Todo es sobre ti

13) Fingir ser gay es difícil, Derek lo sabe

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13) Fingir ser gay es difícil, Derek lo sabe

Derek:

Me desperté a causa de personas que reían sonoramente. No se trataba de nadie que estuviese en mi habitación, pero se sentía como tal. Si tuviese que comparar esas risas con algo sería con el sonido que hacen las focas, lo tenía muy claro.

Entrecerrando los ojos para que la luz de la pantalla molestara menos, miré la hora en mi teléfono móvil. Era casi mediodía. Entonces recordé apagar la alarma cuando sonó, aunque no salí de la cama. Me senté en la cama haciendo estiramientos en medio de un gran bostezo. Levantarme de la cama se sentía como dejar un pedazo de mí atrás.

Lo hice con más prisa porque las risas no paraban, y yo quería saber que era tan gracioso.

Me encontré con Mack y Alexa sentadas en el suelo del salón con un montón de cosas a su alrededor que no tenía muy claro qué o para qué eran. Solo me fijé en las copas y la botella de vino en el centro del círculo que habían formado. Voltearon a mirarme y nos mantuvimos mirándonos por unos minutos.

Yo aún somnoliento y asimilando que estaba vivo, ellas con una expresión rara. Pararon de mirarme a mí, se miraron entre ellas y devolvieron su vista a mi persona, pero no exactamente a mi rostro.

—Derek, tu... —empezó a decir Alexa cortándose para mirar al techo. Le palmeó el hombro a Mack —. ¡Para de mirar y díselo!

—Ay, Dios, no puedo —La rubia también desvió su mirada a otro sitio.

— ¿Qué pasa? —pregunté extrañado.

—Que tienes la...

—Que tu cosa...

— ¡Que tu miembro está reclamando atención o algo! —espetó Alexa y sentí como me bajaba la presión a la vez que yo descendía mi vista hasta mi entrepierna.

—Joder.

De una me espabilé y corrí al baño. Cerré la puerta detrás de mí y murmuré unas maldiciones.

Despertar con erección.

Era usual que me sucediera esto, para no decir que era algo diario. Sin embargo, lo pasaba por alto porque al levantarme iba directo al baño y al salir ya se me había pasado. Pero hoy no. Hoy decidí que era más importante saber de que reían en el salón y olvidé esto.

Espero que no lo interpretaran como que yo era un enfermo sexual o algo similar.

Me bajé los pantalones y procedí a orinar indispuesto a salir del baño, pero debía hacerlo. Pero antes me dije algunas cosas a mi mismo al espejo.

—Ellas piensan que eres gay. No pasa nada ¿Vale? —le dije a mi reflejo —. ¿Por qué pensarían que estabas excitado? Porque parecía que habías montado una tienda de campaña en tu entrepierna, quizás. Pero no pasa nada... Y de tamaño no estás nada mal, no hay de que avergonzarse.

Me mantuve observándome a los ojos en el espejo en silencio.

—A veces dices unas estupideces, Derek. De verdad.

Bufé y, decepcionado de mi mismo, salí del baño haciendo como si no hubiese sucedido nada antes. Las chicas parecían haber pasado aquello por alto. Como siempre, en nuestra cabeza las cosas se perciben más grandes de lo que en realidad son.

—Todavía no es ni medio día —comenté para romper el silencio.

—Vale —asintió Mack pintando sus uñas con concentración —. ¿Y nos informas eso por?