Suit and Tie [Harry Styles] (Español)

Capítulo 44- Llamadas perdidas y gorro prestado

Mi móvil vibraba incesante. Lo ignoré tanto como pude antes de dar un par de vueltas en mi propia cama (en la que dormía, por sorpresa) e ir a gatas por el suelo al más puro estilo del ejército. Una vez lo alcancé me hice un huevo yo misma y desbloquee el iPhone.

Como sospechaba, todas las llamadas perdidas eran de Harry, con un par más de Louis y una de Liam. Junto con todas ellas había un mensaje de Perrie, a quien en seguida le cogí cariño. Pero lo más sorprendente fue una llamada perdida de mi madre.

Estaba marcando su número cuando el teléfono se iluminó y el número de Harry apareció en la pantalla. Suspiré y descolgué el teléfono, aun bostezando.

—¿Hola?

—Norah, hostia puta, ¿por qué no contestas el teléfono? —El tono agitado de su voz al otro lado de la línea me despertó casi de inmediato.

—¿Va todo bien? ¿Qué pasa?

—No, nada va bien, Norah. No te tomaste la pastilla del día después ayer.

—Joder, si sólo era eso tendría que haberme quedado en la ca...

—Norah, ¿me estás vacilando? Tenemos que ir al médico ya. Voy a mandar a James para que te recoja y nos vemos aquí. Conozco a uno que...

—No Harry.

—Nos puede atender en seguida y...

—Harry, ¿puedes callarte un minuto? —Le grité. La línea se quedó en silencio y puse los ojos en blanco al imaginarle estirándose de las puntas del pelo de esa manera tan adorable. —Me la compré ayer cuando me fui de tu apartamento. Esa mierda es cara. —Escuché un suspiro tembloroso de alivio.

—Vas a tomarte la píldora anticonceptiva. Y no hay discusión.

—No iba a discutirte eso, pero vale. —Me mordí la uña, decidiendo si debería levantarme del suelo o no. —Oye, ¿vas a venir a pasar aquí Acción de Gracias? Todo el mundo va a venir y tú también tendrías que hacerlo. Y traer vino.

—Tengo que trabajar en Acción de Gracias.

Separé el teléfono de mi oreja y lo miré con odio como si estuviera mandándole así también mi venganza. Entonces decidí que había una manera muchísimo más fácil de hacer que Harry viniera a nuestra pequeña Acción de Gracias en grupo que pelearme con él.

—Bueno, pues van a venir muchos hombres. Y probablemente bastantes strippers. Masculinos.

—No me creo una palabra de lo que dices. Tengo una reunión. E iré a tu acción de gracias. Estate lista esta noche sobre las ocho.

—Vale, ¡luego nos vemos! —Dije contenta por haberme salido con la mía.

Me colgó el teléfono y me di cuenta de que no tenía ni idea de qué me hablaba, pues no recordaba haber hecho planes con él antes de que el día anterior me dejara en casa. Pero, tratándose de Harry, tendría algún evento o me llevaría a algún restaurante de locura.

Seguía aun en el suelo de mi habitación, con las piernas estiradas en la pared y las manos detrás de la cabeza cuando entró Jace. Estaba demasiado entusiasmado para ser las ocho de la mañana y lo único que hizo que no le gritara era el olor a café que venía de la cocina.

—¡A levantarse! —Me gritó apartando mis piernas de la pared. —Hoy hay que ir a trabajar. Tenemos, en plan, reuniones y cosas.

—O podemos saltárnoslo e ir a París. —Jace elevó una ceja.

—Si no recuerdo mal, ayer te pasaste la mitad del día quejándote de que te quedaban menos de 100 dolares en la cuenta del banco por culpa de... y esto es una cita literal... "la cosa esa de la pastilla de parar bebés".