Ya a la chingada, me acabe el libro ¿Qué más quieren saber? No creo que entiendan si no han visto el primer libro y mucho menos si no han estado en el rolplay.
pero bueno, personajes traumados que intentan superar sus traumas pero mueren la mitad y...
— ¡Sunny! ¡Emily! Bajen ya si quieren comer —Era una mujer la que hablaba mientras dejaba en la mesa un plato de comida— Tamari se lo comera todo si no vienen~
—Su contrario ladeo la cabeza, con confusión— Gloria, no como tanto —Bufo aunque resivio un beso en el cachete—.
— ¡Nos piden bajar y se andan besando! —Fue la voz de la hija mayor la que resonó con violencia en la habitación aunque al instante todos rieron—.
— ¡Solo fue el cachete! No es para tanto Emi —Sonrio mientras veía como la menor de todos se sentaba— Sunny siempre tan tranquila, a veces pienso que le incómoda su familia tan bulliciosa.
—La susodicha negaba demasiado rápido, mientras se servía un poco de pasta— No me molesta.
— ¿En serio es su hija biológica? —Cuestiono Emily, mientras empezaba a comer— ¡No sé parece nada a ustedes!
— ¡Oh! ¿Acaso no ves que tiene los cabellos dorados de su padre? —Empezo a reír, mientras veía como su hija se avergonzaba—.
— ¡Pero en personalidad no! —Refuto aunque Tamari empezó a hablar—
— Mejor, ¿para que quieres una mini Gloria o un mini Takehiro?
Y toda la familia se hecho a reír, como la familia feliz que eran, como disfrutan aquellas fiestas tan coloridas, porque a pesar de todo, se querían y cada momento junto es un rayo de sol para ellos.
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Ya eres un Sakura
— si no quieres celebrar esta bien Amber, no debes de sentirte presionada —Aquel padre se encontraba sentado en la cama de su segunda hija mayor, aunque está tenía una sonrisa algo nerviosa—
— si no lo afronto, seguiré huyendo... Y... Hay que seguir —Miraba al piso, hasta que sintió los brazos de su padre dándole un cálido abrazo que solo el sabía dar—.
— Estoy tan orgulloso de ti, ¿Ya te lo había dicho?
Y aunque su padre se los digiera a diario, aún era la misma sensación que cuando se lo dijo por primera vez, una pequeña esperanza por pensar que alguien tenía fe en ella.
Se levantó, y los dos bajaron las escaleras, dónde se podía ver lo que sería una comida normal en la familia.
Caroline estaba moviendo su silla de un lado a otro, como si estuviera esperando a alguien o algo.
Aki con el cubrebocas en la mesa, mientras comía lo más rápido posible, aunque sabía que ahí no se le juzgaria por sus cicatrices.
Natsuki estaba hablando con aquella que era su madre, hablándole de lo feliz que ha estado sin una recaída.
Seiko escuchaba a Natsuki con atención pero también le daba una advertencia a Aki que dejara de comer tan rápido pues podría ahogarse.
Hisoka, riéndose de como Aki efectivamente se estaba ahogando, aunque le daba palmadas en la espalda.
Solo faltaban ellos dos, probablemente Amber solo se limitaría a escuchar con una sonrisa todo lo que dirían los parlachines de su familia y Koro contaría las anécdotas más raras o una historia navideña por la época.
Los recuerdos son malos, pero debía de dejar eso atrás y concentrarse en el presente, en la bella familia que le había dado la vida y no la que le fue arrebata.
Porque después de todo, ella ya era una "Sakura".
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Ishibashi y Evergarden
Parecía ser una época fría, aunque era obvio pues era navidad, se podría ver a dos chicos de una cabellera roja y naranja tocando la puerta.
— No fuman, no toman, no se pelean, no son "Isibashi" en resumen, no te preocupes, son algo mal hablados pero muy dulces, y si te sientes inseguro puedes ir con la linda de Sunny —Estaba sonriendo pero el contrario negó avergonzado—.
— Yashuniro, sunny tiene cinco años ¡soy mucho mayor! —Alzo la voz pero la mano de su hermano en su cabeza lo hizo sentir más rojo—.
— Para mi siempre seras un bebo, Kenzo, pero tranquilo está familia no es tan mala como la nuestra —Fijo sus ojos en los de su hermano menor, el cual tenía miedo—
— ¿Me lo juras? —Titubeo—
— te lo juro —Afirmo—
Y en eso fueron resividos por una mujer en su tan característico vestido rojo, y que curiosamente para los hermanos ishibashi sería tan cotidiano decir su nombre con el cariño de una madre.
— ¡Le tome la palabra Taiga-san! He venido a pasar navidad con ustedes —Tomo del hombro a Kenzo, el cual tenía la cabeza baja— ¡Es el pequeño del que tanto les hablo!
— Oh, ¿Kenzo-kun? —Al ver cómo asintió miro al mayor— Pensé que trairias a tu novio.
— Lo pense, pero está haciendo turnos en el hospital, ya saben cómo son —Al pronunciar esto ya estaban dentro de la casa— ¿Akira?
— Intentando hacer que Naiko y Shin se coman la comida —Y al escuchar un estruendo alzó la voz— ¡NIÑATOS YA LLEGARON!
—Al escuchar esos una niña de unos cinco años salió corriendo hacia Yashuniro y lo abrazo— ¡YASHUNIRO-SAN! Pensé que no vendría.
— ¿Y decepcionar a esta dulcura? ¡Jamás! —Rio, y sonrió más grande al ver cómo su hermano menor estaba un poco feliz y más al ver cómo Akira salía de la cosina luciendo agotado—
— ¡Akira-San! —Fue corriendo hacia el mayor, el cual lo abrazo— Me alegro verlo.
— Kenzo-kun, no ha cambiado nada —Rio mientras veía como el menor se avergonzaba— Vamos, no estés así, eres tierno.
Sin más la cena empezó con normalidad hablando trivialidades, como si en verdad fueran familia y en verdad con el pasar de los añosz la relación de los Ishibashi y Evergarden era algo que duraría para siempre.
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No pensé que podría hacer un especial pero esto salió en lo que se hacía la comida (Justo vamos a comer)
Me ando muriendo de frio, mis tíos ya andan tomando y fumand
Pero bueno, felices fiestas! Se les quiere familia
