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El silencio repentino puso de nervios a Gunwook, quien solo pasaba su vista se Yoona a Taerae y viceversa

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El silencio repentino puso de nervios a Gunwook, quien solo pasaba su vista se Yoona a Taerae y viceversa.

— Eh, ¿Puedo saber quién eres tu, niño? — cuestionó la rubia, mirando de arriba a abajo al menor con una ceja levantada.

“Uhh, esto se pondrá feo.”

— Disculpa, ¿Me acabas de llamar niño? — pregunto Taerae recibiendo un asentamiento por parte de la mayor. El rió sin gracia alguna.

— T-taerae...

— Escucha, niño — hablo la rubia — estoy teniendo una conversación muy importante con mi novio — el pelinegro mayor negó frenéticamente mirando a Taerae — así que te pediré que te retires. Gracias.

“¿Cuál de los terminará peor? ¿Yuna o yo?”

[•••]

— ¡Taerae, ya suéltala! — grito nuevamente Ricky en un intento de separar a su pequeño cuñado de una de sus alumnas.

Pero parecía que este no la quería soltar por más que el mayor lo jalaba de la cintura.

— ¡Maldita, el es mi novio, no lo vuelvas a besar delante mío! — gritó enojado el menor mientras tomaba los cabellos de la rubia con fuerza.

Uy, pero claro que Yoona no se quedaba atrás.

— ¡No por mucho, Gunwook y yo tenemos historia! — grito la rubia mientras jalaba de los cabellos castaños del menor.

Por un lado teníamos a Gunwook, rezando porque después de Yoona no siguiera el, por el otro, teníamos a Ricky tratando de separar a los menores y por último teníamos a Gyuvin, quien estaba grabando la pelea mientras apoyaba a su pequeño hermano.

— ¡Vamos, Rae! — apoyo el pelinegro.

— ¡Gyuvin! — le reprocharon su pareja y mejor amigo.

“¡Yoona se lo busco!”

“¡Yoona se lo busco!”

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Por eso uso la calculadora (Ryuvin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora