JUANI
LA HABÍA ESCUCHADO DECIRLE «TE QUIERO.» Pero el hijo de puta del guardia de seguridad le había empujado por la espalda para que no entorpeciera la cola que estaba formando por detenerse. Una vez estuvo sentado en el avión, Juani se llevó una mano al pecho a la altura de su corazón y comprobó lo que ya sabía: Que estaba a punto de estallarle de la felicidad.
—¿Lo has oído?—le preguntó a Felipe, que iba un asiento por detrás de él con tono ilusionado—. Me ha dicho que me...
—Controla ese entusiasmo, Caruso.
—No puedo.
Felipe sonrió.
—En realidad, enhorabuena. Le cuesta mucho decir esas cosas. Con lo cagona que es mi Mai-Mai, le habrá sabido la boca a papel de lija después de decir eso.
Juani se escurrió por el asiento con una sonrisa tontorrona.
Aquello tenía muchísimo más mérito: Significaba que Maia lo quería de verdad y que por eso se lo había dicho.
(•••)
La dieta lo estaba consumiendo casi al completo. Verse en el espejo tan delgado y teniendo tan pocas fuerzas lo estaba volviendo un paranoico. Por suerte, las pastillas que Alfonso le dio hacia tiempo le aliviaban el hambre y podía pasar bien el día a fin de cuentas. Que sus amigos estuvieran igual o más desesperados que él mismo por volver a comer con normalidad le ayudaba en cierto sentido. Sabía que no estaba solo y que si necesitaba algo ahí estarían los demás para ayudarle.
La grabación de la película iba sobre ruedas. Fuera aparte del tema de la comida, Juani se pasaba el día entre risas con sus compañeros, haciendo el tonto en las habitaciones del hotel con sus amigos y pasándose los descansos, las comidas y parte de las noches hablando con Maia por videollamada, por WhatsApp y por teléfono.
Sin apenas darse cuenta, llevaba ya un mes de grabación. Lo que significaba que llevaba todo ese tiempo sin verla en persona.
Hablaban durante horas sin cansarse: Él le preguntaba como le iba a ella la búsqueda de trabajo, ella acerca de las grabaciones y como se lo estaba pasando con el elenco entero y los dos se narraban con pelos y señales todo lo que había acontecido en ese día para que lo supieran todo del otro. Juani había leído en un libro que las relaciones a distancia eran muy difíciles y que la mayoría de veces no salía bien, pero por su parte al menos, él consideraba que lo estaban haciendo muy bien los dos.
Y a Maia se la veía cómoda también.
Era lo único que le importaba.
Obviamente había días en los que se echaban mucho de menos y se venían un poco abajo (eso último le pasaba a él con más frecuencia de la que quería admitir), pero ahí estaba Maia para hacerlo sentir mejor con alguna tontería y una invitación a ver una película los dos a la vez como si la estuvieran viendo juntos.
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𝐌𝐀𝐑𝐆𝐀𝐑𝐄𝐓──𝙅𝙪𝙖𝙣 𝘾𝙖𝙧𝙪𝙨𝙤
Fanfiction|𝐌𝐀𝐑𝐆𝐀𝐑𝐄𝐓| «𝐌𝐞 𝐝𝐢𝐣𝐨: ¿𝐃𝐞𝐛𝐞𝐫í𝐚 𝐬𝐚𝐥𝐭𝐚𝐫 𝐝𝐞 𝐞𝐬𝐭𝐞 𝐞𝐝𝐢𝐟𝐢𝐜𝐢𝐨 𝐚𝐡𝐨𝐫𝐚 𝐨 𝐡𝐚𝐜𝐞𝐫𝐥𝐨 𝐢𝐧𝐦𝐞𝐝𝐢𝐚𝐭𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐏𝐨𝐫𝐪𝐮𝐞, 𝐜𝐚𝐫𝐢ñ𝐨, 𝐬𝐢 𝐭𝐮 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐞𝐬𝐭á 𝐞𝐧 𝐩𝐫𝐨𝐛𝐥𝐞𝐦𝐚𝐬. 𝐁𝐞𝐛é, 𝐬𝐢 𝐭𝐮...