Intercambio Corporal |Omegaverse| [JINX]

|14| Alejados

Dan escuchó lo que el menor le dijo, pero simplemente no podía creer que hablará de esa manera. Supuso que quizás estaba imaginando sus palabras, porque verdaderamente si quería escuchar una disculpa. 

El pelicastaño suspiro, abriendo la puerta dejando ver al mayor haciendo con sus dedos círculos en el piso por el aburrimiento. 

—- ¿Jae? —- preguntó el pelinegro al verlo —- Yo... Que bueno... ¿Quieres que te prepare algo? 

Las dudas removían su mente, no sabía cómo tratar al menor. Ni siquiera tenía idea de qué lo molestaba realmente, o si era un simple capricho encerrarse. 

—- Nada —- contestó el pelicastaño —- Dan, solo pásame ese plato. 

El mayor asintió, levantando la bandeja del suelo e ingresando al cuarto del boxeador. 

—- Solo dije que me pasarás la comida —- fruncio el ceño el menor —- No quería que entres. 

Dan bajó la mirada, ¿cómo podría comunicarse con él? ¿Qué le diría? 

—-¿Fuiste a tu reunión con Heesung, Hon Gu y papita? —- preguntó el menor —- Oh, también te ibas a encontrar con Hon Gu a solas, ¿no? 

Dan suspiro, a veces olvidaba que Jaekyung era un distraído. 

—- Estás en mi cuerpo, ¿cómo iria? —- preguntó con obviedad el mayor —- Bueno, les cancele a ambos. 

Jaekyung sonrió ante tal hecho, el pelinegro se había quedado en casa durante toda esa semana. 

—- Alista tus cosas, el carro viene en dos horas —- mencionó el pelinegro —- Un, verdad... ¿Qué ropa tienes? 

El mayor ingreso a su habitación, y volvió con unas cuantas prendas de ropa, tres polos, tres pantalones, una chompa, una casaca, dos jeans y nada más. 

—- ¿Eso es todo? —- preguntó el pelicastaño —- No pienso ponerme esas cosas. 

Oh, verdad... Jaekyung había pasado vestido con su pijama y solo salía con la ropa que tenía guardada de cuándo estaba en la secundaria. Necesitaba algo más que eso. 

—- Vamos de compras —- mencionó el menor —- 

Ingresaron a la primera tienda, una a la que Dan nunca en su vida habria soñado. 

Fueron recibidos con algo de alegría, pero al mismo tiempo el mayor sintió miradas despreciadoras hacia el menor. 

Jaekyung no le prestó importancia, simplemente caminó por toda la tienda, agarrando los conjuntos que más le gustaban, probandoselos y fue a la caja a pagar. 

—- Serían... —- susurro la vendedora —- 1 000 000 wones. 

Dan casi se desmaya al oír el precio, pero no tenía más remedio que entregarle la tarjeta al pelicastaño, al final era el dinero del boxeador. 

—- Gracias por su compra —- mencionó la vendedora —- Vuelvan pronto. 

Jaekyung asintió, llevando al mayor de la mano y dirigiéndose a otro lugar. 

Al final, las compras duraron 2 horas, algo relativamente rápido para la cantidad de cosas que el menor compró. 

Luego, al llegar a casa, Jaekyung eligió toda la ropa que se pondría Dan, y así lograron terminar a tiempo, llegando el auto que los llevaría al aeropuerto. 

Si, al aeropuerto. 

En toda esa semana, Jaekyung decidió buscar un lugar para vivir alejado de sus conocidos actuales que sea pacífico, sin complicaciones, con una casa grande y servicio de delivery. 

Lo primero que llevó Dan al vehículo, fue la Caja con cartas que le había dejado su abuelita antes de morir. Quizás, le serviría en el futuro. 

De ahí, ayudó a meter todo lo que Jaekyung le había ordenado. Ya en el auto, Jaekyung decidió dar unos candentes besos al mayor, juntando sus labios y sorprendiendolo. 

A medida que avanzaban, el mayor tuvo curiosidad en preguntar, pero temía molestar al pelicastaño. 

No tuvo más remedio que cuestionar que estaban haciendo, cuando llegaron a un aeropuerto privado subiéndose a un jet de primera clase. 

—- ¿Qué hacemos aquí? —- dijo el mayor —- ¿Vamos a viajar?

El menor asintió, subiendo a dicho jet y sentándose para conversar. 

—-Nos iremos a una isla algo alejada —- comentó el pelicastaño —- Todo hasta que volvamos a cambiar de cuerpo. 

Oh, ese ere en parte su razón. Pero sobre todo, no quería que Dan se relacione ni tenga algo que ver con sus colegas, especialmente ese tal Hon Gu. 

Incluso, cuando vuelvan a cambiar de cuerpo, podría seguir con el mayor en ese lugar alejado. 

Todo estaba prácticamente controlado, su Penthouse había sido alquilado, pronto su entrenador se encargaría de llevar a sus inquilinos y el pago era bastante bueno, por lo que costeaba bien su vida en ese nuevo lugar. 

—- Estamos fuera de peligro —- mencionó la azafata —- Pueden desabrochar sus cinturones. 

El pelicastaño miró fijamente al mayor, su rostro se estaba sonrojando, sintiendo un leve escalofrío caluroso recorrer todo su cuerpo. 

Pero algo lo sorprendió en sobremanera, Dan tenía el cabello pelicastaño, cómo siempre solía ser. 

—- Tu cabello —- susurro el menor —- Es... Pelicastaño. 

Observó nuevamente su cuerpo, rogando que por fin cambiarán de cuerpo, pero nada paso. 

—- Tu cabello es... De color negro —- susurro Dan mirándolo. 

Sus cuerpos seguían cambiados, pero sus características lentamente se parecían a la realidad normal. 

—-  Veo que ya llegaron a la siguiente fase —- mencionó una voz desconocida que los hizo temblar ligeramente —- Felicidades, es un buen avance. 

Oh, esa voz le parecía tan conocía al mayor. 

—- ¿Abuelita? —- susurro en forma de pregunta el ahora pelicastaño. 

La mujer se hizo presente ante ambos, dejándose ver en su forma más joven. 

—- Oh querido Dan, veo que las cosas van mejorando —- habló la pelicastaña —- En cuánto a ti... Joo Jaekyung, me alegra que sientas arrepentimiento. 

El menor fruncio el ceño, ¿aquella señora fue la responsable de todo ese intercambio? ¿Cómo tenía ese poder? 

¿Por qué lo torturaba de esa manera? 

—- Oi maldita anciana —- grito el pelinegro —- ¿Por qué me haces esto? Si yo incluso pagué tu tratamiento en el hospital. 

La mujer rió ante la respuesta del menor, ella no tenía la culpa de nada... Era simplemente un reaccionar del universo, algo que pasaría por el horrible carácter del menor. 

Y por un motivo en especial, que su querido Nieto y ese boxeador eran... Destinados. 

De otra forma, no habría esa oportunidad de ser una mejor persona. Pero, podría mentirle un poco al menor. 

—- Pude castigarte de peor manera —- mencionó la mujer —- Agradece que no te cambie de por vida, es solo hasta que... Estés listo. 

𝐂𝐨𝐧𝐭𝐢𝐧𝐮𝐚𝐫𝐚.... 

Poco a poco explicaré el motivo del cambio corporal, sabiendo que ellos dos no son el único caso 😅

Gracias por leer! ✨👌