𝐚 𝐭𝐮 𝐯𝐞𝐫𝐚

𝐧𝐨𝐥𝐚 𝐳𝐚𝐢𝐧𝐝𝐮 𝐧𝐢𝐧𝐝𝐮𝐳𝐮𝐧 𝐚𝐡𝐚𝐳𝐭𝐮 𝐠𝐚𝐛𝐞

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martin
estoy en el sofá esperando a juanjo y en ese momento pican al interfono

—abro yo –habla maria fuerte–
—ondo –digo que vale en euskera–

oigo la puerta abrirse y seguidamente a canela ladrar

—hola mi vida –escucho la voz de juanjo hablandole en un tono demasiado adorable– —hola maria –se dan dos besos–
—kaixo, ahi en el sofa tienes al lisiado
–rie y segundos después le veo aparecer en el salón–

—pero martin... –se aceca a mi deprisa y yo hago un puchero– —eso te opasa por bohemio -rie-
—tonto –golpeo su pierna y se agacha ligeramente para abrazarme despacio–

le dejo espacio en el sofá y pongo mi piena en su regazo encima de un cojin

—no te vas a librar de mi ni con la pata rota listillo –bromea scacandome la lengua–
—no tendré esa suerte, no –vacilo rodando lo ojos–

aprienta ligeramente mi cintura para hacerme cosquillas y seguimos viendo la serie tranquilos

rato después mis padres entran al salón, maria esta en su cuarto

—hombre pero si tenemos un nuevo inquilino –habla mi madre divertida–
—kaixo –les saluda en eukera haciendome morir de amor– —me levantaria a saludar pero esta complicado –señala mi perna encima suyo–
—tranquilo chaval, nios alegramos mucho de tenerte por aqui, gracias por venir a cuidar al cojito –rie mi aita–
—encantado de hacer de enfermero –me mira arrugando la naricita–

mis padres se acercan a saludarnos a los dos y van hacia la cocina a guardar la compra

—mi cojico –me hace burla tiernamente–
—si has venido a reirte de mi te vas
–señalo la puerta de coña–
—ah pues si quieres me voy –rie haciendo el amago de levantarse–
—no no no, no te vayas que estoy malito –hago un puchero rapidamente para darle pena–
—eres mas sinverguenza... –niega con la cabeza divertido tocando mi barriga ya que no llega mas alla por la posición en la que estamos–