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Ricky miraba con extrañeza los dos pedazos de papel que tenía en la mano

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Ricky miraba con extrañeza los dos pedazos de papel que tenía en la mano.

“¿Es encerio?”

— Gyuvin, ¿Qué es esto? — cuestionó mientras leía nuevamente lo que estaba escrito en ambos papeles.

Divorcio.

Custodia.

— Es nuestro divorcio Hyung — respondió — y el otro es la custodia de Gyepi.

Ricky miro extrañado a Taerae y Gunwook, quienes se encontraban presenciando la escena cómodamente sentados en el sofá mientras comían palomitas.

— Mi hermano dice que me fuiste infiel, Hyung — comento el menor mientras se llevaba una gran porción de palomitas a su boca.

— Gunwook — lloriqueo el joven profesor en busca de una respuesta clara.

El pelinegro rió y dejo de comer por un momento.

— Está celoso por lo que pasó en la cafetería de la escuela.

— ¿La profesora de ingl-

— ¡Ni la mencioné! — le interrumpió su novio — ¡De ahora en adelante será mi profesora menos preferida!

Gunwook lo miro con una ceja levantada — nunca fue su profesora favorita — aclaro.

— No te pregunté, Gunwookie — dijo con una sonrisa sarcástica.

— Y yo no te lo dije a ti, Vinnie — hablo Gunwook con la misma sonrisa que el mayor.

Una risilla se le escapó a Taerae y a Ricky, quien se calló rápidamente al ver la mirada asesina de su novio encima suyo.

— Eh... B-bueno — carraspeó.

El pelinegro gruño cruzándose de brazos y mirando a su novio de manera sería.

— ¿Si te doy un abrazo me perdonas? — pregunto el mayor con inocencia.

Gyuvin no negó y tampoco accedió, solo hizo un tierno piquito con sus labios, indicando que quería un beso.

Ricky rió enternecido y se acercó a su tierno novio dejando un amoroso beso sobre sus labios.

— ¿Eso quiere decir que ya me perdonaste?

Gyuvin sonrió mientras enrollaba sus brazos alrededor del cuello del mayor y lo atrajo nuevamente a el para besarlo.

— Eso quiere decir que lo pensaré — dijo y Ricky lo miro con un puchero.

Se separó de su novio, volteo su mirada hacia su hermano y mejor amigo.

— Ahora, ¡¿Vemos una película?!

— ¡Si! — respondió en unisono la pareja.

“Ese es mi amado bipolar”

“Ese es mi amado bipolar”

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Por eso uso la calculadora (Ryuvin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora