No Lie In His Fire

Capítulo 12

- No quiero decírselo, alfa.

- Yo voy a estar contigo.

- Aun así, no quiero, no puedo...

Liam atrapó Zayn por la cintura, antes de que siguiera moviéndose frenéticamente por la habitación. Con cuidado, lo sentó sobre sus piernas y lo abrazó a su cuerpo, luchando por contener el rush de ansiedad de su omega. Lo sentía en el pecho, como si fuera suyo. Apretó con más fuerza a Zayn, que seguía intentando zafarse y empujarlo. Las lágrimas le mojaban el rostro y respiraba agitadamente. "Tranquilo, omega, shhhhh" susurró bajito, pasando la lengua una y otra vez por su cuello, dándole pequeñas mordidas, intentando calmarlo con su aroma, acariciándole la espalda. Unos segundos después, se relajó contra él, suspirando quedamente. Después de casi tres años juntos, había aprendido que tenía que ser muy observador y actuar rápido, para que un ataque pequeño como este, no terminara en algo mucho más grave.

Sin embargo, sin importar qué tan grave fuera la crisis, el omega que solía ser autónomo, testarudo y combativo, se convertía en un alguien suave y dócil, de quien no podía separarse por varias horas. A pesar de que la terapeuta de Zayn le había recomendado técnicas de respiración y ejercicios para evitar la disociación, seguir su instinto era siempre lo que funcionaba mejor. Mantenerlo presente tocándolo y marcándolo con su aroma evitaba, al menos la mayoría de las veces, que todo escalara más lejos. Cuando lograba parar la crisis, era más fácil que Zayn respondiera a cualquier otro estímulo.

¿Te parece si respiramos juntos, mi vida? - Sabía que su omega aun no hablaría, pero asintió levemente contra su hombro. - Muy bien, vamos a hacer cinco respiraciones lentas, ¿está bien?

...

Poco tiempo después de que empezaron a salir, hacía algunos años, Zayn le contó que a veces tenía crisis de ansiedad y trató de explicarle cómo eran, en caso de que alguna vez sucediera. Aunque investigó y leyó al respecto, ninguna teoría lo preparó lo suficiente para la primera vez que vio a su omega jadeando, mientras lloraba descontrolado, con la mirada perdida. Lo notó distraído, al principio, alargando los silencios entre las respuestas, desviando la mirada, como si estuviera recordando algo lejano. Pensó que sólo estaba estresado y cansado. Había entregado un proyecto que lo había tenido días durmiendo poco. Al subir al elevador, sus manos habían comenzado a temblar y su respiración se volvió errática. Aunque intentó que lo viera a los ojos y le respondiera, Zayn parecía completamente fuera de sí. Cuando lo vio escurrirse hacia el suelo, lo levantó en brazos y, por puro instinto, comenzó a lamer su cuello y a hablarle suave, diciéndole que no estaba solo, que estaba a salvo, que pronto pasaría. El elevador se detuvo y casi corrió por el pasillo, hasta llegar a la puerta de Louis. No tuvo que explicarle nada. Apenas vio a Zayn, lo apuró a entrar y sentarse en el sofá. "No lo sueltes" escuchó, antes de que el alfa desapareciera. Después, todo pasó demasiado rápido: Louis se puso en cuclillas frente a ambos y deslizó una de sus manos por debajo del suéter de Zayn, frotando un hielo sobre su estómago. Sintió al omega tensarse contra él, jadeando y volviendo un poco en sí. Un segundo después, gruñía molesto, sacando la mano de Louis a empujones y abrazándose al cuerpo de Liam, oliendo su cuello con desesperación. El alfa lo apretó más contra él, marcándolo con su aroma. Instintivamente, rugiendo bajo ante un peligro intangible del cual no podía proteger a su omega.

- Liam - Al levantar la mirada, se encontró a Louis con una expresión aliviada. - Ya pasó, él está bien. ¿Puedes quedarte a dormir?

- Sí, no voy a dejarlo solo. - Apenas pronunció la última palabra, se dio cuenta que estaba siendo innecesariamente posesivo, pero no podía controlarlo. Louis levantó las cejas, con un rastro de diversión y dio un paso atrás.

- Hey, todo está bien, te lo prometo. - Respondió con un tono suave. - No voy a tocarlo, ¿ok? Pueden quedarse en mi habitación, yo dormiré aquí.

- Gracias, Lou, disculpa.