𝐚 𝐭𝐮 𝐯𝐞𝐫𝐚

𝐧𝐮𝐧𝐜𝐚 𝐡𝐞 𝐬𝐞𝐧𝐭𝐢𝐝𝐨 𝐞𝐬𝐭𝐨

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martin
el viernes cuando salimos de clase vamos con bea a comer a un bar que hay aquí cerca que nos gusta mucho
pasaremos la tarde juntos y después me iré a dormir a casa de juanjo

cuando llegamos y nos sentamos esperando a que nos tomen nota me pregunta
—¿y les has pedido permiso a tus padres para dormir con él?
—bueno no tal cual, simplemente les he dicho que duermo con un amigo –ruedo los ojos moviendo mis manos–
—¿en realidad no sois novios formales, no?
—que va, bea piensa que aunque parezca que hace más tiempo, nos conocemos desde el lunes de la semana pasada, es que han ocurrido tantas cosas en tan poco... realmente me da un poco de vértigo pero estoy demasiado a gusto con él jo –suspiro pensativo–
—wow es verdad, madre mía si os conocisteis hace nada –se da cuenta sorprendida–
—si... respecto a eso, ¿te puedo preguntar algo?
—claro amor –acaricia mi mano encima de la mesa–

—¿crees que nos estamos precipitando mucho yendo tan rápido? es la primera vez que vivo algo tan intenso y no sé si estoy haciendo bien
—martin, ¿acabas de decir que estás a gusto, verdad? –pregunta y yo asiento seguro de ello– —pues fin, entiendo que te raye pero no te cohibas, va todo bien entre vosotros y se trata simplemente de ir viendo cómo evoluciona la cosa, marcar los límites que creáis necesarios y disfrutar de lo que estáis construyendo jo, es muy bonito haber encontrado a alguien tan afín a ti y lo mucho que conectáis desde el minuto uno
—ya... es que ya, nunca he sentido esto –admito en voz muy bajita–
—eso es precioso martin –aprieta mi mano sonriendo– —no le des más vueltas amor, poco a poco
—gracias por apoyarme siempre y por tus consejos, son muy importantes para mi, eres muy importante para mí –aseguro sincero–
—y tú para mí, mi niño
—te quiero mucho bea
—y yo a ti cariño
sin necesidad de volver a hablar, nos levantamos de nuestras sillas y nos abrazamos con fuerza

conozco a bea desde hace algo más de un año, entramos juntos a la carrera de empresariales y nos llevamos increíble desde el principio, de ahí en adelante somos inseparables y es mi mayor apoyo aquí desde que me mudé de getxo

nos sentamos de nuevo y esta vez es ella la que me empieza a contar como van las cosas con claudia
—pues creo que ya lo hemos arreglado, ayer por la tarde quedamos y hablamos con calma, está pasando una mala época en casa con sus padres, se quiere independizar pero no encuentra curro y lleva un agobio increíble encima –explica suspirando–
—joder pobre, bueno, pues si ya está todo solucionado genial, al final lleváis unos 2 años, es normal que hayan roces pero es lo que me has dicho tú a mi, hablando, las cosas se entienden y se solucionan
—si –sonríe ligeramente y nos toman nota–
pedimos un par de bocadillos y comemos charlando de tonterías tranquilamente

al terminar de comer damos una vuelta por la zona y para las 19h cogemos el bus de siempre, yo hacia casa de juanjo y ella hacia la suya
al llegar a su parada bea me abraza con fuerza pidiendo que el lunes a primera hora le cuente todo lo que pase este finde
unas cuantas paradas más adelante me bajo yo y camino un par de calles hasta llegar a su edificio

pico a su interfono y tras oír su voz preguntar veo cómo abre el portal
subo las escaleras ya que vive en un primero y al llegar le veo esperándome apoyado en el marco de su puerta
—hola guapo –sonríe agarrando mi chaqueta y junta nuestros labios en un suave pico– —hoy no me has buscado en la uni
—ni tú a mí, listo –chasqueo mi lengua–
—pasa anda que te presento a los chavales –se hace a un lado y me pone por delante suyo–
—me da vergüenza juanjo –hablo tocando mis manos nervioso, aún no he conocido a nadie de su entorno–
—que no pasa nada idiota, son buena gente

llegamos al salón donde veo a dos chicos, uno de pelo completamente negro y otro rubio algo rapado
—chicos, este es martin, martin, zack –señala al rubio– —y dídac –ahora hace lo mismo con el otro chaval–
no se muy bien como saludarles pero finalmente nos acabamos dando dos besos como presentación
—encantado tío –me sonríe dídac–
—igualmente –sonrío algo cohibido–
hablamos unos minutos y finalmente zack se despide de nosotros para meterse en su cuarto
— no tardaré mucho en cenar y acostarme, mañana curro, no hagáis mucho ruido porfa –pide con un claro acento inglés–
—¿qué ruido vamos a hacer pringado? anda tira –ríe juanjo empujándole hacia su habitación–
—doncs a mi me la sua si feu soroll, jo em quedaré aquí veient la tele –habla dídac en catalán asegurando que no le importa lo que hagamos porque se va a quedar viendo la tele–
—pues ala chulo –juanjo y él chocan sus puños y seguidamente nos metemos en su habitación–