Semanas antes.
Kakashi Zoldyck, primo del fallecido Toji Zoldyck, anterior líder de la familia y el clan Zoldyck. Había sido enviado por su sobrino a interceptar a un inglés que llegaría al territorio de Kyoto a un hospital mágico para lesiones mentales. Se había llevado a cinco de sus mejores gakis para dicha tarea.
Sirius Black que no hacía mucho tiempo que había pisado la tierra del sol naciente, por medio de la red Flu internacional, se quedó confundido cuando notó que un grupo de seis personas comandados por un adulto de cabello blanco se acercaban a su dirección.
"¿Hablas nihongo?" Preguntó el hombre de cabello blanco.
Sirius no pudo evitar sentirse un poco cohibido al no saber que era eso y notar que el hombre estaba esperando una respuesta. "Lo lamento, yo uhmm..." Sirius intentó recordar algo pero su mente estaba muy lastimada.
"No importa, tú vienes con nosotros, te llevaremos a un buen lugar para tratar tus heridas." Kakashi ordenó a uno de los gakis ayudarlo a caminar porque Sirius aún estaba físicamente muy débil.
Sirius no sabía qué pensar en esa situación, vagamente recordaba haber visto a dos adolescentes con el mismo cabello blanco en el juicio y pensó que algo tenía que ver. Un corto paseo más tarde habían ido al parque central de Kyoto para entregarle parte de una soga, Sirius adivinó que se trataba de un traslador.
Sirius no pudo evitar caerse por el traslador al no tener tanta fuerza física, sin embargo, vio como el sujeto de cabello blanco les habló en japonés a dos de los hombres que lo acompañaban y de inmediato lo ayudaron a levantarse y se lo llevaron en hombros a una impresionante propiedad ancestral directamente a la ducha, iba a protestar hasta que se olió a sí mismo para darse cuenta de que aún olía muy mal.
Volvió a sentirse cohibido cuando de repente los hombres comenzaron a desvestirlo hasta que finalmente se animó a hablar. "No vayan a tirar eso por favor."
Los hombre siguieron en lo suyo enjabonándolo y cepillándolo con sumo cuidado, uno de los hombres puso sus pertenencias en una canasta. "¿Es todo?"
"Sí, por ahora solo eso tengo."
Sirius iba a decir algo más cuando de repente comenzaron a verterle champú. Diez minutos después, Sirius estaba bañado, afeitado y con el cabello luciendo y oliendo mejor que nunca después de doce años en prisión, uno de los hombres le enseñó como ponerse un yukata adecuadamente y lo guiaron a una habitación tradicional japonesa, había una jarra con un té que olía muy bien. Uno de los hombres le enseñó como sentarse adecuadamente en uno de los cojines, también le ofrecieron té a lo que Sirius aceptó con gusto.
Momentos después, una bella mujer joven entró a la habitación, Sirius se quedó impresionado por la presencia tan elegante de la misteriosa mujer de cabello negro y ojos rojos. Sirius tragó saliva porque todo apuntaba que ella era la que mandaba en el lugar.
Le elegante mujer se inclinó respetuosamente desde la cintura sin apartar la mirada. "Buenas tardes."
"Buenas tardes" Sirius tartamudeo un poco.
"Mi nombre es Sarah Zoldyck, actual jefa de la Casa Noble y Ancestral Zoldyck."
Sirius lo pensó un poco y decidió inclinarse como había visto que ella lo hizo. "Mi nombre es Sirius Black, encantado de conocerla."
Sarah sonrió levemente. "Igualmente señor Black."
Sirius se confundió un poco porque la mujer enfrente no parecía japonesa pero aún así era la jefa de una casa ancestral en Japón por lo que recordó que allí se dirigen a una persona por el apellido. "Puede llamarme por mi nombre si lo prefiere."
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Harry Potter: La casa Noble y Ancestral Zoldyck
CasualeDespués de una tragedia que cobra la vida de dos hermanos, una deidad misteriosa les ofrece una segunda oportunidad para renacer en un nuevo mundo. Dotados con habilidades mágicas de otro mundo, intentarán cambiar la historia ya escrita hacia una má...