16. Una Lúgubre Noche.

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Peter había acordado en ver a la rubia en aquel café.

Su plan, el cual fue elaborado muy pobremente, era acercarse a Gwen, su amiga y la actual pareja de Brock para preguntarle si todo andaba bien con él.

Peter esperaba sentado en la mesa que se encontraba en la acera de aquel café, era un buen día, quizá, si no encontraba nada sospechoso en la actitud de Brock, se quedaría un rato con su amiga para hablar de tantas cosas y pasar el tiempo. Pensaba que también lo merecía después de tantas cosas.

La chica llegó un momento después.
Llevaba una diadema que evitaba que los mechones de su cabello claro le cayeran al rostro. Peter, cuando aún no se había enamorado de otra persona, pensó que estaba teniendo un enamoramiento irremediable con ella, sin embargo después de saber lo que un verdadero enamoramiento era, entendía que la chica era solamente muy guapa.

Quizá en otra vida, pensó tontamente.

—Hola, Peter.

—Hola, Gwen, siéntate, por favor.

Se saludaron de beso de mejillas y ambos se sentaron frente a aquella mesa.

—¿Cómo estás?, ¿sobreviviste al baile?

En ese momento era más como una broma inocente.

—Sí claro, una vez ví lo que pasaba corrí muy lejos de allí.

—Debiste verlo, llegó el hombre araña y todo fue muy loco. ¿Supiste que Flash era quien tenía esa cosa adentro?

—¿En serio?, no puedo imaginarlo, ¿por qué, qué dijeron de eso?

—Nada, nadie dice nada, como si jamás hubiera pasado. Odio eso, y al final el hombre araña siempre queda como el malo en todos lados.

La chica le mostró el periódico de un día después de lo sucedido a Peter, este lo tomó entre sus manos.

"El hombre araña ataca de nuevo."

Sintió vivido enojo ¿quién demonios escribia eso?, ¿por qué no podían entender que solo quería ayudar sin nada a cambio, y que por ello, arriesgaba su vida todos los días?
Calmó sus pensamientos, nadie se lo había pedido tampoco, era un arma de doble filo.

Peter ordenó un café simple porque en realidad no sabía nada acerca de café y sus variables, Gwen por su parte ordenó un capuchino que rápidamente llegó hasta su mesa.

—¿Cómo estuviste tu después de eso?, ¿cómo estuvo Brock?

La rubia lo miró extrañado.

—¿Por qué preguntas por Eddie?

—Oh, Ned me contó que lo vio entrar al gimnasio mientras eso estaba adentro.

—Sí, bueno, está bien. Un poco aturdido después de lo sucedido, estuvo con Flash esa noche en el hospital pero ya está bastante bien.

Peter no quería que la chica notase que solo se preocupaba por su novio.

—¿Y tú, estás bien?

—Sí, por supuesto, me asusté como todos pero por suerte apareció el hombre araña. Todo está bien gracias a él.

Peter sonrió, era curioso sentir esa satisfacción cuando alguien decía algo como eso, pero también era difícil tener que fingir que no se sentía maravillado.

Peter sonrió, era curioso sentir esa satisfacción cuando alguien decía algo como eso, pero también era difícil tener que fingir que no se sentía maravillado

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What If... (Starker)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora