el tesoro || agustín pardella

6. escenas

— Sos un tarado — dijo Matías con un tono burlón.

— Hice lo que tenía que hacer — respondió Agustín, defendiendo su posición con cierta terquedad.

— Estás soltero, podrías haber aprovechado — sugirió Matías, intentando hacerle ver otro punto de vista.

Agustín suspiró, sabía que su amigo tenía razón en parte, pero había algo más que le impedía seguir ese camino.

— No, es mucho menor, y además está en algo con Enzo, aunque no debería, es muy chica para él — explicó Agustín, tratando de justificar sus acciones.

Matías puso los ojos en blanco ante la respuesta de Agustín. Sabía que su amigo estaba siendo sincero, pero también percibía una negación sutil de los verdaderos sentimientos de Agustín hacia Magnolia.

Pronto, su compañero de habitación, en aquel hotel de Granada, entró al lugar.

— Qué onda, chicos, ¿qué hablan?
— De Magnolia.— responde Matías antes de que Agustín mintieran

Enzo asintió con una pequeña sonrisa. La chica lo traía un tanto confundido.

Decidió preguntar a Agustín lo que hace semanas tenía en mente.

— ¿No tendrías problema vos si intento algo con Magnolia? — preguntó Enzo, directo y sin rodeos.

La pregunta de Enzo tomó por sorpresa a Agustín, quien se esforzó por mantener la calma y la compostura.

— No, para nada — respondió Agustín, intentando sonar convincente a pesar de la incomodidad que sentía en su interior. — ¿Por qué lo tendría?
— Me pareció que te gustaba un poco.— dijo
— Pues no, es bastante menor.

Matías observó la interacción entre Enzo y Agustín con atención, leyendo entre líneas lo que no se decía en palabras. Decidió no intervenir, al menos por el momento, consciente de que probablemente había más en juego de lo que parecía a simple vista.

Se sintió un toque en la puerta, seguido de esta abriéndose y revelando a la chica que era tema de conversación.

— Holi, les vengo a invadir.

Dicho esto se tiro a la cama desocupada y se tapo con las sábanas.

Los tres hombres la miraron divertidos.

— Sí, Lía, claro que te puedes echar en mi cama, adelante.— bromeó Enzo.
— Perdón, es que hace frío y la habitación que me tocó no tiene calefacción.

Los tres hombres coincidieron en que estaba bien que la chica se quedara.

Hablaron de muchas cosas y mientras se fue haciendo más tarde la chica sintió el sueño invadirla. No quería volver al frío cuarto que le tocó, es más, no se quería mover de ahí.

— Enzo, ¿podemos compartir la cama esta noche?

La pregunta era sin reparos, era directa e incluso hasta un poco despreocupada como era ella la mayoría de las veces, menos cuando se trataba de Agustín.

Enzo se sorprendió y al mismo tiempo se emocionó un poco, por lo que le dijo a Lía que no había problema.

Lía agradeció la calidez del cuerpo de Enzo durante la noche, hacía frío, pero el lo hacía más llevadero.

Agustín, que nunca en su vida había hecho tanta introspección como ahora, se forzó a no sentir nada, aunque la emoción estuviera ahí, presente, esperando cuando pudiera explotar. Casi no durmió, y se dedicó a ver en la noche la cama contigua a la suya donde Enzo y Magnolia descansaban.

Al día siguiente Lía empezaría a maquillar a los actores que le habían asignado. Esa mañana, cuando tocó el turno de Enzo, coincidió el hecho de que el camerino estaba totalmente solo.

— Hola.— dijo con una sonrisa
— Hola.

Él le devolvió esa sonrisa, y Lía supo que le encantaba ver sonreír a Enzo.

Empezó a maquillarlo. No pudo evitar acercarse bastante a su cara para hacerlo, permitiendo a Enzo admirar cada una de las facciones de la chica con detenimiento.

— Sos preciosa.— se le escapó.

Ella quedó con la boca abierta, jamás le habían dicho algo así de esa manera.

— Perdo...-
— Tu también eres bastante lindo.— le dijo de vuelta.

El actor sintió su cuerpo relajarse y se permitió sentir aquella emoción.

Más tarde, Magnolia aprovechó de ver algunas de las escenas que se rodaban, y pudo admirar en todo su esplendor lo grandes actores que eran absolutamente todos sus amigos.

Todos tenían algo especial.

Enzo era dedicado, transmitía en sus palabras algo que funcionaba casi como metáfora de lo que realmente le pasaba dentro, de como el personaje se sentía en verdad.

Matías lograba entrar por completo en el personaje, encontrar gestos y palabras que te hacían ver en él a quien representaba. Se convertía por completo en su personaje.

Y Agustín. No sabía si era solo porque le gustaba, pero encontraba en él un talento gigante. Entendía a su personaje de la manera más completa posible. Debía interpretar un personaje difícil de comprender, uno de los primeros en entender que haría lo que sea por sobrevivir, y Agustín lograba retratar eso no desde el egoísmo, sino más bien pensando en todos, pensando en salvarlos a todos. Aquello era algo difícil de transmitir, se podía caer fácilmente en la desesperación de la salvación propia, pero Agustín lograba hacer notar esa diferencia.

Vivir por los que quieres.

Esto es lo que le encantaba de su trabajo. Soñaba el día en el que pudiera presenciar algo como esto, y es mejor de lo que imaginaba.

— Tu marido lo hace bien, eh.

Volteó para ver a Paula como la dueña de aquellas palabras.

— No es mi marido.
— Aún.

Ella rió irónicamente.

— Me dijo que había sido un error el beso.
— ¿Qué?, ¿cómo?, ¿cuándo?
— En la fiesta en casa de Blas.

Paula asintió lentamente.

— ¿Qué harás ahora?— cuestionó ella— Gusta de vos, estoy segura, ¿por qué te habrá dicho que fue un error?
— Claramente no le intereso de esa forma, ya está, solo me queda hacerme bolita y llorar un rato

La actriz negó ante las palabras de su amiga.

— No te hagas bolita.
— Muy tarde, es la primera cosa que haré cuando llegue al cuarto frío y solitario que tengo.
— Bueno, ven al mío, ahí si puedes hacerte bolita, si realmente lo necesitas, mientras hay calefacción.

Lía asintió.

— Ay, ¿dónde está mi twitero favorito cuando hace falta?
— Va a grabar una escena, no te preocupes que doy mejores consejos que Juani.

Ambas rieron.

— No hay duda, solo quería escuchar sus comentarios de mierda mientras le contaba la situación.

Ambas, que ya habían terminado sus obligaciones partieron al cuarto de la mayor, donde por fin lo soltaría todo.

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holis

¿cómo estuvo el watch party?, ¿les gustó?
a mi no me contestó nadie, pero de todas maneras me emocionó muchísimo el stream de mi amigo personal juanicar ☺️.

estoy muy emocionada de que le esté yendo bien a la historia, muchas gracias.