Problemático uno
— ¡Me niego! ¡Es un tipo altamente inestable! ¡Tuvimos que perseguirlo para que no se largará y le diera la espalda a nuestra villa! ¿Con que cara enfrentará un clan
—No es tu decisión. —exclama la menor.
—No quiero casarme. Eso no se encuentra a discusión.
Los tres Hyuga en la mesa se observaron desafiantes, aunque Hanabi se encontraba del lado de su hermana mayor la verdad era que el joven con el que su hermana parecía tener una relación de algún tipo no parecía gustarle. Neji bufó en una negativa enfadada.
—Solo basta que lo hables con tu padre para que comprendas que no hay forma de...
—Ya lo he hecho, y déjame decirte que no se encuentra enfadado ante mi petición de anular las citas de compromiso.
— ¿Qué?
Hiashi caminaba con la templanza bañando su rostro mientras cruzaba el patio de la casa Hatake dando únicamente dos toques a la puerta, del interior se escuchaban risas animadas y ante él se presentó el joven rubio con las mejillas coloradas de la diversión y una amplía sonrisa en cara, Naruto se irguió al segundo.
—Señor Hiashi ¿Que lo trae por acá?
—Quisiera hablar con tus padres.
—Oh... —vuelve la vista al interior —Deme un segundo —sonríe hacia el hombre y acomoda unas pantuflas en el suelo —por favor, pase.
Hiashi asiente y el rubio sale corriendo al segundo para dar aviso entre susurros a sus padres que sorprendidos por tal visita solo los hacen ayudar a levantar los juegos de mesa que los mantenían entretenidos. Hiashi muestra una tenue sonrisa al observar a la familia correr en busca de organizar la sala, es Iruka quién hace frente con una reverencia de cabeza.
—Disculpe el desorden, pasamos un momento en familia cada tanto y... —ríe señalando la estancia —todo se vuelve un desorden. ¿Quiere... Quizá té o agua? ¿Algo más dulce?
—Un té sería perfecto.
— ¿A qué debemos su visita? —cuestiona el Hatake guiando su camino al sofa más grande ya colocado en su sitio — ¿Tiene alguna misión para nosotros o es por la reciente misión de Sasuke con su familia?
Hiashi observa los alrededores, la pequeña sala conectada a la cocina que únicamente se separaba por una pared con marco abierto, al hombre de melena castaña que servía el té dándoles la espalda aunque parecía prestar atención a la conversación y a los dos chicos en el pasillo de la entrada que se encontraban tras la pared atentos a la visita.
— ¿Nuestro hijo cometió algún error?
—Espero que no. —expone calmadamente recibiendo la taza de té —Neji no me comentó nada de eso.
—Entonces... —comenta Iruka tomando asiento al lado de su pareja — ¿A qué debemos su visita?
Sonríe — ¿Podrían sacar a sus hijos de casa?
Sus miradas se encuentran con cierta duda, pero finalmente Iruka se pone en pie y se dirige al pasillo tomando a sus hijos por los hombros entre el darles instrucciones y advertencias, ambos chicos se colocan sus zapatos y salen con la duda e incomodidad en cara, Naruto es el primero en cuestionarle a su hermano sobre lo que pudo haber hecho para que la visita los sacará de su propia casa. Iruka regresa exhalando un suspiro y toma asiento junto a su pareja observando como el hombre Hyuga toma tranquilamente su té hasta bajar la taza sobre su regazo.
ESTÁS LEYENDO
Padres adoptivos
FanfictionLuego de la guerra de Konoha ocurrieron muchas cosas, hubieron perdidas lamentables y sucesos inevitables, huérfanos alrededor de todo el mundo ninja y desprecio por montón... inseguridad, pero entre todo eso todavía había gente buena, personas que...