Capítulo 19: Crisis

291 28 4
                                    

—Ponte las malditas rodilleras, Devony

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


—Ponte las malditas rodilleras, Devony.

Veo sobre el suelo del gimnasio las rodilleras que Gwen arroja y frunzo el ceño.

—¿Por qué estás tan de mal humor hoy? —cuestiono.

—Mejor ni le preguntes —dice Amy a mi lado ajustando sus rodilleras—, lleva toda la mañana refunfuñando.

Gwen resopla y se aleja llevándose la pelota de voleibol comenzando a rebotarla contra la pared.

Amy se levanta y se une a ella en la práctica. Ambas están en el equipo de voleibol de Paxton, la capitana se lesionó la semana pasada y han elegido a Gwen como su remplazo. Suspiro y empiezo a colocarme las rodilleras, le dije que no quería jugar pero aquí estoy de nuevo, accediendo a hacer lo que me pide.

Cuando me levanto para ir con el resto de las chicas la puerta que da al patio se abre y el equipo de baloncesto entra con su bulla de siempre.

—¡Eh, chicas! ¿Quieren jugar un partido amistoso? —grita Kyle acercándose con el torso desnudo y la camiseta sobre el hombro.

—No. —Es la seca respuesta de Gwen, que le da un rápido vistazo.

—Vamos —dice él, yendo hasta donde está mi amiga y colocándose contra la pared—, ¿te parece bien un juego entre capitanes?

—Sal de mi campo de juego, Danton.

—Incluso Devony jugará —dice señalándome cuando me acerco al centro del cancha—. No es una práctica real.

—Gracias por insultar mis habilidades —murmuro ofendida, aunque tenga razón. Meto los dedos en el borde de mis shorts para despegarlos de mis muslos y bajarlos un poco.

—No era mi intención, hermosa —me dedica un guiño de sus azulísimos ojos—, solo trato de convencer a esta belleza.

—Déjalo ya, Kyle —dice Eiden, que aparece detrás de mí.

Kyle suspira y parece que se dará por vencido cuando se aparta de la pared y da un paso, pero solo lo hace para acercarse a Gwen, inclinarse un poco y susurrarle algo al odio. Gwen echa la cabeza hacia atrás con los ojos muy abiertos y Kyle sonríe, intercambian un par de palabras, él hace un gesto de promesa con la mano y ella se da la vuelta para mirarnos, al resto de mis compañeras y a los chicos que se han acercado y han visto todos lo mismo que yo.

—Tengo tanta información como tú —dice Eiden cuando señalo hacia esos dos.

—Okey chicos, la capitana nos dejará jugar. No sean rudos con las señoritas.

—Ponte la camiseta —le gruñe Gwen entre dientes.

—Solo trato de ponernos a mano por lo que pasó hoy en la mañana, Caramelo. —Kyle habla a través de una sonrisa perversa—. Ya sabes, cuando...

Las inquietudes del corazón ♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora