Solo tú [Ohmnanon]

Final.

✨️Nanon.✨️

Meena ya está durmiendo, pero yo no puedo parar de mirar mi teléfono.

Aunque quiera fingir que está todo bien, siempre estoy pensando en qué está haciendo Ohm.

Me prometió terminar todo hoy, pero no ha regresado.

Me apoyo en el sillón de la sala y miro el reloj.

Ya debería dormir también.

Mi corazón se acelera cuando la pantalla se enciende, y veo el nombre de Dew en las notificaciones.

No es lo que estaba esperando.

Quiere saber si sigo despierto, realmente creo que él es lindo.

Quizás, si Ohm no me tuviera, podríamos salir más.

Muchas veces en mi vida pensé en lo bien que me haría soltar mi pasado, pero no quiero.

Levanto la mirada, porque la puerta suena.

Bloqueo la pantalla sin responder.

Me acerco nervioso, porque quiero que sea Ohm, y respiro por fin al verlo.

—¿Viste la hora? —le pregunto girando y él agarra mi cintura.

Lo miro confundido, y me besa.

Cierra la puerta y me apoya contra ella, mientras organizo mis ideas.

Poner claras las cosas, con la ropa puesta.

No es tan complicado.

—Ohm —le digo colocando una mano en su pecho— ¿Hablaste con él?

—Sí —responde metiendo las manos debajo de mi pijama, y yo las detengo con las mías.

—¿Y qué pasó?

—Te-Terminé co-con él —dice acariciándome.

Bueno, ya podemos desnudarnos, ¿no?

—No e-existe un be-bebé.

—¿Qué?

—Él esta-taba mi-mintiéndome —me cuenta ya sonriendo.

—¿Te estaba mintiendo?

—No pu-puedo e-enojarme, po-porque e-estoy muy fe-feliz.

Nos alejamos de golpe, porque la luz del pasillo se prende.

—¿Nos mintió a todos? —pregunta Chimon apareciendo con una manta encima y se acerca a la cafetera, con una taza— ¿Cómo te enteraste?

¿Por qué siempre tiene que estar escuchando?

Bueno, también quiero saber.

—Qui-Quiso pa-pagarle a un do-doctor pa-para que me ha-haga cre-creer que si te-tenía un be-bebé.

—Es una horrible persona —le responde moviendo la cabeza negativamente— por eso siempre mantuve una distancia prudente de él.

Agarra su café ofendido y regresa a su habitación dejándonos ahí.

—Si que-queremos pri-privacidad no pu-pueden se-seguir vi-viviendo acá —me dice Ohm y yo alzo los hombros.

—No tenemos una casa.

—¿Va-Vamos a co-comprar u-una?

—¿Por qué? —le pregunto— ¿Quieres vivir conmigo?

—Te-Tenemos que ha-hacerlo, e-eres mi O-Omega.

Hago un puchero, porque deseaba tanto esto.

—¿Y vamos a cuidar a Meena, y ser felices por fin?

Sonrío, porque asiente agarrando mi rostro.

Jala mi labio inferior con sus labios y me besa despacio, arreglando mi cabello.

—Te a-amo —dice apoyando su frente en la mía.