Bucky Barnes OneShots III

"S&M"*

Prólogo: Luego de escuchar una canción Bucky quiere intentar algunas cosas que dice la letra de esta.

Word count: 1038

El o.s está inspirado en la canción con el nombre del título de Rihanna, así que espero les guste y lo disfruten ✨️

Aguspangenbe
Advertencia: Contenido sexual explícito (sexo oral - hombre recibiendo), bondage (práctica sexual que consiste en atar o restringir a la pareja), todo es con consentimiento, lectora dominante, uso de venda para cubrir los ojos.

Bucky estaba en su cama recostado, una venda cubriendo sus ojos, su cuerpo totalmente desnudo y sus manos atadas con fuerza con una cuerda en el respaldo de su cama.

Unos días atrás durante una fiesta, Bucky escuchó por primera vez la canción "S&M", y al prestarle atención a la letra no había podido dejar de imaginar cómo sería vivirla por sí mismo... ¿y qué mejor que hacerlo contigo? La persona en la que más confiaba en todo el mundo.

–Jamás pensé que le gustarían estas cosas Sargento, que lo ataran... y sentir un poco de dolor.–Le dijiste con una sonrisita parada frente a él, mientras Bucky al escuchar tu voz sonrió ligeramente.

–El dolor se puede convertir en placer también, muñeca.–Respondió sin dejar de sonreír, ignorando el dolor en su muñeca derecha por las ataduras tan apretadas.

–Lo sé, solo no sabía que tú estarías interesado en ello.–Le dijiste subiendo a la cama para posicionarte en su regazo pasando tus uñas por su pecho hasta donde llegaste a sus pezones y les diste un ligero apretón que le hizo dar un pequeño salto con un ligero gemido escapando de sus labios.

–Quería saber cómo se sentía...

Deslizaste tu mano por su cuerpo hasta llegar a su dura y gran erección, y la tomaste para comenzar a masajearlo lentamente haciéndole soltar un gemido, tratando de mover sus caderas, sin embargo al sentirlo te detuviste por completo.

–Na-ah...–Dijiste con una sonrisita y tono de voz negativo.–No me hagas atarte por completo a la cama de nuevo.

Las marcas rojas en su cuerpo de la cuerda por haber estado amarrado por completo en la cama hasta hacía solo unos momentos seguían muy visibles, y probablemente en la mañana estarían algo moradas por la fuerza con la que él mismo te había pedido que las sujetaras, sin embargo eso solo le emocionaba aún más.

–Lo siento muñeca...–Dijo mordiendo su labio sintiendo tu mano volver a moverse.

–Muy bien...–Respondiste con una sonrisa dejando un beso en su pecho justo donde su corazón estaba latiendo con fuerza.

El no saber cual sería tu siguiente movimiento le tenía ansioso pero a la vez emocionado, y al sentir tu mano moverse nuevamente le hizo soltar un gemido tirando de la cuerda con la que sus manos estaban sujetas.

Te acomodaste entre sus piernas y te acercaste para dejar un beso en su punta, antes de pasar tu lengua por ella y luego a lo largo de su miembro.

Bucky soltó un gemido aún más fuerte al sentirte pasar tu lengua por él y a la vez que hacías eso, llevaste tu otra mano para masajear sus testículos haciendo que tirara de las cuerdas con aún más fuerza ante las sensaciones que recorrían su cuerpo.

–¿Estás bien? ¿Te duele?–Le preguntaste viendo su muñeca roja y la forma en la que tiraba de la cuerda.

–Se siente tan bien muñeca...–Dijo casi sin aire y con un pequeño gemido de por medio.

Una sonrisa se formó en tu rostro y finalmente lo metiste por completo en tu boca haciéndole soltar un gemido, y tus manos fueron hacia sus muslos donde enterraste tus uñas haciéndole soltar un quejido por el placer que le provocaba ese dolor de sentir tus dedos enterrarse en su piel más la presión de la cuerda en su brazo.

Comenzaste a mover tu cabeza a lo largo de su miembro para meterlo y sacarlo pasando tu lengua por su punta antes de volver a meterlo por completo en tu boca, haciendo que Bucky gimiera cada vez más y más.

Bucky sentía que no podía contenerse, el dolor que le provocaba placer y las grandes sensaciones que le recorrían el cuerpo entero por tus movimientos le estaba haciendo imposible durar mucho.

Seguiste moviéndote soltando un gemido alrededor de su miembro al verlo de esa forma y escucharlo, y eso fue lo último que el Sargento necesito para correrse en tu boca gimiendo tu nombre y finalmente romper las cuerdas llevando sus manos para enredarlas en tu cabello.

Soltaste un sonido de sorpresa al sentir sus manos, sin embargo lo ignoraste y solo te concentraste en tragar todo lo que tenía para dar sin dejar de moverte mientras su orgasmo pasaba.

Después de unos momentos que se sintieron eternos, Bucky colapsó en la cama luego del mejor orgasmo de su vida, la respiración agitada, tus uñas marcadas en sus muslos y la muñeca de su brazo derecho totalmente roja por la fuerza con la que tiró de la cuerda.

Lo sacaste de tu boca y dejaste un tierno beso en su abdomen antes de acomodarte a su lado quitando la venda de sus ojos, y te apoyaste en tu brazo para verlo hacia abajo.

–¿Estás bien?–Le preguntaste quitando un poco de cabello de su rostro y luego pasando tu mano por las marcas en su cuerpo.–¿Cómo te sientes?

–Se sintió tan bien muñeca...–Dijo algo agitado abriendo los ojos por fin para verte a la cara, a la vez que tomabas su mano y dejabas besos donde la cuerda quedó marcada.–Fue increíble...

–Me alegra que te haya gustado y que lo hayas disfrutado.–Le dijiste con una sonrisa acercándote para besarlo.

Bucky sonrió contra tus labios y te acomodó encima suyo deslizando sus manos hacia tu trasero para apretarlo haciéndote soltar una risita en medio del beso.

–Gracias por confiar en mi.–Le dijiste con una sonrisa acariciando sus mejillas.

–Gracias a ti por dejarme confiar en ti.–Dijo viéndote con un brillo en sus ojos y una gran sonrisa antes de volver a besarte.–¿Te gustaría intentarlo tu también?

–Pensé que nunca lo ibas a preguntar.–Respondiste sonriendo, haciéndole reír antes de volver a besarte.