𝐚 𝐭𝐮 𝐯𝐞𝐫𝐚

𝐢𝐧𝐭𝐞𝐧𝐭𝐚𝐫𝐢𝐚 𝐭𝐨𝐝𝐨 𝐞𝐬𝐭𝐨 𝐝𝐞 𝐧𝐮𝐞𝐯𝐨

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juanjo
a la mañana siguiente me despierto notando varios besos por mi cara, tal y como me he dormido esta madrugada

—despierta bonito, son las 10 –oigo la voz de martin en mi oido–
—no me quiero mover de aqui –suspiro aun adormilado–
—va juanji, hay que bajar a desayunar aunque sea
abro los ojos y resoplo con fuerza

—no, vamos a mi casa –pido–
—¿estas seguro? –agarra mi mano–
—si, necesito decirselo, no puedo seguir con carmen ni un solo dis más –aseguro– —vamos

nos aseamos y salimos del hotel tras darle los buenos dias a bea en su habitación
andamos un par de calles ya que nada en magallón esta lejos y antes de subir a mi piso cojo todo el aire posible

—va a ir bien cariño –martin se aferra a mi mano y besa suavemente mi brazo para darme fuerza–

subimos y abro la puerta con mis llaves
—hola –saludo alto para que me oigan–
—hola mi niño, buenos dias –mi madre sale de la cocina y acaricia mi cara–

—mamá, este es martin –le presento timido–
—encantada martín, soy nieves cariño –se dan dos besos–
—es martin, sin tilde –rio ya que no hay cosa que odie más–
—tranqui, encantado –sonrie restando importancia–

—¿y que sois amigos de barcelona? –pregunta mi madre y yo me tenso ligeramente–
—vamos al salón, necesito hablar con vosotros –-trago saliva–

nos dirigimos al comedor donde se encantran mi padre y mi hermano en el sofá
—el niño ha traido visita, saludad –habla mi madre y ellos tres se presentan–
martin y yo tomamos asiento en el sofa y mi familia se sienta en sillas delante nuestro

—bueno, lo primero que necesito que sepais es que no puedo seguir viendo a carmen –suspiro–
—¿por que cariño? si es muy buena chica –pregunta mi madre–
—porque no siento nada por ella, es una chica increible pero no me atrae de esa forma
—bueno juanjo, es normal que no estes enamorado, apenas llevais dos semanas, poco a poco
—mamá, te aseguro que en dos semanas se puede sentir todo –miro a martin sonriendo al recordar lo intenso que fue al principio–
—¿que pasa cariño, porque con ella no?

—ya se lo que pasa aqui –rie mi hermano–
—javier callate –le miro nervioso–
—es mas que evidente la razón –sigue–
—por favor –suplico y él sube las manos en señal de rendición–

—no entiendo nada hijo, dinos que ocurre –pide mi madre confusa–
—creo que no siento lo que deberia sentir por carmen porque... –me callo–

en ese momento martin roza muy sutilmente nuestros dedos dandome la confianza necesaria para agarrar su mano con fuerza y continuar hablando

—porque estoy enamorado de martin
–suelto con una seguridad que ni yo mismo creia posible–

—ahi está –javier suelta una carcajada–

—estuvimos juntos unos meses en barcelona, lo dejamos cuando me tuve que volver oero sigo sintiendo lo mismo que el primer dia por él, no hay espacio para nadie más en mi mente –suspiro–

—mi vida... –mi madre se levanta de la silla rapidamente y tras hacer yo lo mismo, nis abrazamos con fuerza–
—habernoslo dicho antes juanjo, ahora todo tiene sentido –acuna mi cara entre sus manos–

—me daba miedo vuestra reaccion y decepcionaron si no aceptaba salir con carmen, es la nieta de romina –nombro a la amiga de mi abuela–
—eso no tiene ninguna importancia, luego habbo con la abuela y se acabó
—no no mamá, dejame hablar a mi con carmen, no se merece enterarse por terceras personas, no soy tan cabrón –pido riendo–
—como quieras cariño –besa mi majila–