Mi memoria 1/2

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Narrador Omnisciente.

Una hora más tarde de que le dieran un sedante a Sarah, Tom y Bill se dedicaron a buscar a las gemelas. El rubio pedía explicaciones una y otra vez pero el mayor siempre concluía con lo mismo.

"Estaba pagando y cuando me dí la vuelta ya no estaban"

Su hermano menor dudaba de su palabra, muy en el fondo sabía que se trataba de algo más. Ya que Tom no sería capaz de quitarle los ojos de encima a sus hijas ni siquiera en su propia casa a menos que esté con alguien más de confianza... Y ese es el problema. Debía estar con alguien más en quien él confiara como para perderlas de vista tan rápido.

Regresaron a toda prisa a la plaza donde se supone que estaba con sus hijas. Ambos miraban a su alrededor desesperados, fijando la mirada en cualquier niña de cabello negro que se cruzará en sus caminos. El problema aumento al paso de una hora más. No habían rastros de ellas y su última carta era ir con la policía para reportar desaparecidas a las dos pequeñas.

Samantha y Sabrina no están tan acostumbrada a una cuidad tan grande. La gran parte de sus cortas vidas las pasaron en la punta de una montaña donde solo tenían a su pequeña familia. La curiosidad puede ganarles y desaparecer será mucho más fácil de lo esperado. Son solo niñas, no tienen idea de dónde están paradas. Cualquier se puede aprovechar de eso.

—No me estás diciendo todo Tom— musita Bill por lo bajo.

Ambos se sentaron en una banca rendidos de la búsqueda. El mayor se mantiene cabizbajo pero sus músculos se tensan al oír a su gemelo. Bill enarca una ceja y se remueve para acomodarse. Preparando se para cualquier cosa que dispare su gemelo.

El castaño suspira agotado y vuelve la mirada hacia el frente. Sus ojos siguen los movimientos de los niños que brincan y juegan con sus padres de un lado a otro con enormes y relucientes sonrisas.

—Te estoy hablando— remarca la voz el rubio —Sea lo que sea que haya pasado necesito que me lo digas. No planeo juzgarte en este momento, solo quiero que encontremos a las niñas— su mayor lo miró de reojo por un momento para luego enderezar las espalda y darle la cara.

Echo todo un manojo de tristeza, rompió en un terrible llanto. Bill se apresuró para rodearlo con sus brazos y servirle de consuelo. Lo último que Tom quiere es perder a sus hijas. Después de todos esos años sufriendo por ellas y por Sarah, no quisiera perderlas de nuevo.

—Las lleve a comer helado— comienza sorbando su nariz —Vinimos a esta plaza luego de eso y fuimos a esa pequeña cafetería por un café— señala la mini tienda a unos pasos de ellos —Cuando estaba pagando yo...— silencio. Mucho silencio.

—Tú... ¿Qué?— insiste Bill serio.

—Me tope con Lexy en la fila— el rubio lo mira con atención y traga grueso. El mayor duda si seguir hablando pero luego de un ademán por parte de su gemelo continúa.

«Intentó decir algo pero al percatarse de la presencia de las niñas no tardó en acercarse para mirarlas de cerca. Yo me puse a la defensiva pero ella no parecía tener malas intenciones. Se presentó pero Sam y Sabri no se sintieron muy cómodas con su presencia. Lexy me aseguró que no tenía intenciones de arruinar nada y se ofreció para llevarlas a una de las mesas en la misma cafetería mientras yo pagaba. No les aparté la mirada ni un segundo si no cuando fuí a pagar. Ya cuando quise ir a dónde se encontraban ellas...

I Just Wanted To Love You (Sarah Thompson) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora