El inicio del horror

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Me sentía tan confundida, ¡mi mamá había estado en la cárcel! Había ayudado a un criminal a escapar de la cárcel, pero ¿Por qué lo había hecho? Muchas cosas adquirieron sentido, mas había otras demasiado confusas.

- ¿Khalleygh? – me llamó Preacher - ¿Pasa algo? –

- Mi mamá- respondí con perplejidad.

Preacher me miró desconcertado y trató de preguntarme algo más, pero le explique antes de que pudiera decir algo:

- Jhearym Velarde es mi mamá-

- ¿Qué? – dijo él, estupefacto.

Por unos segundos ambos nos quedamos callados, mientras nos mirábamos con estupefacción.

- ¿Tú lo sabías? – preguntó, aún estupefacto.

- Si lo hubiera sabido no estaría sorprendida ¿No crees? -

- Entonces tu mamá ayudó a Anibal a escapar de la cárcel – dijo, como si no lo creyera.

- Sí, pero no entiendo ¿Por qué? –

- Tal vez tuvo sus razones –

- No creo que haya tenido malas intenciones ¿Cierto? –

Preacher suspiró.

- No lo sé, pero si ella investigó todo lo que pasó y salvó a los estudiantes secuestrados, debe ser una buena persona-

Aunque trataba de convencerme de que era así, las dudas invadieron mi mente y ya no sabía qué creer.

- ¿Le advertiremos a la policía? – preguntó Preacher.

- No, solo mantengámoslo vigilado por si hace algo sospechoso-

Preacher asintió.

Luego nos dedicamos a comer. Nadie dijo nada, yo estaba pensando en lo que habíamos descubierto. Mi mamá me había guardado ese secreto por tanto tiempo y no entendía muy bien el porqué ¿Había sido para protegerme como ella siempre decía?

- Khalleygh, creo que estás en peligro- dijo Preacher, rompiendo el silencio.

Se veía bastante sorprendido, incluso asustado, como si lo que acababa de decir era algo que él no se esperaba.

- ¿Por qué lo dices? – pregunté desconcertada.

No entendía por qué creía eso.

- ¿Acaso no lo entiendes? Sara escapó de la cárcel y Anibal está aquí, en el campamento donde está la hija de la chica que los delató- objetó.

Recordé que Camila había dicho lo mismo.

- ¡Quieren venganza! Y que mejor manera de vengarse de tu mamá que lastimándote-

Preacher tenía razón, ellos podían estar planeando vengarse, todo indicaba eso.

- Tenemos que hablar con la policía-

- Preacher, no tenemos mucho tiempo, Khloe y Sabrina desaparecieron hace 2 días y debemos encontrarlas-

- No podemos arriesgarnos a que te pase algo- dijo con preocupación.

- Aprecio que te preocupes por mí, pero mis amigas son primero y no me lo perdonaré si algo malo llega a pasarles-

- ¡Tu vida es más importante que cualquier otra cosa en el mundo! –

Por un momento me quedé sin palabras, Preacher estaba preocupado por mí, yo en verdad le importaba y la forma en la que lo había dicho sonó tan... real. Él era como un enigma, nos acabábamos de conocer y estaba prácticamente arriesgando su vida por mí.

Dulce venganza #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora