Bucky Barnes OneShots III

Un malentendido de emociones

Prólogo: Bucky quiere acercarse a ti pero no sabe cómo, y siempre termina alejándote más y más, cuando en realidad lo único que quiere es estar contigo.

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Advertencia: Bucky triste.

Bucky no sabía por qué, pero desde que había llegado al equipo captaste su atención, sin embargo por más que lo intentara no podía conseguir acercarse a ti, al contrario, te terminaba alejando.

El único con el que realmente hablaba y era amigo era Steve, Sam también le hablaba pero no siempre lo toleraba. Wanda trataba de acercarsele para ser su amiga, pero le costaba, y así con todos los demás del equipo, quienes finalmente decidieron por darle su espacio y dejarse acercarse a ellos cuando realmente lo quisiera. Pero no tu.

A pesar de que era difícil ya que venía recién saliendo de Hydra y que le quitaran los códigos de la cabeza, tratabas de ser su amiga, pero a Bucky no parecías agradarle, hasta el punto en que enserio creías que te odiaba. Sin embargo era todo lo contrario.

El Soldado estaba perdidamente enamorado de ti, pero no sabía cómo acercarse a ti, ni tampoco podía evitar alejarte porque cada vez que le hablabas pareciera que su cerebro hiciera cortocircuito y prácticamente ni te miraba y se iba.

Una noche tarde ya pasada la 1am, no podías dormir así que te levantaste para ir a prepararte un té y así quizás relajarte.

Cuando ibas por caminando por el pasillo hacia la cocina, pasaste por fuera de la habitación de Bucky y le escuchaste sollozar.

Algo dudosa te acercaste a la puerta y golpeaste, sin embargo al no recibir respuesta decidiste entrar en caso de que le hubiese pasado algo.

–¿Bucky? Bucky soy yo, T/N... ¿puedo pasar?–Le preguntaste asomando la cabeza por la puerta.

Lo único que escuchaste fue que trataba de ocultar sus sollozos, sin embargo no podía regular su respiración.

Entraste cerrando tras de ti y fuiste hacia el gran closet que era otra pequeña habitación dentro del cuarto, y le viste sentado en el suelo con sus piernas pegadas a su pecho.

Levantó la vista hacia ti sin embargo la apartó mordiendo su labio para no llorar.

–Hey... hola... ¿Estás bien?–Le preguntaste agachándote para quedar a su nivel a unos pasos suyo.

Bucky nuevamente no dijo nada y cerró los ojos apretándolos con fuerza como si eso fuera a hacer que no le vieras.

Tragaste saliva nerviosa antes de volver a hablar.

–Sé que quizás no me quieres aquí, pero puedo ir a buscar a Steve si—. Le ibas diciendo poniéndote de pie, sin embargo su voz te interrumpió.

–P-perdóname...–Dijo con voz temblorosa y aún llorando.–Perdóname por... p-por t-todas las veces que t-te ignoré, o-o te hablé mal...

–No tienes que pedirme perdón, Bucky. Entiendo que no quieras que me acerque, y eso está bien.–Le aseguraste con voz suave, sin embargo él negó con la cabeza.

–E-es que no lo entiendes... y-yo quiero que te acerques... quiero... q-quiero poder estar cerca de ti... p-pero no sé cómo hacerlo, n-no sé qué hacer cuando estoy cerca tuyo, y-y no sé cómo dejarte entrar en... e-en mi mundo tan... horrible... no quiero arrastrarte conmigl...–Sollozó llevando ambas manos para cubrir su rostro.–N-no quiero lastimarte, p-pero también soy egoísta por... p-por querer estar cerca tuyo c-cuando podrías tener algo mejor...

Tragaste el nudo en tu garganta y te acercaste para sentarte a su lado pasando tu brazo alrededor de su espalda y atrayéndolo hacia ti.

Bucky soltó un sollozo y se abrazó a tu otro brazo dejando que le consolaras sin querer alejarse de tu lado.

Todo este tiempo mientras creías que Bucky te detestaba, en realidad lo único que él quería era poder acercarse a ti, sin embargo Hydra le había hecho tanto daño que no sabía cómo manejar sus emociones ni tampoco sabía qué hacer con ellas.

–Tranquilo James... estoy aquí contigo, y no me voy a ir mientras tu no quieras que lo haga.–Le susurraste dejando un beso en su hombro.

–Perdóname por... p-por todo... no sabía como... c-como acercarme a ti... no quiero que te vayas, por favor no me dejes...–Sollozó abrazándose a ti aún más fuerte.

–No me voy a ir, te lo prometo.–Le dijiste con una pequeña sonrisa.

Bucky se enderezó sentándose a tu lado viéndote con los ojos y mejillas llenos de lágrimas, y se acercó juntando su frente con la tuya.

–Perdóname por favor...–Te susurró con voz temblorosa aferrándose a tus manos como si su vida dependiera de ello.

–Tranquilo Buck, no pasa nada.–Le aseguraste con una sonrisa.–Siempre voy a estar aquí para ti.

Bucky se alejó viendo entre tus ojos y tus labios, antes de acercarse para besar tu mejilla y volver a abrazarte dejando ir un suspiro más tranquilo.

Tu besaste su cabeza y acariciaste su espalda para ayudar a calmarse, simplemente quedándote con él.