𝐚 𝐭𝐮 𝐯𝐞𝐫𝐚

𝐪𝐮𝐢𝐞𝐫𝐨 𝐞𝐬𝐭𝐚𝐫 𝐜𝐨𝐧𝐭𝐢𝐠𝐨

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martin
llego a clase y ángeles me mira preocupada
—¿todo bien martin?
—si, tranquila, gracias
me siento al lado de bea que pone cara de no entender nada —¿que ha pasado amor?
—luego te cuento, flipas –susurro y le presto atención a la clase–

en el siguiente descanso bea me mira impaciente para que le cuente lo que ha pasado
— mira es que ha sido muy fuerte todo ¿sabes que te he dicho que iba a ver a juanjo en el recreo como siempre no?
—si amor
— pues resulta que antes de bajar de su edificio ha ido al baño a mear, pero estaba tardando como 15 minutos en salir y no me parecía normal, le mandaba mensajes, no contestaba, entonces he ido a por él y me encuentro con la puta escena de tres hijos de puta insultándole a muerte cosas tipo maricón y a juanjo en el suelo con la nariz sangrando –explico cabreado–

—no me jodas que le han pegado –se tapa la boca sorprendida–
— si bea si, le han pegado y han estado apunto de pegarme a mí pero no sé ni cómo les he sacado cojones y se han acabado pirando, total que después de eso le he tenido que ayudar, hemos ido al despacho de la directora, se lo hemos contado a ella y a nuestros tutores... –paro a respirar ya que estoy hablando de carrerilla– un follón... –resoplo llevándome la mano a la frente–

—joder martin, vaya puta mierda, ven –me abraza– —que asco que gente, ¿pero estáis bien?
—si si tranquila, ahora viene lo bueno –me separo sonriendo–
—¿ah pero que hay más? –sube las cejas incrédula–
—escucha, después de contarles eso los profes nos han dejado salir a la cafetería a despejarnos, porque yo me agobiado bastante, y ahí pues he sugerido no estar tan juntos en público y tal por miedo a que nos vuelva a pasar algo, pero él me lo ha impedido totalmente y... –me callo sonriendo como un imbécil–

—¿y que? sigue –golpea mi mano emocionada–
—me ha dicho te quiero bea –susurro muerto de amor solo de recordarlo–
—ay mi niño –acuna mi cara al verme así–
—me ha dicho te quiero y yo se lo he devuelto obviamente, pero es que además no sé cómo, me he atrevido a pedirle que sea mi novio, somos pareja tía –explico completamente feliz y aun sin creérmelo–

—martin amor, eso es increíble, que bonito jo, me alegro muchísimo –acaricia mi mano sonriendo– — ¿pues vaya ratito más intenso no? lo malo ha sido muy malo, pero es que lo bueno ha sido demasiado bueno
—literal, han sido mil emociones distintas en cuestión de media hora
—pues a intentar olvidar a los gilipollas esos y a disfrutar de la relación cariño –aprieta mi mano y entra el profesor de las últimas dos clases–

a la hora de la salida espero a juanjo en la puerta tal y como hemos quedado antes
nada más salir y verme, empieza a correr hacia mi sonriendo muchísimo

—holaaa –habla con voz de bebé tirándose a abrazarme–
—hola mi chico –cierro los ojos feliz apretándole contra mi– —¿que tal el resto del día, te los has vuelto a encontrar? –pregunto cuando nos separamos ligeramente–

—que va ¿DONDE ESTÁ EL POL ESE? QUE QUIERO QUE VEA COMO LE METO LA LENGUA HASTA LA CAMPANILLA A MI NOVIO –habla fuerte mirando a nuestro alrededor–
—calla idiota –golpeo suavemente su cara–

me besa con ganas sonriendo prácticamente en mi boca
hijo de puta, me vuelve completamente loco

—¿te dejo en casa? –empezamos a caminar hacia su coche–
asiento y agarro su mano
— oye una cosa que me ha dejado loco, ¿porque has ido a por mí al baño si habíamos quedado en la cafetería?
— se lo he explicado antes a bea, porque has tardado como 15 minutos y no me respondías los mensajes que te estaba mandando, por lo tanto me he preocupado y he ido a buscarte, y menos mal –suspiro–
—gracias por venir y defenderme
—no hay nada que agradecer bonito –beso su mejilla y aprieto nuestro agarre–