CAPÍTULO 30

40 9 2
                                    

“Aygo” Escuché decir entre sueños “Jimin despierta” Volví a escuchar mientras sentía como si mi cuerpo fuera sacudido.

Levanté mi mano derecha y le pegué al ser que interrumpía mi sueño.

“Joder Jimin, despierta”

Esperen no era un ser, esa era la voz de Taehyung.

Abrí los ojos con total pereza hasta que mis pupilas reconocieran la silueta de mi mejor amigo – Mierda ¿Cómo llegaste a ese estado? – Preguntó mientras sentía sus brazos rodear mi cuerpo ayudándome a caminar.

Sentí mi suave cama a mi espalda, me acomodé de lado y sin esperar más volví a caer en el más profundo sueño.

Si tuviera que usar una palabra para describir ese día usaría la palabra asco, al abrir mis ojos el nudo en la boca de mi estómago a causa del alcohol provocaba unas inmensas ganas de vomitar, tomé un reparador estomacal y una pastilla para la resaca, obsequios de mi mejor amigo antes de irse.

-Maldición – Dije para luego acomodarme en mi cama y volver a dormir.

Cuando menos pensé ya era lunes y los síntomas del día anterior habían pasado por completo, entre murmullos y promesas de no volver a beber como lo había hecho salí de mi cama rumbo a mi nuevo trabajo.

Trabajo, trabajo de oficina, increíble, nunca esperé trabajar en una empresa mucho menos en la empresa familiar.

-Buenos días señor Park– Escuché a las chicas de recepción recibirme mientras hacían una pequeña reverencia.

-Buenos días – Contesté de forma cordial para luego dirigirme al ascensor.

Las puertas de metal se abrieron dejándome ver la silueta de un hombre – Buenos días bonito – Saludó.

-Buenos días – Respondí un poco nervioso para luego dirigirme hacia el ascensor.

Las puertas de metal se abrieron dejando ver el rostro y cuerpo de Yoongi siendo acompañados por un par de vasos de café.

-Buenos días – Saludé mientras entraba en el ascensor.

-Buenos días – Respondió para después estirar uno de los vasos hacia mi – Para ti.

-Gracias - Bajé levemente mi cabeza en señal de agradecimiento y bebí su contenido dándome cuenta que era mi café favorito - ¿Cómo sabías que me gustaba así? – Cuestioné.

-A lo que estas pensando – Clavó sus ojos en los míos – No soy un acosador – Sonrió y yo inevitablemente también lo hice – Lo dijiste cuando nos conocimos.

Parpadeé sorprendido, no recordaba haberlo dicho.

-No pensé que te acordaras de algo tan trivial – Dije dándole otro sorbo a mi bebida sin despegar mis ojos de los suyos.

-Nada que tenga que ver contigo es trivial - Contestó provocando que mi rostro se empezará a poner caliente, sonrió – Ahora si me lo permite – Las puertas del ascensor se abrieron – Déjeme escoltarlo hasta su nueva oficina.

Caminamos en un silencio cómodo, pasamos varias oficinas y saludamos a un par de personas del área administrativa, a los pocos minutos llegamos a una puerta con una placa en dorado – Park Jimin, Comunicador ejecutivo – Leí - Valla suena como si fuera un cargo importante.

-Es por que lo es – Dijo Yoongi abriendo la puerta de mi oficina.

Mis ojos divagaron por todo el espacio – Esto es increíble – Susurré viendo toda la decoración.

-¿Te gusta? – Preguntó Yoongi y yo asentí – Me Alegra – Sonrió.

-¿Todas las oficinas son así? – Pregunté pero antes de que Yoongi pudiera contestar su teléfono celular empezó a sonar.

Don't Leavy MeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora