Dan llegó al Penthouse, silencioso, oscuro y vacío.
Dejó las cosas en la cocina, buscando acomodarlas y luego ir con Jaekyung, quien se encontraba durmiendo plácida o cansadamente en el sillón.
Se acercó al pelinegro, quien abrazado una almohada respiraba lentamente y algo de saliva salía por la comisura de sus labios.
Dan dudó por un momento, pero vio preferible llevar al menor a la habitación que tenía, para que pueda descansar mejor.
Al cargarlo, pudo tocar su cuerpo ahora frágil, débil y delgado, pero eso no le importaba sino la temperatura tan caliente que este mostraba, haciéndolo preocupar.
Tocó su frente, que se encontraba ardiendo y llamó al médico que siempre los atendía, eso parecía más que una simple fiebre.
(...)
El médico llegó rápido, buscando atender al menor con los medicamentos que había llevado y tenía a disposición.
El pelinegro no se separó ni un segundo de él, mostrándose atento ante dicha situación.
-—Dígame, ¿qué pasó? -—preguntó con duda Dan, cuando Jaekyung estaba estable.
El médico, que era mayor que él, suspiro un poco y luego tomó valor para hablar.
—-¿Ustedes tuvieron una pelea reciente? —-preguntó el peliblanco.
Dan, asintió tanto avergonzado como sorprendido, no pensaba que algo así afectaría de manera tan grave la salud del menor.
-—Verá, las discusiones afectan psicológicamente a un omega embarazado -—mencionó el médico haciendo una pausa -—Y en esa situación, las feromonas de su pareja, lo desestabilizan.
Usted, tiene que controlar su carácter explosivo frente a Dan, eso pone en riesgo su vida.El pelinegro, observó el cuerpo que yacia en la cama, tocando su mano con delicadeza y un poco de arrepentimiento.
Él claramente podía controlar sus emociones, pero respecto a sus feromonas, no era tan sencillo.
--Entiendo, disculpe --susurro el menor --¿Qué más debería saber o evitar?
El médico hizo una pausa, pensando en que podría decir, además anoto en una hoja algunas cosas que el pelinegro no pudo leer.
--Tiene que tomar estos suplementos --mencionó el peliblanco entregándole ese papel --Además, hay un tema importante que debo decirle.
Dan asintió, escuchando con atención y agarrando dicha hoja que se le había entregado.
—Hay libros de cómo tratar con un omega en ese estado —mencionó el médico —Usted, debería leerlos.
Pero hay un tema que no suele hablarse, y es el deseo sexual.Dan se sonrojo inmediatamente, prestando atención, pues nunca antes le habló del tema tan abiertamente.
-—Los alfas disminuyen su deseo sexual para "proteger" a sus omegas -—continuó el médico -—Pero si el Omega siente que su alfa esta alejado, puede soltar más y más dulces feromonas que antes, para obtener las feromonas del alfa.
Dan formo un "O" con su boca, realmente sorprendido de la situación.
—-Ahora, es recomendable que ambos tengan sexo al menos una vez por semana —-dijo Hakase —-Pero, debe ser sexo vainilla.
Nuevamente la mirada se Dan cambió, a una completamente avergonzada, sintiendo como sus mejillas calentarse y tornarse más rojas que antes.
—-¿Cuanto tiempo? ¿Nosotros debemos, ya sabe? —-pregunto con duda el menor
El médico lo pensó con un poco de detenimiento, realmente recién estaba en el segundo mes de su embarazo... Así que...
—- Hasta el sexto mes —-dijo con tranquilidad el pelo blanco —-De ahí, será cuando su Omega le pida. Aunque no veo ningún problema para usted, ¿Verdad?
El pelicastaño asintió tímidamente, con su corazón palpitando rápidamente.
—-Y uhh... —-suspiro el pelinegro —- ¿Qué pasa si el Omega no quiere tener relaciones?
El médico lo miró completamente confundido ante esa pregunta, al verlo, "Jaekyung" parecía una persona completamente distinta.
—- Él va a querer —-susurro el mayor —-Es algo propio de su cuerpo, digamos que se nublará por el deseo.
El menor sintió un pequeño escalofrío ante esa afirmación, miró de reojo al menor quién se encontraba durmiendo y asintió al médico, despidiéndose del profesional.
(...)
Jaekyung se levantó levemente, definitivamente quería un buen trago de licor. Aunque no acostumbraba tomar, en esa situación realmente era necesario.
Se dirigió hacia su bar, dispuesto a tomar un buen whisky.
—-Que bueno, ya estás despierto —-sonrió Dan al verlo bajar —-Estaba preocupado, ¿deseas algo?
El menor simplemente lo ignoró, pasando de largo hacia dónde quería ir. Y, no planeaba hablarle por al menos 1 mes.
—-Joo Jaekyung —-suspiro el pelinegro —-No puedes tomar nada de licor, ni fumar.
El pelicastaño apretó con fuerza su botella, odiaba que alguien le limitara en sus decisiones.
-—¡No me jodas Kim Dan! —-le grito al mayor —-No puedo hacer nada, estoy harto, simplemente no te haré caso.
Dan busco acercarse al menor, manteniendo la calma, el médico mismo se lo había dicho. Además, su personalidad era pacífica.
—-Por favor, es por el bien del bebé —-susurro el mayor —-Es más, ¿no quieres algo más? Te puedo preparar una ensalada de frutas, waffles, pancakes, solo dime.
El menor negó con más furia, ¿por qué se comportaba de esa manera?
Hace unas horas, le había gritado y ahora simplemente "Ti pripiri ilgi"Agarro con fuerza el vaso que tenía, para luego lanzarlo en dirección del pelinegro, este cayendo cerca a su mejilla y cortandolo levemente.
-—Auch —-susurro con algo de dolor el mayor —-Eh, ¿te sientes mejor?
Distinto a lo que pensaría el menor, Dan no se enfado y le restó importancia a esa pequeña pero dolorosa herida que tenía.
Jaekyung sonrió ante esa respuesta, ese era el Dan que debía estar a su lado, sumiso, obediente, dócil.
Oh, también le gustaba golpearlo y molestarlo. Definitivamente aprovecharía ahora que el mayor se veía más apacible.
Pero algo cambió dentro de él al pronto sentirse sonrojado y un calor que conocía muy bien, se presenta en todo su cuerpo. Haciendo que una leve corriente eléctrica, recorriera absolutamente todo su ser.
—¿Jaekyung?
Continuará....
¡Hola! Quería comentarles que acabo de publicar una historia de Heesung con Yoon-Gu (papita) por si se animan a leerla 💕
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Intercambio Corporal |Omegaverse| [JINX]
Fiksi Penggemar-Kim Dan, usted está embarazado. Las palabras de dicho doctor solo lograron derrumbarlo. Sabía firmemente que Jaekyung no lo trataría bien, ni se apiadaría de él. Pero un día todo cambio, la suerte vino de su lado. Despertó en un cuerpo que no era...