Capítulo 18: Vulnerable ante lo amable

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—¿Qué te tiene tan sonriente?

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—¿Qué te tiene tan sonriente?

Aparto la mirada de las hojas en mis manos para ver a mi madre de pie, recargada en la entrada de mi habitación. Al instante mi sonrisa se borra y la expresión de ella se vuelve incómoda.

Joder. Odio reaccionar de esta manera pero la mayoría del tiempo todo en lo que puedo pensar cuando la veo es en las veces que me falló.

Trago saliva y dejo el guion que Devony me dio el viernes sobre la mesita a mi lado. Me siento a orilla de la cama y observo como mi madre se acerca.

Se sienta junto a mí y me mira con una tensa sonrisa.

Hace unas horas que tía Sarah se fue y su visita nos hizo bien. No estamos para nada como antes pero necesitábamos que nos obligara a pasar tiempo juntos.

—Solo estudiaba —respondo, tallándome un ojo.

—Ya veo —suspira—. Sé que acordamos pasar el día juntos, pero surgió algo con uno de mis clientes. Estaré aquí para la cena.

—Está bien. Tu trabajo nunca ha sido el problema. —Suelto aquello antes de darme cuenta. Mamá se tensa y puedo ver la culpa en sus ojos.

Casi puedo leer sus pensamientos, sus recuerdos. Aquella vez que llegó tan ebria y yo me desmoroné en su regazo pidiéndole que parara y no me abandonara también.

Creo que fue la última vez que dejé que mis emociones me dominaran antes de obligarme a ponerme una armadura y un filtro que ayudará a no tomarme las cosas tan a pecho al momento, y a saborear el dolor y la decepción antes de poner en marcha mi imaginación.

—Cenar juntos siempre es genial, mamá —hablo, antes de que cualquiera de los dos puedo ofrecer disculpas.

Ella toma la mano que descansa sobre mi rodilla y me da un apretón.

—Bien, piensa en lo que te gustaría comer y envíame un mensaje para conseguir lo necesario.

—De acuerdo.

Se pone de pie y comienza a alejarse, deteniéndose un momento y echando una mirada sobre su hombro.

—Lo que sea que estabas leyendo —murmura dándole un vistazo a los papeles—, te hace bien. No te veía sonreír así desde hace un rato.

Se va antes de que pueda reaccionar de alguna manera. Alcanzo el guión y hojeo las paginas. Devony está cumpliendo su parte del trato y ha avanzado de manera asombrosamente rápida, sin pedir mi opinión.

Es una historia sin nombre todavía, sobre un grupo de amigos que hace un viaje improvisado por carretera, que resulta ser un desastre porque algunos de ellos no se llevan bien y hay varios inconvenientes en el camino.

Observo las correcciones que he hecho. Es la primera vez que leo en lo que ha estado trabajando el último mes y debo decir que es bueno. Está lleno de una comedia e irreverencia que nunca le he visto y que me hace querer conocerla mejor.

Las inquietudes del corazón ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora