Padres adoptivos

Capítulo 25

La continuación de la vida

Asuma había muerto.
Sin importar la cercanía que habían desarrollado a lo largo de los años y el inicio de su relación, Naruto no había sido capaz de obtener alguna emoción por parte de Shikamaru, pero el padre del Nara lo logró, durante el tiempo de duelo Naruto se vió obligado a seguir entrenando con la idea de ser más fuerte para así evitar futuras pérdidas y mientras tanto Shikamaru decidió algo.

-Bueno, ya se han ido, no tenemos más opción -declara con cierto enfado - ¿Por qué no me dijo nada?

-A mi tampoco me dijo absolutamente nada, así que... -exhala un suspiro encogiéndose de hombros -yo también estoy enojado.

Gritando al cielo se gira para mirar a su compañera de equipo - ¿Veinticuatro horas?

-Eso dijo Lady Tsunade.

-Bueno... ¡A por ello!

[Después de la misión]

-Luego hablaremos de esto, padre.

Kakashi sonríe nervioso al verlo señalarlo con tal intensidad, pero lo primero que hace Naruto desde el inicio es dirigirse hacia Shikamaru.

-Yo si tengo tiempo para que hablemos de ésto -expone llegando a su lado.

-Bueno... Yo pensaba en ir a ver a Iruka antes de nada.

-Podemos ir juntos, no tengo misión ni asuntos que resolver.

Desganado seguía adelante observando como a su lado su hijo le seguía el paso con la calma de quién te encamina a la horca, pero lo aceptaba, había hecho aquello por dos razones muy justas.

Al llegar a una banca Shikamaru tomó asiento sin cuidado alguno para exhalar profundamente al aire, Naruto tomó asiento a su lado, por suerte se le asignó acompañarlos en la misión y pudieron llegar a tiempo para ser de ayuda y entretener a uno de los Akatsuki mientras el equipo diez se encargaba del que había acabado con la vida de su maestro.

- ¿Cómo te sientes?

-No mejor, pero... Diferente. -observa los ojos azules a su lado -Lamento haberme comportado como un tremendo idiota, no merecías eso.

-Es comprensible, la situación... Es comprensible, yo también me hubiera comportado como un tremendo idiota si alguno de mis padres... -baja la mirada y voz -Asuma era como tú padre, me hablabas mucho de él, y así percibí que lo veías, no era solo un mentor aunque digas lo contrario.

-No lo era... Gracias por entender. Sabes Naruto... -baja la mirada -Kurenai se encuentra embarazada.

- ¿De verdad? ¡Vaya, eso es genial!

-Sí, pienso lo mismo... -sonríe tomándole la mano -ya he llorado lo suficiente por su perdida, es hora de seguir adelante. Antes de marcharse Asuma me dejó una enseñanza muy buena, así que estoy listo para seguir sus palabras.

- ¿Y eso que significa?

-Que me volveré un ninja útil para proteger a quienes lo necesiten.

Naruto sonríe pero antes de permitirle decir nada Shikamaru se acerca a sus labios robando un beso antes de marcharse con la calma embargando sus sentidos.

Al llegar a su casa los nervios y el enfado habían abandonado su cuerpo, su rostro se encontraba embargado de felicidad, se adentró a la cocina tomando el sitio libre sin mirar a ninguno de los hombres en la mesa, Iruka apagó la estufa avanzando hasta su hijo mayor para tocarle el hombro, Sasuke le siguió sin dudarlo.

- ¿Por qué luces tan feliz?

-Oh... -toca sus mejillas - ¿Luzco así? -ríe -Bueno, es que... ¿Cómo decirlo? -cubre su boca -Bese a Shikamaru.