No Lie In His Fire

Capítulo 43

Vio a Louis a lo lejos, buscándolo entre la gente con el ceño fruncido. Cuando sus miradas se encontraron, su gesto cambió por completo, regalándole una enorme sonrisa. Se sintieron incluso antes de tocarse: la emoción, los nervios, el profundo amor, todo haciéndole erupción en el pecho. Cuando estaban a unos metros, abrió los brazos, haciendo que Harry apresurara sus pasos hasta llegar a él. Louis lo envolvió en un abrazo, apretándolo contra su cuerpo como si lo necesitara, sin importarle estar en medio del mar de personas bajando del tren. Hacía mucho tiempo que había perdido la vergüenza de olfatear a su alfa, así que no se frenó de ocultar su rostro en la curva de su cuello, con la nariz pegada a su piel. Respiró hondo dos, tres, cuatro veces, entreabriendo los labios, sintiéndolo estremecerse cada que soltaba su aliento tibio. Casi podía sentir el sabor de Louis en su lengua.

- Dios, Harry, no tienes idea de cuántas ganas tenía de verte. - Murmuró muy cerca de su oído, erizándole la piel.

- Y yo a ti. - Respondió, intencionalmente rozando sus labios contra su cuello. - Te extrañé muchísimo.

Se quedaron en silencio unos segundos, intercambiando caricias sutiles mientras se miraban a los ojos, disfrutando la calidez que les derretía desde dentro y se expandía por todo su cuerpo. Se veía tan guapo, que no pudo evitar el sonrojarse. Llevaba una camiseta roja con un amplio cuello redondeado que dejaba ver sus clavículas y el inicio de las letras tatuadas en su pecho. Encima, lo cubría una chamarra negra que hacía contraste con la piel dorada de su cuello. El cabello le caía en la frente, despeinado y una pequeña sonrisa se formaba en su boca. Sólo podía mirarlo y tratar de convencerse de no besarlo, no debía besarlo, Louis le había pedido tiempo y tenía que ser paciente. Pronto hablarían.

- Te ves muy guapo, Lou. - Dijo, delineando suavemente su clavícula con la punta de los dedos.

- Tú te ves hermoso, eres hermoso. - Respondió, acomodando algunos rizos detrás de su oreja. - Me gusta mucho cómo se ve tu cabello, ¿lo vas a dejar crecer?

- Tal vez. - Le respondió, con el fuego calentándole las mejillas. - Podría dejarlo crecer y donarlo.

- Eso es muy lindo, Harry. - Murmuró, jalándolo de nuevo hacia él y dejando un beso en su frente. - Liam está esperándonos en el auto. Tenemos dos opciones: puede llevarnos a Nottin Hill y nos encontramos con ellos por la tarde o, si estás cansado, podemos ir a casa, desayunamos juntos, descansas y vamos a Nottin Hill después.

- ¿Podemos desayunar juntos y descansar? Tengo un poquitín de sueño, nada más. - Respondió, arrugando la nariz. Utilizó su dedo pulgar e índice para señalar lo poco que tenía de sueño, haciendo reír a Louis.

- ¿No dormiste bien? - Le preguntó, intentando descolgar la mochila de sus hombros.

- No mucho... yo puedo llevarla, Lou.

- Yo sé, eres un omega fuerte. - Dijo, fingiendo un rugido. - Pero quiero llevarla por ti,¿me dejas?

Le hizo una mueca, pero permitió que tomara la mochila y, después, que lo tomara de la cintura, guiándolo fuera de la estación. Le encantaba la familiaridad con que Louis lo tocaba, tan distinto a apenas unos meses atrás. Al llegar al auto, Louis insistió que se sentara en en lugar de enfrente. Liam lo recibió con una sonrisa y le dio un abrazo apresurado, antes de comenzar a manejar.

- Harry, ¿está bien por ti si desayunamos burritos? - Antes de que pudiera responder, Louis soltó una carcajada.

- Emmm, sí. Me gustan. ¿Por qué te ríes? - Preguntó a Louis, girando por encima de su hombro.

- Porque Liam está consintiendo a Zayn, ¿verdad, Li? - El alfa asintió, sonrojándose.

- ¿Y qué tiene de gracioso? - Insistió, confundido, notando que Liam se ponía incluso más rojo y miraba con el ceño fruncido a Louis a través del espejo.