minho estaban algo rojos y se le marcaban las ojeras negras por la falta de sueño. No era momento de hacerlo enojar porque ya venía enojado con su propia discordia interna.

—Wow...espera, no es para tanto. ¡El que se enoja primero, pierde! —Gritó el alto, riendo por último cuando el castaño se marchó sin más.

Jugaron el partido con tensión desde el principio. Jisung que fue invitado para ver a su novio en vivo, podía notar que algo andaba muy mal entre sus compañeros. Al final el equipo visitante terminó ganando por un punto y todos salieron decepcionados de las gradas. Sin embargo, él se quedó a esperarlo en la puerta del polideportivo, con total calma en su semblante.

"Ahí está el bicho raro de Jisung, míralo que idiota..." escuchó decir a uno de los chicos del equipo. Sabía que lo llamaban de esa forma a menudo, así que no le preocupó o molestó siquiera, hasta que vio a Minho avanzar a su lado. El castaño salió de la nada solo para golpear el rostro del que lo insultó, haciendo que ambos se metan en una pelea.

—¡Deja de molestarlo! —Lee realmente había perdido todo sentido. Golpeó a su compañero tantas veces sin oportunidad a que se defienda, que tuvieron que separarlos de a cuatro. —¡Solo deja de joder, Jaekhyun!

—¡Hijo de puta, no te creas mejor que yo. También jugaste con Jisung, todos en el equipo somos testigos! —El pelinegro se puso de pie con el labio cortado y un ojo morado, pero no fue impedimento para que lanzara todo al público, especialmente a Jisung que lo miraba con ojos asustados. —Escucha, tu tan querido "novio" solo está contigo porque hicimos una apuesta. A él no le importas en absoluto. Te repudia igual que nosotros por tu forma tan extraña de comportarte, te llamó de miles de formas despectivas y se burló de ti a las risas. Incluso nos mostró lo ridículo que eras tratando de gustarle en el chat del equipo. Todos vimos fotos tuyas.

—¿De qué fotos hablas? —Minho estaba confundido con esa parte de la historia, hasta que recordó algo terrible.

Al principio, en las primeras citas, tomó fotos de Jisung en secreto, en algunas hacía muecas graciosas o cosas así, pero nunca se las envió a nadie. Excepto por una vez que tomó una foto de Jisung cambiándose el short y puso una leyenda abajo "preparándose para mi". Fue una cosa estúpida de hormonado, no tuvo que hacerlo y se arrepiente mucho.

—No te hagas el desentendido...tu nos la enviaste. —Jaekhyun sacó su celular, llamando la atención de los ojos curiosos todos sobre él. —¡Miren, acá están las pruebas del chat!

Minho se quedo mudo, estaba mal, muy mal. Miró a Jisung y solo le devolvió la mirada en silencio, no parecía querer hablar para defenderse...o quizás no sabía que decir de la vergüenza.

—Mira, Jisung. —El pelinegro le acercó el celular a la cara como si no fuera capaz de ver bien de lejos. 

En algunos mensajes se estaban riendo de él, Minho había enviado fotos suyas sin duda alguna. Así que sí, era verdad. Todo fue una mentira y él cayó redondito.

—¡Yo no envié nada! —Lee se apuró en tratar de tomar el celular ajeno, pero sus compañeros lo agarraron por ambos brazos. —¡No fui yo, Jisung!

—Yo...—La cantidad de personas cuchicheando alrededor se callaron al escuchar que Jisung tenía algo que decir al fin. —dejé algo en el aula. Perdón.

Y se fue, acabando con el barullo tan pronto desapareció. Minho se soltó del agarre que lo mantenía atrapado y trató de seguirlo.

Minsung || Un Chico ExtrañoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora