Capítulo 21- Altercados matutinos y antojo de besos

114K 4.5K 627
                                    

 Harry me despertó acariciando rítmicamente mi estómago. Notaba su cálido aliento en la parte baja de mi cuello mientras me daba pequeños mordiscos en los hombros. Fingí estar dormida para disfrutar de la sensación de sus manos cosquilleando ligeramente mis costados y sus fríos anillos de metal poniéndome la piel de gallina de vez en cuando.

-Sé que estás despierta, Norah. –Murmuró. Me quedé quieta bajo las yemas de sus dedos e intenté aguantarme la risa.

-Sigo dormida. –Contesté.

-Nunca he conocido a nadie que mienta tan mal como tú. Ahora levántate. Te vas a duchar y después te llevaré al trabajo.

Se dio la vuelta y la cama se elevó ligeramente cuando se levantó, dejando un espacio caliente donde su cuerpo estaba antes acurrucado junto a mí. Preferí remolonear entre las sábanas e inhalar los restos del olor a champú de coco en vez de hacerle caso.

-Norah. Ducha, ahora. –Dijo, elevando la voz.

Me senté, frustrada y le encontré de pie al final de la cama con los brazos cruzados sobre su pecho desnudo y con unos calzoncillos negros de Calvin Klein apretando sus delgadas caderas. Aún tenía los ojos medio cerrados por el sueño y el pelo despeinado hacia un lado. Elevó una ceja para mirarme.

-¿Has decidido ignorarme o estás demasiado centrada en mi cuerpo desnudo? Que además, déjame recordarte, que te estoy ofreciendo para placer visual en la ducha. Vamos.

-Eres aún más mandón por las mañanas. –Me quejé antes de destaparme.

Me contestó con un asentimiento de apreciación mientras me desperezaba y a continuación le seguí hacia el baño. La enorme ducha con paredes de cristal ya estaba enchufada y con vapor acumulándose. Sin ni quiera mirarme se quitó los boxers y entró en la ducha. Con incomodidad me quité su camiseta blanca y las bragas y entré con él en la ducha cubriéndome el pecho con las manos, algo intimidada.

Abrió los brazos, indicándome que me metiera con él bajo el chorro de agua. El vapor del agua fluía entre nuestros cuerpos entrelazados y yo intentaba bajar el ritmo de los latidos de mi corazón hasta un nivel en el que él no lo pudiera escuchar a través de mi pecho.

-¿Por qué estás tan tensa? –Me preguntó lentamente, dejando sus manos en mis hombros. –Y no te cubras.

Me mordí el labio cuando me giró y comenzó a masajear suavemente mis hombros, deshaciendo con los dedos los nudos de tensión. Incluso sus masajes eran perfectos. Un gran gemido de agradecimiento se escapó de mis labios mientras la tensión comenzaba a disminuir, pero entonces recordé que el hombre más guapo que había visto nunca estaba detrás de mí, completamente desnudo, en la ducha.

Me giré y escaneé su cuerpo rápidamente, sin saber ni qué hacer conmigo misma. Alzó las cejas y me mordí el labio para intentar frenar las palabras que amenazaban con salir de mi boca. Pero cuando apretó los músculos de los brazos juguetonamente perdí la cabeza.

-¡Estás desnudo! –Grité.

Mis manos no se decidían entre cubrir mi pecho y mi cara, ahora teñida de rojo. La decisión se quedó en nada cuando sus manos cogieron las mías y me apoyó contra la fría pared de azulejos de la ducha. Mi aliento se encajó en mi garganta cuando presionó su cuerpo contra el mío.

-Sí, lo estoy, Norah. Y tú también. –Dijo poco a poco.

Pude notar la sonrisa en su voz antes de abrir los ojos, momento en el que encontré su cara a centímetros de la mía y con los ojos brillantes. Caían gotas de agua por el borde de su nariz y el final de sus rizos.

-S-sí, pero en plan, estás desnudo. Y estás… joder, Harry… como que estás desnudo. Y estás, a falta de una palabra mejor, buenísimo.

Rio ligeramente y encajó su cara mojada en mi cuello.

Suit and Tie [Harry Styles] (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora