Tú decides.

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Una semana después...

Sarah Thompson.

Desvíar a la prensa ha sido más difícil de los que creí. Papá fue a sacarme con sus guardias al hospital y el caos explotó. Intentamos salir por el estacionamiento pero en la entrada de él ya había un montón de personas esperando al acecho.

Los vidrios polarizados ayudaron un poco pero no fue barrera para aquellos que aventaron botellas, piedras y demás cosas capaces de las lastimar nos.

Sam y Sabri no comprendían absolutamente nada y solo se echaron a llorar mientras escuchan insultos hacia mi persona mientas que éramos atacadas.

Tom se quedó en el hospital con Bill. Creyó que era mejor que no lo vieran salir a él. Así no llamaríamos tanto la atención.

Las noticias no han parado de sonar día y noche con mi imágen en todas ellas.

"La arquitecta y escritora Sarah Thompson, reapareció en un hospital de los angeles luego de más de cinco años de supuesto fallecimiento"

Mis redes sociales se mantienen anónimas y no he recibido ningún tipo de hate por ellas. Tampoco a mi número personal y por ahora nadie sabe de mi paradero.

Papá me trajo a la colina nuevamente. Estos días han sido demasido angustiantes para mí. No hay señales de que Taison despierte y su carta la leo prácticamente que todos los días.

No poder hablar con él me desespera todavía más.

Tampoco he hablado mucho con Tom. No desde aquel encontronazo con Lexy.

Enserio quiero pensar algo bueno pero no puedo, no después de esa última mirada que pude presenciar, no después de saber que ella está enterada de lo que sucede en mi vida y peor todavía cuando es gracia a Tom que ella lo sabe.

¿Así de mal se sentía el cuando yo estuve con Ian siendo más joven?

¿Así de horrible eran los dolores de pecho por saber que... Que alguien más puede tener un espacio en su corazón?

Porque es una verdadera mierda.

¡Y no puedo hacer nada!

—Sarah— Patric hace presencia en mi habitación.

Tengo más de una hora con la laptop encendida en una página en blanco y no me sale nada para escribir.

—¿Sucede algo?— pregunto apartando el portátil. Estrujo mis ojos e intento embozar una sonrisa.

—Solo quería asegurarme de que estuvieras bien— su voz es suave y su mirada está llena de sentimiento de culpa.

—Lo estoy— musito.

Un incómodo silenció se forma entre nosotros y me veo en la necesidad de aclararme la garganta en un carraspeo.

Él reacciona y asiente. Hace amagos de retirarse pero no quiero que lo haga.

No sé por qué... Pero creo que solo es un impulso.

—Espera— digo y me levanto de la cama rápidamente.

Su mirada brilla con esperanza y se adentra a la habitación rápidamente.

I Just Wanted To Love You (Sarah Thompson) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora